Este 2013 se cumplen 40 años del Golpe de Estado que culminó con el suicidio del Presidente Salvador Allende, el bombardeo de La Moneda, la prisión, muerte, tortura, exilio, persecución y violación de los derechos humanos de miles de chilenos y chilenas. El Museo de la Solidaridad Salvador Allende creó un proyecto artístico concebido como una conmemoración, pero a la vez como una colaboración para restaurar simbólicamente las heridas provocadas por el quiebre democrático y la represión.

Se ha denominado Cartografía de la Resiliencia, en alusión a la capacidad de las personas para sobreponerse a los dolores y los traumas, y consta de cuatro exposiciones. La que se inaugura el 25 de junio es la segunda, y se ha denominado Imaginarios de la Resistencia. Alude a que las heridas provocadas por la dictadura salen del ámbito institucional y se trasladan al cuerpo. Al cuerpo humano víctima de la violencia; al cuerpo abstracto del estado y sus instituciones; al victimario, convertido en “bestia”; a los poderes de todo tipo que colaboran con la dictadura; a los que resisten el apremio por diversas vías.

Cada uno de estos conceptos están plasmado en otro cuerpo: un cuerpo de más de 100 obras que fueron donadas al MSSA como un llamado de atención, una denuncia de lo que ocurría en Chile.

Son trabajos de reconocidos artistas de todo el mundo que donaron a un museo que ya no existía –pues fue clausurado en Chile tras el Golpe– pero que a partir de 1975 se rearmó en diferentes países bajo el nombre de Museos de la Resistencia. Su propósito: mantener el Museo de la Solidaridad y a la vez mostrar su repudio a la dictadura.

Las obras que se exhiben en Imaginarios de la Resistencia grafican lo central de todos los momentos posteriores al quiebre democrático: la violencia.