“La idea de trabajar en torno al choque se originó dentro del contexto de la universidad, al compartir ciertos ejes de trabajo similares entre sí”, señalan María Jesús Schultz, Catalina Rozas y Etienne Cristoffanini, artistas recientemente egresados de la Universidad de Chile que este miércoles 23 inauguran la exposición El mito del progreso.
Los tres comenzaron a dar forma a la muestra luego de que Cristoffanini, “con la idea fija de trabajar con un auto en la Sala Juan Egenau, nos motivara a participar de una exposición en torno al concepto del choque”.
Así fueron creando las distintas propuestas que conforman esta exposición, en la que “el vínculo que se establece entre las obras es el posible acecho de un acontecimiento, un instante que transcurre tanto determinado por una línea de tiempo, como también de forma paralela a otros acontecimientos”.
Esto, en referencia al diálogo que se produce entre la propuesta de Etienne Cristoffanini, las dos aguafuertes de Catalina Rozas y la instalación en la que María Jesús Schultz utiliza la estructura de resortes de un colchón usado como soporte de dos sugerentes maquinitas, que expondrá junto a un cuadro con un texto propio de la industria de la pornografía: Porn medical shot.
“Formalmente decidí crear una situación simbólica de lo que es un choque, utilizando un auto que atente contra la sala de exposición, ya que en mis trabajos comienzo desde el lugar. El accidente es un momento de caos en el que actuamos de forma instintiva, en donde la manipulación o la organización y el control humano quedan relegados a segundo plano”, explica Etienne Cristoffanini sobre su propuesta.
Catalina Rozas, en tanto, trabajó el concepto choque a través “de la técnica del grabado en su formato tradicional, produciendo escenas en donde se presenta el cuerpo humano siendo afectado por elementos correspondientes a símbolos u objetos que citan el progreso económico”, dice de su díptico de aguafuertes.
Por último, María Jesús Schultz abordó el concepto central de esta muestra como encuentro violento de una cosa con otra, incorporando “la idea de trauma como lesión duradera producida por un agente mecánico generalmente externo. En otras palabras, me permito relacionar la idea de choque con encuentros y desencuentros entre formas y materialidades, tensión entre mecánica y orgánica, lo interno y lo externo, lo personal y lo público, que finalmente se agrupan en una especie de escenario post pornográfico”.
El mito del progreso se inaugurará este miércoles 23 a las 18:30 horas en la Sala Juan Egenau (Las Encinas 3370, Ñuñoa, Campus Juan Gómez Millas de la Universidad de Chile) y se podrá visitar de lunes a viernes, de 10 a 21 horas, hasta el próximo 8 de noviembre. La entrada es gratuita.