Arte e inclusión en las obras de tres niñas con discapacidades
Las torres del centro comercial Apumanque, que reciben año a año trabajos de destacados artistas, exhibe durante todo 2015 tres obras pertenecientes a niñas con severos daños neurológico. La muestra, más allá de ser estéticamente bella, plantea una reflexión necesaria: la urgencia de visibilizar a discapacitados como personas con compromiso por el entorno social.
Diana Torres
Lunes 16 de febrero 2015 17:22 hrs.
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Hace tres años parte el Taller de Arte Terapia en Fundación Ser, programa orientado a niños y jóvenes que no están escolarizados en ningún sistema formal, por discapacidad o necesidades especiales.
En aquel espacio, los aprendices tienen la oportunidad de hacer cosas mediante otras formas de comunicación, no verbal, como la música, el teatro y la pintura, entre otros.
De este taller se destacan Sofía Díaz de 9 años, Rocío Kaftanski de 10 años, (ambas con parálisis cerebral) y Josefina Cáceres de 20 años, quien padece de microcefalia; porque sus obras fueron seleccionadas por el centro comercial Apumanque para ser exhibidas durante todo el año en las torres del recinto, las cuales han recibido a artistas de la talla de Matilde Pérez, una de las mayores exponentes nacionales del arte cinético.
Son, entonces, tres gigantografías que reflejan el resultado de años de desarrollo personal y motriz de estas niñas, quienes se encumbran como representantes del arte inclusivo y profesional.
Para Alejandra Sánchez, arte terapeuta de Fundación Ser, los talleres dan cuenta que el apoyo es una herramienta esencial para que estas personas, muestren que tienen ganas y sobre todo la capacidad de hacer cosas por su entorno social.
“Creo que toda persona, todo ser humano tiene la necesidad de manifestarse, y el arte tiene la fortaleza de dar las herramientas para que, las personas que muchas veces no pueden hablar y comunicarse encuentren otras vías de expresión. Eso puede ser a través de un sonido en la música, un movimiento en el teatro, una mancha en la pintura. Maneras de expresarse hay varias, y eso es lo que estamos potenciando, que la persona se exprese y manifieste”, indica.
Por su parte, para Angélica Minieri, madre de Sofía Díaz, la participación de su hija en el taller ha significado un beneficio profundo en el quehacer cotidiano, lo que se proyecta asimismo en los demás niños.
“Ella ha ido aprendiendo y mejorando en la forma en lo que hace, ha ido creciendo en ésto y ella misma ha visto su avance. O sea ella se va sintiendo más segura en la forma que ha avanzado mediante las diversas técnicas. Creo que ha adquirido confianza y hay un acto de elección e independencia, y ha ido expresando lo que va sintiendo en los diferentes momentos de su vida, porque no siempre pinta igual”, comenta.
Si bien el trabajo que ha realizado Fundación Ser ha significado un avance para los padres y niños, respecto de la educación que desean, para la madre y terapeuta de Rocío Kaftansky, Sonia Castro, faltan muchas cosas por hacer, sobre todo en materia de Reforma Educacional.
“Ojalá tuviésemos miles de espacios más y formas de mostrar que ellos tienen capacidades, que pueden aportar y ser agentes activos en nuestra sociedad, todos los necesitamos porque ellos también contribuyen. Desde el 2008 la educación es un derecho para todos y en realidad eso no es así. Nosotros nos sentimos impotentes porque no sabemos a donde acudir y qué cosas hacer, ojalá ir avanzando en cosas como éstas, que creo que es un tremendo paso, para mostrar las capacidades que tienen nuestros niños cuando les dan las opciones, los espacios de desarrollo”, enfatiza.
Cabe destacar que según lo informado por el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, la nueva Reforma Educacional no innovará para niños con necesidades educativas especiales porque “es un problema más complejo, que requiere ser tratado por separado”, indicó, lo cual deja a la espera a las familias de tantos niños en Chile.
Finalmente, las imágenes serán exhibidas durante todo 2015 en las torres de la fachada de Apumanque, centro comercial ubicado en Manquehue Sur 31, Las Condes.
Hace tres años parte el Taller de Arte Terapia en Fundación Ser, programa orientado a niños y jóvenes que no están escolarizados en ningún sistema formal, por discapacidad o necesidades especiales.
En aquel espacio, los aprendices tienen la oportunidad de hacer cosas mediante otras formas de comunicación, no verbal, como la música, el teatro y la pintura, entre otros.
De este taller se destacan Sofía Díaz de 9 años, Rocío Kaftanski de 10 años, (ambas con parálisis cerebral) y Josefina Cáceres de 20 años, quien padece de microcefalia; porque sus obras fueron seleccionadas por el centro comercial Apumanque para ser exhibidas durante todo el año en las torres del recinto, las cuales han recibido a artistas de la talla de Matilde Pérez, una de las mayores exponentes nacionales del arte cinético.
Son, entonces, tres gigantografías que reflejan el resultado de años de desarrollo personal y motriz de estas niñas, quienes se encumbran como representantes del arte inclusivo y profesional.
Para Alejandra Sánchez, arte terapeuta de Fundación Ser, los talleres dan cuenta que el apoyo es una herramienta esencial para que estas personas, muestren que tienen ganas y sobre todo la capacidad de hacer cosas por su entorno social.
“Creo que toda persona, todo ser humano tiene la necesidad de manifestarse, y el arte tiene la fortaleza de dar las herramientas para que, las personas que muchas veces no pueden hablar y comunicarse encuentren otras vías de expresión. Eso puede ser a través de un sonido en la música, un movimiento en el teatro, una mancha en la pintura. Maneras de expresarse hay varias, y eso es lo que estamos potenciando, que la persona se exprese y manifieste”, indica.
Por su parte, para Angélica Minieri, madre de Sofía Díaz, la participación de su hija en el taller ha significado un beneficio profundo en el quehacer cotidiano, lo que se proyecta asimismo en los demás niños.
“Ella ha ido aprendiendo y mejorando en la forma en lo que hace, ha ido creciendo en ésto y ella misma ha visto su avance. O sea ella se va sintiendo más segura en la forma que ha avanzado mediante las diversas técnicas. Creo que ha adquirido confianza y hay un acto de elección e independencia, y ha ido expresando lo que va sintiendo en los diferentes momentos de su vida, porque no siempre pinta igual”, comenta.
Si bien el trabajo que ha realizado Fundación Ser ha significado un avance para los padres y niños, respecto de la educación que desean, para la madre y terapeuta de Rocío Kaftansky, Sonia Castro, faltan muchas cosas por hacer, sobre todo en materia de Reforma Educacional.
“Ojalá tuviésemos miles de espacios más y formas de mostrar que ellos tienen capacidades, que pueden aportar y ser agentes activos en nuestra sociedad, todos los necesitamos porque ellos también contribuyen. Desde el 2008 la educación es un derecho para todos y en realidad eso no es así. Nosotros nos sentimos impotentes porque no sabemos a donde acudir y qué cosas hacer, ojalá ir avanzando en cosas como éstas, que creo que es un tremendo paso, para mostrar las capacidades que tienen nuestros niños cuando les dan las opciones, los espacios de desarrollo”, enfatiza.
Cabe destacar que según lo informado por el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, la nueva Reforma Educacional no innovará para niños con necesidades educativas especiales porque “es un problema más complejo, que requiere ser tratado por separado”, indicó, lo cual deja a la espera a las familias de tantos niños en Chile.
Finalmente, las imágenes serán exhibidas durante todo 2015 en las torres de la fachada de Apumanque, centro comercial ubicado en Manquehue Sur 31, Las Condes.
Hace tres años parte el Taller de Arte Terapia en Fundación Ser, programa orientado a niños y jóvenes que no están escolarizados en ningún sistema formal, por discapacidad o necesidades especiales.
En aquel espacio, los aprendices tienen la oportunidad de hacer cosas mediante otras formas de comunicación, no verbal, como la música, el teatro y la pintura, entre otros.
De este taller se destacan Sofía Díaz de 9 años, Rocío Kaftanski de 10 años, (ambas con parálisis cerebral) y Josefina Cáceres de 20 años, quien padece de microcefalia; porque sus obras fueron seleccionadas por el centro comercial Apumanque para ser exhibidas durante todo el año en las torres del recinto, las cuales han recibido a artistas de la talla de Matilde Pérez, una de las mayores exponentes nacionales del arte cinético.
Son, entonces, tres gigantografías que reflejan el resultado de años de desarrollo personal y motriz de estas niñas, quienes se encumbran como representantes del arte inclusivo y profesional.
Para Alejandra Sánchez, arte terapeuta de Fundación Ser, los talleres dan cuenta que el apoyo es una herramienta esencial para que estas personas, muestren que tienen ganas y sobre todo la capacidad de hacer cosas por su entorno social.
“Creo que toda persona, todo ser humano tiene la necesidad de manifestarse, y el arte tiene la fortaleza de dar las herramientas para que, las personas que muchas veces no pueden hablar y comunicarse encuentren otras vías de expresión. Eso puede ser a través de un sonido en la música, un movimiento en el teatro, una mancha en la pintura. Maneras de expresarse hay varias, y eso es lo que estamos potenciando, que la persona se exprese y manifieste”, indica.
Por su parte, para Angélica Minieri, madre de Sofía Díaz, la participación de su hija en el taller ha significado un beneficio profundo en el quehacer cotidiano, lo que se proyecta asimismo en los demás niños.
“Ella ha ido aprendiendo y mejorando en la forma en lo que hace, ha ido creciendo en ésto y ella misma ha visto su avance. O sea ella se va sintiendo más segura en la forma que ha avanzado mediante las diversas técnicas. Creo que ha adquirido confianza y hay un acto de elección e independencia, y ha ido expresando lo que va sintiendo en los diferentes momentos de su vida, porque no siempre pinta igual”, comenta.
Si bien el trabajo que ha realizado Fundación Ser ha significado un avance para los padres y niños, respecto de la educación que desean, para la madre y terapeuta de Rocío Kaftansky, Sonia Castro, faltan muchas cosas por hacer, sobre todo en materia de Reforma Educacional.
“Ojalá tuviésemos miles de espacios más y formas de mostrar que ellos tienen capacidades, que pueden aportar y ser agentes activos en nuestra sociedad, todos los necesitamos porque ellos también contribuyen. Desde el 2008 la educación es un derecho para todos y en realidad eso no es así. Nosotros nos sentimos impotentes porque no sabemos a donde acudir y qué cosas hacer, ojalá ir avanzando en cosas como éstas, que creo que es un tremendo paso, para mostrar las capacidades que tienen nuestros niños cuando les dan las opciones, los espacios de desarrollo”, enfatiza.
Cabe destacar que según lo informado por el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, la nueva Reforma Educacional no innovará para niños con necesidades educativas especiales porque “es un problema más complejo, que requiere ser tratado por separado”, indicó, lo cual deja a la espera a las familias de tantos niños en Chile.
Finalmente, las imágenes serán exhibidas durante todo 2015 en las torres de la fachada de Apumanque, centro comercial ubicado en Manquehue Sur 31, Las Condes.
