Diario y Radio Universidad Chile

Escritorio

Museo Nacional de Bellas Artes exhibirá 60 obras del escultor Sergio Castillo

"Sergio Castillo: domador de metales" es el nombre de la exposición que se inaugura este miércoles 1 de julio en el Museo Nacional de Bellas Artes. Curada por Silvia Westermann, la muestra recorre la trayectoria del Premio Nacional de Arte (1997) presentando sus obras en cuatro categorías: “Animales”, “Abstractos”, “Eróticas” y “Políticas”.

Diario Uchile

  Miércoles 1 de julio 2015 14:27 hrs. 
Gallo I 1979

Compartir en

“Trabaja con la calmosa concentración de los artesanos de todos los tiempos y como ama sus materiales, puede crear con rapidez y con bien saboreado y bien esforzado gozo sus joyas macizas, suntuosas y firmes sobre sus pies” escribió en 1963 Luis Oyarzún sobre la obra del escultor Sergio Castillo Mandiola (1925-2010).

Este texto, y otros de escritores e intelectuales como Pablo Neruda, quién le dedicó el poema A Sergio Castillo (1966), Tito Mundt , Fernando Alegría y Antonio Romera son uno de los hilos conductores de la exposición Sergio Castillo, domador de metales, al familiarizar al espectador con los profundos vínculos del artista con el acontecer urgente y la intelectualidad de los 60 y 70.

La exposición que se presenta desde este 1 de julio en el frontis, el hall y la Sala Matta del Museo Nacional de Bellas Artes, incluye cerca de 60 esculturas de Sergio Castillo, entre ellas obras de gran formato como Explosión (1964, hierro forjado, soldado y pintado), Renacer (2003, acero pintado y soldado) y Misterio (2004, hierro forjado y soldado).

La muestra se estructura en cuatro temas o momentos de creación del escultor: Animales, que incluye por ejemplo sus reconocidas series de gallos y toros; Eróticas, con célebres piezas como Homenaje a Neruda; Políticas, que exhibe Derecho a la libertad y Democracia, ambas de 1976, entre otras, y Abstractos.

Homenaje a Neruda 1980. Hierro forjado y soldado.

Homenaje a Neruda 1980. Hierro forjado y soldado.

En estas últimas se demuestra, de acuerdo al director del Museo Nacional de Bellas Artes, Roberto Farriol, “su interés hacia la autonomía expresiva del acero en sus diversas variaciones, dando cabida a la libertad de la búsqueda de su universo personal y permanente manejo estético”. La selección de las obras estuvo a cargo de la curadora Silvia Westermann, quien se preocupó de incluir una serie de esculturas que formaron parte de sus primeros trabajos artísticos de exploración con el acero, su material predilecto.

Dice Westermann al respecto: “el fierro o hierro o acero fue muy generoso con el artista, le enseñó a hacer animales, a desahogar sus penas por la injusticia o contarnos sus fantasías eróticas, pero sobre todo a desarrollar ese don de la monumentalidad en sus obras abstractas”. La curadora facilitó además para esta muestra numerosas obras pertenecientes a su colección personal.

Sergio Castillo, domador de metales se exhibirá en el Museo Nacional de Bellas Artes hasta el domingo 6 de septiembre. La inauguración, en tanto, tendrá lugar el 1 de julio a las 19.30 horas.

Sergio Castillo nació en Santiago el 13 de mayo de 1925 y murió en la misma ciudad el 19 de agosto de 2010. En 1948 ingresó a la Ecole de Beaux Arts y a la Academia Jullian de París, donde estudió pintura y dibujo. A su regreso a Chile, en 1954, se matriculó en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile, teniendo entre sus profesores a los escultores Julio Antonio Vásquez y Marta Colvin.

En 1967 fue nombrado profesor de la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile, comenzando una importante labor docente que le valió la obtención de la beca Fullbright en 1968, para desempeñarse como profesor visitante en la Universidad de Berkeley (California, Estados Unidos). A esta época pertenecen obras monumentales que ejecutó en las ciudades de Boston y en Sausalito, California.

Sergio Castillo recibió numerosos premios y distinciones a lo largo de su carrera, contándose entre los más importantes su nombramiento como Miembro de Número de la Academia Chilena de Bellas Artes del Instituto de Chile, en 1995, y el Premio Nacional de Arte, en 1997.

Síguenos en