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Expertos proponen “diálogo y transparencia” para modernizar Fuerzas Armadas

La democratización de las Fuerzas Armadas es una de diversas tareas pendientes para alcanzar mayor transparencia, tanto en el funcionamiento del Ejército como en su relación con el país.

Paula Correa

  Domingo 13 de abril 2014 9:22 hrs. 
Ejercito-de-Chile-Bicentenario

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En el  Instituto de Sociología de la Universidad de Valparaíso, la Academia Diálogo Ciudadano y la Agrupación de Marinos Antigolpistas, dieron pie al primer panel de discusión sobre la democratización de las Fuerzas Armadas.

Se trata de un debate pendiente y una herida abierta desde el Golpe Militar que no ha sido lo suficientemente explorada. Al respecto, el Doctor en Historia de la Universidad Libre de Bruselas y autor del libro “Los que dijeron no”, Jorge Magasich, sostuvo que se necesita adoptar medidas estructurales y democráticas para dejar de lado las doctrinas golpistas.

El especialista indicó que se debe comenzar por darle un carácter público a las Fuerzas Armadas poniendo el acento en la transparencia. En ese sentido, sostuvo que las políticas militares son de índole pública, razón por la que “el cómo se organizan las Fuerzas Armadas y cuáles son sus objetivos, debe ser el resultado de un debate nacional. Así también la identificación del enemigo, porque uno de los grandes problemas de los años sesenta y setenta fue que el enemigo de las FF. AA. era parte del país, un enemigo interno, y se preparaban a combatirlo. Por eso, es necesario que la identificación del enemigo forme parte de las políticas públicas”, explicó.

El también columnista estable de Le Monde Diplomatique indicó que se puede tener ciertos aspectos discretos, pero no en las políticas y añadió que debe existir un control democrático estricto de lo que ocurre, lo que implica, por ejemplo, controlar a Codelco, porque proporciona buena parte de su presupuesto.

Además, indicó que se deben conocer los programas de estudios y selección de los docentes, ya que en una investigación que realizó, “cerca del 90 por ciento de los encuestados era de derecha”, lo que implica que hay selección política. También afirmó que hay que crear una sola escuela, para evitar dividir a los soldados entre los que ordenan y los que obedecen, así como aplicar la norma republicana que separa a la Iglesia del Estado, que existe desde 1925, pero no se practica.

Estas ideas encontraron resistencia de parte del oficial de la marina en retiro y doctor en estudios latinoamericanos de la Universidad de Santiago, Francisco Le Dantec quien afirmó que “lo ocurrido hace cuarenta años atrás, no es lo mismo que lo que pasa ahora. El mundo ha cambiado tanto con la globalización, con el libre mercado y los avances tecnológicos, que entonces no podemos quedarnos anclados en el pasado y manteniendo resquemores porque no hay diálogo”, indicó.

El actual docente indicó que la mayoría de las propuestas del profesor Magasich ya están hechas hace mucho tiempo, dado que la sociedad ha obligado a ello, como ocurrió, por ejemplo, con la incorporación de las mujeres. Además, sostuvo que existen una serie de mitos “de uno y otro lado” que hay que aclarar, entre ellos afirmó que “el Fuerte Aguayo en Concón no es una base  norteamericana, al contrario de lo que han sostenido diversas organizaciones de Derechos Humanos”.

En esto coincidió el abogado, vicepresidente del Capitulo Chileno del Ombudsman, Luis Bork, quien destacó la necesidad de “encontrarnos con una historia verdadera sobre las Fuerzas Armadas en el país y mirarla como una institución que está al servicio de un Estado que tiene que velar por el bien común. Una de las definiciones centrales de un Estado democrático es la plena vigencia de los derechos humanos siempre. Efectivamente, en la historia más reciente, la participación de un gobierno militar y las FF. AA. en las violaciones sistemáticas, hacen que hoy la reflexión no pueda seguir siendo sobre esta institución jerárquica bajo esos principios de una obediencia irreflexiva”, señaló.

Para reconocer esta historia, el director de la carrera de Sociología de la Universidad de Valparaíso, Gonzalo Ojeda, afirmó que se deben abrir los archivos de los servicios de inteligencia y entregar la información sobre la gente que se torturó “porque mientras no se haga, no habrá justicia, paz ni reconciliación”, y agregó que en eso los políticos han fallado porque sólo le han echado tierra a la verdad.

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