Señor Director:

Soy uno de los tantos chileno radicado en el extrangero debido al mutado, Pinochet, que debería ser exahumado para ver hasta dónde llega el nivel de la traicion, el crimen y la bestialidad en la especie humana. Un caso digno de estudio.

En efecto, aislado de lo mío, esto de sentirse “afuera”, es como vivir siempre en una isla, y aunque pareciera ser malhonesto este sentimiento, por familia, mujer, hijos y flores que me acompanan, no dejo de añorar la ausencia, que me acompaña también fielmente.

Gracias a la radio-satelite, escucho todos los díaas su radio Universidad de Chile y aprecio mucho la programcion, sobre todo, sus comentarios políticos. Tienen la sutileza la voz, la tranquilidad y la inteligencia de los analisis de ‘france cuture” y por esta misma razon es que me permito hacerle algunos comentarios que me parecen indispensables como sugerencias :

a)Creo sincermente que el eslogan: “LA RADIO QUE PIENSA” es protencioso. No tienen necesidad de repetirlo como muletilla; pues seguramente debe crear gratuitamente malestar en algunos otros colegas radiales. Es el público, el auditor, el soberano que debe juzgarlo. Aprecio mucho vuestros análisis, invitados, y comentarios de manera que no hay necesidad de repetirlo. La calidad se impone dice el proverbio.

b) El programa deportivo es francamente insoportablemente agresivo. Se diría un match donde los jugadores salen al terreno a jugar un partido de futbol, pero sin arbitro. Sus animadores adolecen de la serenidad y calma que se requiere para escuchar con atencion las sin dudas acertades aseveraciones. Falta alguien que imponga la calma

c) El señor que lee las informaciones me parece muy competente, correcto y bien argumentado en sus análisis , pero parece niñito cuando lee las informaciones. No es él solo. No bajan la tonalidad en los “puntos”, (donde termina la idea)  ni la mantiene o sube en las comas (donde se hace una pausa).  Se diría Universidad Centroamericano: cubano, venezolano.  Por razones políticas conozco ese estilo “cantao” de comunicar guitarrreando, que por lo demas, me agrada mucho, pero en ellos, no en nosotros, los chilenos, que tenemos otro clima.

d) La cortina musical también me parece cansadora. Den cabida también a otros ritmos y melodías. Aunque este sea un mandato publitario, de vez en cuando y como revolucionario que aun me siento, me gustan los cambios.

Con las disculpas que requieren mis agrias argumentaciones y si algo retiene su atención en lo que pudiera ser mi intención, le saluda muy cordialemente

Norton Maza F.