“Tenemos un acuerdo político que termina en lo formal en el Gobierno de Bachelet”, fueron las palabras del nuevo consejero nacional de la Democracia Cristiana, Gutenberg Martínez, que abrieron un nuevo foco de discusión al interior de la Nueva Mayoría.
El ex diputado instaló el concepto de la fecha de caducidad al interior de un bloque oficialista que ya tiene bastante con que lidiar, considerando que las diferencias internas nunca se superaron, sino más bien, han ido generando polémicas discusiones en la tramitación de los proyectos clave del Ejecutivo: principalmente, las reformas Tributaria y Educacional.
E su primera reunión, la Nueva Mayoría se definió como un acuerdo político programático en pos del programa de Gobierno de Michelle Bachelet. Eso fue lo que unió posturas tan irreconciliables históricamente como la DC y el Partido Comunista. Ahora, luego de las declaraciones de Martínez, rostros de la “vieja Concertación” aparecieron en el lanzamiento de la biografía del ex presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona, y este mismo aseguró que el pacto debe continuar para asegurar el cumplimiento del proceso de cambios comprometido.
“Las reformas estructurales exigen que mantengamos la unidad de acción, con vistas a poder derrotar en una nueva elección presidencial a nuestro adversario, la derecha, y consolidar los cambios que el país pueda sufrir en el próximo tiempo”, sostuvo Escalona, para quien “la tarea estaría completamente inconclusa si es que por nuestra incapacidad la coalición de la Nueva Mayoría se dispersa, no va unida a las próximas presidenciales y éstas se pierden por falta de entendimiento”.
El ex presidente y ex senador Eduardo Frei también hizo un llamado a la unidad y dedicó palabras al futuro del sector: “Cuidado con creerse dueños de la verdad, cuidado con los intentos hegemónicos, cuidado con los afanes refundacionales, cuidemos las formas y las palabras, fortalezcamos las instituciones. No olvidemos que la lucha de hoy no es contra el partido aliado, la lucha de hoy es contra la desigualdad. Como bien lo dice Camilo, tenemos la obligación ética de construir una sociedad que quiere ser mejor de lo que es hoy, que quiere enfrentar sus defectos, rectificar sus carencias y avanzar hacia una democracia renovada con mayor justicia social”, señaló.
Las palabras de Frei se refieren al ánimo que han expresado más a la izquierda de la Nueva Mayoría, contenido en la “retroexcavadora” que planteara hace algún tiempo el presidente del PPD, Jaime Quintana o la necesidad expuesta por varios personeros de crear una nueva Constitución a través de una Asamblea Constituyente.
Para el diputado de Izquierda Ciudadana, Sergio Aguiló, las diferencias internas de la DC se resolverán con el tiempo y junto con la implementación del programa de Gobierno, pero admitió que existen posturas marcadamente conservadoras representadas por Gutenberg Martínez: “No creo que su opinión sea la opinión de la DC. Él es un consejero que sacó la segunda mayoría, pero nada más que eso. Es una persona que tiene cierto arraigo dentro de la DC, pero creo que para nada refleja el pensamiento mayoritario del partido”, dijo.
A esto se suma una tensión externa provocada por dos figuras. Por un lado, Andrés Velasco, que a los sectores más conservadores de la DC agrada como liderazgo presidenciable. Por el otro, también hace un intento de acercarse al bloque el fundador del Partido Progresista y ex candidato presidencial, Marco Enríquez-Ominami.
Según Aguiló, sería positivo contar con el dirigente del PRO, si es que adhiere al programa de transformaciones planteado por la Nueva Mayoría.
De todas formas, resulta difícil plantear la pregunta: ¿qué sucede después del programa?. La interrogante es mayor si aún no está resuelto en qué condiciones se implementará el mismo.
“Tenemos un acuerdo político que termina en lo formal en el Gobierno de Bachelet”, fueron las palabras del nuevo consejero nacional de la Democracia Cristiana, Gutenberg Martínez, que abrieron un nuevo foco de discusión al interior de la Nueva Mayoría.
El ex diputado instaló el concepto de la fecha de caducidad al interior de un bloque oficialista que ya tiene bastante con que lidiar, considerando que las diferencias internas nunca se superaron, sino más bien, han ido generando polémicas discusiones en la tramitación de los proyectos clave del Ejecutivo: principalmente, las reformas Tributaria y Educacional.
E su primera reunión, la Nueva Mayoría se definió como un acuerdo político programático en pos del programa de Gobierno de Michelle Bachelet. Eso fue lo que unió posturas tan irreconciliables históricamente como la DC y el Partido Comunista. Ahora, luego de las declaraciones de Martínez, rostros de la “vieja Concertación” aparecieron en el lanzamiento de la biografía del ex presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona, y este mismo aseguró que el pacto debe continuar para asegurar el cumplimiento del proceso de cambios comprometido.
“Las reformas estructurales exigen que mantengamos la unidad de acción, con vistas a poder derrotar en una nueva elección presidencial a nuestro adversario, la derecha, y consolidar los cambios que el país pueda sufrir en el próximo tiempo”, sostuvo Escalona, para quien “la tarea estaría completamente inconclusa si es que por nuestra incapacidad la coalición de la Nueva Mayoría se dispersa, no va unida a las próximas presidenciales y éstas se pierden por falta de entendimiento”.
El ex presidente y ex senador Eduardo Frei también hizo un llamado a la unidad y dedicó palabras al futuro del sector: “Cuidado con creerse dueños de la verdad, cuidado con los intentos hegemónicos, cuidado con los afanes refundacionales, cuidemos las formas y las palabras, fortalezcamos las instituciones. No olvidemos que la lucha de hoy no es contra el partido aliado, la lucha de hoy es contra la desigualdad. Como bien lo dice Camilo, tenemos la obligación ética de construir una sociedad que quiere ser mejor de lo que es hoy, que quiere enfrentar sus defectos, rectificar sus carencias y avanzar hacia una democracia renovada con mayor justicia social”, señaló.
Las palabras de Frei se refieren al ánimo que han expresado más a la izquierda de la Nueva Mayoría, contenido en la “retroexcavadora” que planteara hace algún tiempo el presidente del PPD, Jaime Quintana o la necesidad expuesta por varios personeros de crear una nueva Constitución a través de una Asamblea Constituyente.
Para el diputado de Izquierda Ciudadana, Sergio Aguiló, las diferencias internas de la DC se resolverán con el tiempo y junto con la implementación del programa de Gobierno, pero admitió que existen posturas marcadamente conservadoras representadas por Gutenberg Martínez: “No creo que su opinión sea la opinión de la DC. Él es un consejero que sacó la segunda mayoría, pero nada más que eso. Es una persona que tiene cierto arraigo dentro de la DC, pero creo que para nada refleja el pensamiento mayoritario del partido”, dijo.
A esto se suma una tensión externa provocada por dos figuras. Por un lado, Andrés Velasco, que a los sectores más conservadores de la DC agrada como liderazgo presidenciable. Por el otro, también hace un intento de acercarse al bloque el fundador del Partido Progresista y ex candidato presidencial, Marco Enríquez-Ominami.
Según Aguiló, sería positivo contar con el dirigente del PRO, si es que adhiere al programa de transformaciones planteado por la Nueva Mayoría.
De todas formas, resulta difícil plantear la pregunta: ¿qué sucede después del programa?. La interrogante es mayor si aún no está resuelto en qué condiciones se implementará el mismo.
“Tenemos un acuerdo político que termina en lo formal en el Gobierno de Bachelet”, fueron las palabras del nuevo consejero nacional de la Democracia Cristiana, Gutenberg Martínez, que abrieron un nuevo foco de discusión al interior de la Nueva Mayoría.
El ex diputado instaló el concepto de la fecha de caducidad al interior de un bloque oficialista que ya tiene bastante con que lidiar, considerando que las diferencias internas nunca se superaron, sino más bien, han ido generando polémicas discusiones en la tramitación de los proyectos clave del Ejecutivo: principalmente, las reformas Tributaria y Educacional.
E su primera reunión, la Nueva Mayoría se definió como un acuerdo político programático en pos del programa de Gobierno de Michelle Bachelet. Eso fue lo que unió posturas tan irreconciliables históricamente como la DC y el Partido Comunista. Ahora, luego de las declaraciones de Martínez, rostros de la “vieja Concertación” aparecieron en el lanzamiento de la biografía del ex presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona, y este mismo aseguró que el pacto debe continuar para asegurar el cumplimiento del proceso de cambios comprometido.
“Las reformas estructurales exigen que mantengamos la unidad de acción, con vistas a poder derrotar en una nueva elección presidencial a nuestro adversario, la derecha, y consolidar los cambios que el país pueda sufrir en el próximo tiempo”, sostuvo Escalona, para quien “la tarea estaría completamente inconclusa si es que por nuestra incapacidad la coalición de la Nueva Mayoría se dispersa, no va unida a las próximas presidenciales y éstas se pierden por falta de entendimiento”.
El ex presidente y ex senador Eduardo Frei también hizo un llamado a la unidad y dedicó palabras al futuro del sector: “Cuidado con creerse dueños de la verdad, cuidado con los intentos hegemónicos, cuidado con los afanes refundacionales, cuidemos las formas y las palabras, fortalezcamos las instituciones. No olvidemos que la lucha de hoy no es contra el partido aliado, la lucha de hoy es contra la desigualdad. Como bien lo dice Camilo, tenemos la obligación ética de construir una sociedad que quiere ser mejor de lo que es hoy, que quiere enfrentar sus defectos, rectificar sus carencias y avanzar hacia una democracia renovada con mayor justicia social”, señaló.
Las palabras de Frei se refieren al ánimo que han expresado más a la izquierda de la Nueva Mayoría, contenido en la “retroexcavadora” que planteara hace algún tiempo el presidente del PPD, Jaime Quintana o la necesidad expuesta por varios personeros de crear una nueva Constitución a través de una Asamblea Constituyente.
Para el diputado de Izquierda Ciudadana, Sergio Aguiló, las diferencias internas de la DC se resolverán con el tiempo y junto con la implementación del programa de Gobierno, pero admitió que existen posturas marcadamente conservadoras representadas por Gutenberg Martínez: “No creo que su opinión sea la opinión de la DC. Él es un consejero que sacó la segunda mayoría, pero nada más que eso. Es una persona que tiene cierto arraigo dentro de la DC, pero creo que para nada refleja el pensamiento mayoritario del partido”, dijo.
A esto se suma una tensión externa provocada por dos figuras. Por un lado, Andrés Velasco, que a los sectores más conservadores de la DC agrada como liderazgo presidenciable. Por el otro, también hace un intento de acercarse al bloque el fundador del Partido Progresista y ex candidato presidencial, Marco Enríquez-Ominami.
Según Aguiló, sería positivo contar con el dirigente del PRO, si es que adhiere al programa de transformaciones planteado por la Nueva Mayoría.
De todas formas, resulta difícil plantear la pregunta: ¿qué sucede después del programa?. La interrogante es mayor si aún no está resuelto en qué condiciones se implementará el mismo.
