28.649 millones de pesos en utilidades obtuvo el sistema de Isapres durante enero, febrero y marzo de este año, según informó la Superintendencia de Salud en la mañana de este jueves.

La rentabilidad es menor en un 11,7 por ciento a la registrada durante los tres primeros meses del año pasado, pero aun así representa el 42 por ciento del total de utilidades que generaron las Isapres durante el 2011, es decir, más de 68 mil millones de pesos.

El superintendente de Salud, Luis Romero, calificó las ganancias del sistema como “esperadas” y añadió que la proyección de utilidades para este año debiera descender a “niveles históricos”.

“Dadas las correcciones que se le han hecho al sistema, como el IPC de la salud, hay una tendencia hacia una corrección a valores históricos, por lo que esperamos que este año los resultados de las Isapres estén bastante más acomodadas a los valores históricos que han tenido y no como en años anteriores que vimos que tenían resultados muy superiores a los valores históricos. Eso produce siempre conflicto entre la ciudadanía y las Isapres, que exigen que esto sea algo más racional”, sostuvo el superintendente.

Las Isapres que generaron más utilidades fueron Banmédica y Colmena, con ganancias superiores a los seis mil millones de pesos; Consalud, con 5.300 millones; Cruz Blanca, con 4.500; y Masvida con Vida Tres, con ganancias superiores a los 2.500 millones de pesos.

Romero se refirió también al proyecto de ley que modifica la normativa que rige a las Isapres, que podría cambiar de referencial a vinculante el reajuste en los planes de salud, de acuerdo al IPC entregado por la Superintendencia: “La idea principal del IPC de la Salud es que los aumentos de precios de los planes de las Isapres vayan directamente en  relación al aumento real y efectivo de los costos de la salud. Eso deberá ir manteniendo estos valores históricos de utilidades”, dijo.

La autoridad dijo que al proyecto, “que puede regular las utilidades de la industria en parámetros razonables”, no se le pondrá suma urgencia para acelerar su tramitación.

El superintendente indicó que trabajarán con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) durante este año para elaborar el IPC de la Salud, esté o no el proyecto de ley aprobado, y que esperan que se respete este indicador, a diferencia de lo que ocurrió a comienzos de este año, cuando el organismo lo cifró en un 2,4 y las Isapres reajustaron sus planes en un 6,8.

“El proyecto le resuelve el problema a las Isapres”

Una visión contraria manifestó el diputado socialista y miembro de la comisión de Salud de la Cámara, Manuel Monsalve.

Según el parlamentario, la iniciativa sería insuficiente, debido a que los planes no están contratados en pesos y favorecería, además, a las Isapres, ya que sería un indicador referencial y no vinculante: “El afiliado contrata un plan basado en un costo por UF, que se reajusta todos los días. Unas de las formas de reajuste de la UF recoge la variación del IPC. Por tanto, el alza del IPC está incorporada a la UF. Si contratas un plan que se va a reajustando día a día de acuerdo a la variación de los precios y además de la UF vas a colocar un IPC de la salud, que podría ser cuatro por ciento, significa que la gente va a pagar el IPC dos veces. Claramente, eso beneficia a las isapres”, explicó.

Monsalve agregó que el proyecto no resuelve dos temas clave del sistema: su estructura de costos poco conocida y la facultad que tienen de elevar los precios de los planes de forma “antojadiza”.

“Estos dos temas han permitido a las isapres tener ganancias millonarias y a los afiliados no tener la protección que el Estado debería asegurarles, independiente de que una institución privada les preste el seguro de salud. Lamentablemente, estos dos temas no se resuelven en el proyecto presentado por el Gobierno, que le resuelve el problema a las isapres y va a permitir que sigan teniendo ganancias millonarias. No avanza en proteger mejor los derechos de los chilenos afiliados a las isapres”, cuestionó.

Finalmente, Monsalve indicó que el texto, que se encuentra en primer trámite en la Cámara, incluye la frecuencia de uso del plan como factor para calcular el IPC, lo que calificó como “inconstitucional”, debido a que “no se puede castigar a la gente por hacer uso de la seguridad social”.

“Si se aprueba el proyecto tal como está, las ganancias no van a bajar, sino que van a aumentar”, sentenció el parlamentario.