Víctor Montoya permaneció un año y cuatro meses en detención preventiva en la cárcel del Puente Alto, procesado bajo la Ley Antiterrorista por los delitos de colocación de artefacto explosivo con ánimo terrorista y el delito de lesiones, acusado por testigos protegidos.
Los jueces del Juzgado de Garantía desecharon todas las pruebas que lo vincularon al hecho, entre ellas peritajes psicológicos policiales, que acreditaron un supuesto perfil de terrorista debido a su condición de animalista y vegano.
El Juzgado de Garantía en lo penal de Puente Alto, condenó además al Ministerio Publico y a la parte querellante, en este caso el cabo de carabineros Sebastián Rosales, a pagar las costas del proceso penal, pese a que no se presentaron en la audiencia que absolvió y dejó nulo el proceso.
La fiscalía decidió recurrir para anular el fallo y el pago de los gastos que debió incurrir Víctor Montoya para su defensa.
El abogado de la Defensoría Popular Rodrigo Román aseguró que no existe ningún “antecedente serio” que puedan entregar los querellantes en este caso, para determinar la culpabilidad de su defendido.
“A propósito de lo contundente del mismo fallo, haberse el juicio celebrado con absoluto apego a las normas del procedimiento, nosotros como defensa tenemos la tranquilidad y la convicción que la única solución a este recurso interpuesto por la Fiscalía y los querellantes es la confirmación de la sentencia. Nosotros creemos que el Ministerio Público, en buen chileno hablando está respirando por la herida a propósito de sus fallas y a propósito de sus reiteradas derrotas en el juzgamiento con la pretensión antiterrorista”
Rodrigo Román además señaló que ante el Juzgado Oral en lo penal de Puente Alto, se logró demostró que se realizó una investigación sesgada y tendenciosa que se apartó del profesionalismo, por lo tanto espera que la Corte de Apelaciones de San Miguel, ratifique la sentencia absolutoria y Víctor Montoya pueda recuperar su vida con tranquilidad.
La madre de Víctor Montoya, Lidia Encina explicó que esperaban esta decisión del Ministerio Público y de la defensa del cabo Rosales para intentar anular el fallo del juzgado con tranquilidad. Sin embargo, persiste una cuota de temor debido a deberán revivir los intentos de culpar a su hijo como responsable del atentado.
“Tenemos la tranquilidad que nos da el saber que nuestro hijo es inocente y que ellos no tienen absolutamente ni una sola prueba, porque va a ser más de lo mismo, lo mismo que presentaron es exactamente las mismas pruebas, los mismos testigos, los mismos peritos, que al final no es nada, porque el juicio la verdad es que a mi encantaría que estuvieran en una sesión completa durante una de las audiencias que vamos a tener porque es casi irrisorio todo lo que presentan ellos”, sostuvo.
Lidia Encina aseguró que esperan confiados en que la defensa y los expertos contratados por la familia, logren descartar nuevamente las pruebas que presentaron los peritos de Ministerio Público y que la inocencia de Víctor Montoya quede demostrada.
Entre los logros obtenidos por los peritos contratados por la familia, estuvo demostrar que las pruebas habían sido alteradas y que el perfil sicológico elaborado por la policía para demostrar que se trataba de un terrorista, no se correspondía con la identidad de las tribus urbanas.
Víctor Montoya permaneció un año y cuatro meses en detención preventiva en la cárcel del Puente Alto, procesado bajo la Ley Antiterrorista por los delitos de colocación de artefacto explosivo con ánimo terrorista y el delito de lesiones, acusado por testigos protegidos.
Los jueces del Juzgado de Garantía desecharon todas las pruebas que lo vincularon al hecho, entre ellas peritajes psicológicos policiales, que acreditaron un supuesto perfil de terrorista debido a su condición de animalista y vegano.
El Juzgado de Garantía en lo penal de Puente Alto, condenó además al Ministerio Publico y a la parte querellante, en este caso el cabo de carabineros Sebastián Rosales, a pagar las costas del proceso penal, pese a que no se presentaron en la audiencia que absolvió y dejó nulo el proceso.
La fiscalía decidió recurrir para anular el fallo y el pago de los gastos que debió incurrir Víctor Montoya para su defensa.
El abogado de la Defensoría Popular Rodrigo Román aseguró que no existe ningún “antecedente serio” que puedan entregar los querellantes en este caso, para determinar la culpabilidad de su defendido.
“A propósito de lo contundente del mismo fallo, haberse el juicio celebrado con absoluto apego a las normas del procedimiento, nosotros como defensa tenemos la tranquilidad y la convicción que la única solución a este recurso interpuesto por la Fiscalía y los querellantes es la confirmación de la sentencia. Nosotros creemos que el Ministerio Público, en buen chileno hablando está respirando por la herida a propósito de sus fallas y a propósito de sus reiteradas derrotas en el juzgamiento con la pretensión antiterrorista”
Rodrigo Román además señaló que ante el Juzgado Oral en lo penal de Puente Alto, se logró demostró que se realizó una investigación sesgada y tendenciosa que se apartó del profesionalismo, por lo tanto espera que la Corte de Apelaciones de San Miguel, ratifique la sentencia absolutoria y Víctor Montoya pueda recuperar su vida con tranquilidad.
La madre de Víctor Montoya, Lidia Encina explicó que esperaban esta decisión del Ministerio Público y de la defensa del cabo Rosales para intentar anular el fallo del juzgado con tranquilidad. Sin embargo, persiste una cuota de temor debido a deberán revivir los intentos de culpar a su hijo como responsable del atentado.
“Tenemos la tranquilidad que nos da el saber que nuestro hijo es inocente y que ellos no tienen absolutamente ni una sola prueba, porque va a ser más de lo mismo, lo mismo que presentaron es exactamente las mismas pruebas, los mismos testigos, los mismos peritos, que al final no es nada, porque el juicio la verdad es que a mi encantaría que estuvieran en una sesión completa durante una de las audiencias que vamos a tener porque es casi irrisorio todo lo que presentan ellos”, sostuvo.
Lidia Encina aseguró que esperan confiados en que la defensa y los expertos contratados por la familia, logren descartar nuevamente las pruebas que presentaron los peritos de Ministerio Público y que la inocencia de Víctor Montoya quede demostrada.
Entre los logros obtenidos por los peritos contratados por la familia, estuvo demostrar que las pruebas habían sido alteradas y que el perfil sicológico elaborado por la policía para demostrar que se trataba de un terrorista, no se correspondía con la identidad de las tribus urbanas.
Víctor Montoya permaneció un año y cuatro meses en detención preventiva en la cárcel del Puente Alto, procesado bajo la Ley Antiterrorista por los delitos de colocación de artefacto explosivo con ánimo terrorista y el delito de lesiones, acusado por testigos protegidos.
Los jueces del Juzgado de Garantía desecharon todas las pruebas que lo vincularon al hecho, entre ellas peritajes psicológicos policiales, que acreditaron un supuesto perfil de terrorista debido a su condición de animalista y vegano.
El Juzgado de Garantía en lo penal de Puente Alto, condenó además al Ministerio Publico y a la parte querellante, en este caso el cabo de carabineros Sebastián Rosales, a pagar las costas del proceso penal, pese a que no se presentaron en la audiencia que absolvió y dejó nulo el proceso.
La fiscalía decidió recurrir para anular el fallo y el pago de los gastos que debió incurrir Víctor Montoya para su defensa.
El abogado de la Defensoría Popular Rodrigo Román aseguró que no existe ningún “antecedente serio” que puedan entregar los querellantes en este caso, para determinar la culpabilidad de su defendido.
“A propósito de lo contundente del mismo fallo, haberse el juicio celebrado con absoluto apego a las normas del procedimiento, nosotros como defensa tenemos la tranquilidad y la convicción que la única solución a este recurso interpuesto por la Fiscalía y los querellantes es la confirmación de la sentencia. Nosotros creemos que el Ministerio Público, en buen chileno hablando está respirando por la herida a propósito de sus fallas y a propósito de sus reiteradas derrotas en el juzgamiento con la pretensión antiterrorista”
Rodrigo Román además señaló que ante el Juzgado Oral en lo penal de Puente Alto, se logró demostró que se realizó una investigación sesgada y tendenciosa que se apartó del profesionalismo, por lo tanto espera que la Corte de Apelaciones de San Miguel, ratifique la sentencia absolutoria y Víctor Montoya pueda recuperar su vida con tranquilidad.
La madre de Víctor Montoya, Lidia Encina explicó que esperaban esta decisión del Ministerio Público y de la defensa del cabo Rosales para intentar anular el fallo del juzgado con tranquilidad. Sin embargo, persiste una cuota de temor debido a deberán revivir los intentos de culpar a su hijo como responsable del atentado.
“Tenemos la tranquilidad que nos da el saber que nuestro hijo es inocente y que ellos no tienen absolutamente ni una sola prueba, porque va a ser más de lo mismo, lo mismo que presentaron es exactamente las mismas pruebas, los mismos testigos, los mismos peritos, que al final no es nada, porque el juicio la verdad es que a mi encantaría que estuvieran en una sesión completa durante una de las audiencias que vamos a tener porque es casi irrisorio todo lo que presentan ellos”, sostuvo.
Lidia Encina aseguró que esperan confiados en que la defensa y los expertos contratados por la familia, logren descartar nuevamente las pruebas que presentaron los peritos de Ministerio Público y que la inocencia de Víctor Montoya quede demostrada.
Entre los logros obtenidos por los peritos contratados por la familia, estuvo demostrar que las pruebas habían sido alteradas y que el perfil sicológico elaborado por la policía para demostrar que se trataba de un terrorista, no se correspondía con la identidad de las tribus urbanas.
