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Consulta ciudadana: Un mecanismo para perfeccionar

Consulta ciudadana realizada por la comuna de Santiago entregó sus resultados donde los vecinos sostuvieron no cambiarle el nombre al Cerro Santa Lucía y mantener el horario de cierre de las botillerías. Si bien el proceso tuvo aceptación, se plantea que debe ser perfeccionado para mejorar la inclusión política de los chilenos.

Javier Muñoz

  Martes 21 de octubre 2014 8:56 hrs. 
consulta ciudadana

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Más de 55 mil personas participaron en la consulta ciudadana elaborada por la comuna de Santiago. Entre los resultados se sostuvo, por un 54 por ciento, la preferencia de los vecinos por que el cerro Santa Lucía mantenga su nombre y por un 55 por ciento que las botillerías sigan con su mismo horario de cierre. Además, un 87 por ciento optó por el retiro del comercio de las bolsas plásticas que no sean biodegradables.

Sin embargo estos tres puntos no eran vinculantes y aún hay que esperar que el consejo comunal tome una decisión para empezar a trabajar en ellos.

Según el último censo, la comuna de Santiago, supera los 300 mil habitantes por lo que habría una participación cercana al 16%, considerando que la iniciativa contempló la opinión de los residentes mayores de 16 años y también incluyó a los usuarios de la comuna, como estudiantes y trabajadores, para preguntas relacionadas al cambio de nombre del cerro y el uso bolsas plásticas.

Si bien la consulta ha sido celebrada por amplios sectores, en general se deduce que el sistema aún debe perfeccionarse para mejorar el acceso a la democracia.

Genaro Cuadros director del Laboratorio Ciudad y Desarrollo, de la Universidad Diego Portales estimó que aún falta por perfeccionar los mecanismos de participación, un detalle que los gobiernos no han sabido canalizar. A pesar de esto, fue enfático al decir que se debe seguir impulsando la medida.

“En la medida que más municipios vayan instalando este tipo de mecanismos de profundización democrática y mejoramiento de la democracia, se va hacer más común hacerlo, se van a requerir de parte de la ciudadanía más herramientas para poder elaborar posiciones y eso va ir enriqueciendo el debate en general. No hay que detenerse porque la participación no sea suficiente, al contario hay que incrementar los mecanismos para que aumenten”, indicó.

Desde la Fundación Ciudadano Inteligente, comparten el diagnóstico y explican que deben perfeccionarse las instancias de consulta. María Jaraquemada, directora de Investigación e Incidencia de la institución, opina que en el caso de las municipalidades la ley no regula lo suficiente y lo deja a la respectiva ordenanza de cada entidad.

“El tema de las consultas como no están reguladas uniformemente, nosotros creemos que faltan estándares mínimos y homogéneos para todos los órganos de la administración central y descentralizada para que efectivamente las consultas cumplan con requisitos de participación, de información, como por ejemplo: Cuánto tiempo tiene que estar difundiéndose, por qué medio tiene que difundirse, cuál es la información mínima que se le entrega al ciudadano antes para que participe”, señaló.

Para que las consultas sean consideradas exitosas, según el presidente de la Asociación Chilena de Municipalidades y alcalde Maipú, Christian Vittori, debe sufragar el 10 por ciento de la población de la comuna.

Entonces, siguiendo este parámetro la instancia santiaguina habría llegado a buen puerto. Así todo, no se olvida que existe una continua preocupación por la falta de participación cívica de los chilenos.

Cristina Moyano, historiadora política de la Universidad de Santiago, estimó que al hablar de participación política es importante hacer la diferencia e ir más allá de los actos electorales, e incluir las movilizaciones ciudadanas y otras expresiones. Precisamente sería el contexto político electoral el que estaría presentando una crisis de representatividad no solo a nivel local.

“La dictadura efectivamente despolitizó la sociedad chilena, pero también esto obedece a una crisis mundial de representatividad de la política en su sentido más tradicional. Si es que se miran los índices de participación electoral de algunos países europeos y de algunos países latinoamericanos no son muy distintos de los que se dan en Chile. Esto es una cuestión bastante más global que obedece a una crisis de la política, la forma en la cual se ha construido la relación entre la sociedad civil y el Estado”, explicó.

Finalmente, la académica enfatizó que estamos en un punto de inflexión donde las autoridades se están cuestionando esta realidad postdemocrática. Un hecho interesante para revisar, que determinará qué es lo que se va a entender por soberanía, democracia y participación, durante el siglo 21; algo esencial para la relación entre la sociedad civil y la sociedad política.

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