Señor Director,
Rapa Nui está en una gran encrucijada. La lejanía de la isla no ha sido obstáculo para atraer cada vez más visitantes de diversos rincones del mundo. Según estadísticas de Conaf, las visitas se duplicaron entre el 2004 y el 2008 y ya superan los 46 mil turistas, prácticamente diez veces más que los residentes. Comparativamente, es como si Santiago recibiera más de 60 millones de visitantes anuales. Dantesco. Este aumento de turistas y paulatino deterioro del patrimonio acusa ausencia de planificación o de existir tal instrumento, fallas garrafales en su diseño o aplicación. No se tomaron medidas oportunas ni menos eficaces para evitar todo lo acontecido y sólo la acción desesperada de los Rapa Nui, como fue la "toma" de Mataveri, gatilló una reacción de parte de las autoridades. La emergencia a estas alturas no es menor y puede tener insospechadas consecuencias en el patrimonio pascuense. La preservación de la inigualable riqueza cultural de Rapa Nui depende de las decisiones que se tomen ahora, antes del término de este gobierno. El futuro desarrollo del turismo en la isla no puede ser otro que uno sustentable y responsable, por tanto la medida propuesta por el subsecretario del interior, Patricio Rosende, de subir el valor de entrada al Parque Nacional a USD 20 para los visitantes nacionales y a USD 60 para los extranjeros, obteniendo con ello ingresos de más de 2 millones de dólares, si bien es una medida correcta, es insuficiente. En un caso hipotético como el propuesto, me parece mejor cobrar a los extranjeros USD 100 con posibilidades de reembolsarles USD 40 si exhiben a su salida comprobantes de compras de artesanía pascuense por un monto igual o superior a USD 40. Regular la radicación de personas no pertenecientes a la etnia Rapa Nui es otra decisión correcta, pero el problema medular, el del explosivo crecimiento de turistas, no se resuelve con ninguna de las medidas que se han anunciado hasta la fecha. Rapa Nui tiene, al igual que muchos otros recursos turísticos del mundo, una capacidad limitada para recibir turistas. Esa capacidad es la que hay que calcular bien y regular, ahora, y no en cuatro años más cuando sea demasiado tarde.

Ricardo Viteri Prado
Consultor en Turismo
Ex Jefe Unidad de Turismo de Aventuras y Ecoturismo de Sernatur
ricardovp@vtr.net