Una semana en huelga de hambre cumple este lunes un grupo de ex prisioneros políticos, en reclamo por la falta de soluciones a sus demandas que se arrastran de un ayuno que realizaron el año pasado y que derivó en una mesa de trabajo con el Gobierno.
Jorge Sandoval, vocero de los ex presos en huelga, sostuvo que si bien se estableció un grupo para analizar sus reclamos, finalmente nunca hubo definiciones por parte del Ejecutivo.
“Cuando se levantó la huelga, ellos dieron un bono de un millón de pesos. Primero eran 2 millones de pesos para solamente los huelguistas. Cuando se pide que sea para todos los presos políticos de Chile, entonces ellos lo rebajan a un millón 200 mil, pero dejan afuera a las viudas y a los viudos, no los toman en cuenta. Entonces para tomar en cuenta a las viudas, les dan el 60 por ciento solamente, que lo encontramos aberrante, y a todos los presos en general, les dan un millón de pesos”, explicó el vocero.
El dirigente apuntó a la representante del Gobierno en la mesa de trabajo, la subsecretaria de la Presidencia, Patricia Silva, quien dijo nunca tomó decisiones concretas para resolver los reclamos de los ex prisioneros políticos.
Sandoval indicó que los beneficios disminuyeron e incluso recordó que en el caso de los ex prisioneros políticos que fueron exonerados luego del golpe de Estado de 1973, se les obligó a optar por una de las dos pensiones como si se tratara de problemas diferentes.
En ese sentido subrayó que “no hay una reparación real aquí. Ningún Gobierno se ha tomado la molestia de escucharnos y reconocernos realmente. Ellos han publicitado mundialmente de que en Chile no hay deuda con los presos políticos, que está todo saldado. Pero todo fue en la medida de lo posible”.
A ello se suma la mala calidad de la atención médica que reciben cuando se trata de personas con una serie de problemas físicos a raíz de la tortura y las precarias condiciones que debieron enfrentar en la cárceles de todo el país mientras estuvieron detenidos.
El dirigente sostuvo que ex prisioneros de otras regiones han solidarizado con el movimiento que iniciaron el lunes 18 de abril recién pasado y que no descartan que se sumen al ayuno en Antofagasta, Valparaíso y Coyhaique.
Una semana en huelga de hambre cumple este lunes un grupo de ex prisioneros políticos, en reclamo por la falta de soluciones a sus demandas que se arrastran de un ayuno que realizaron el año pasado y que derivó en una mesa de trabajo con el Gobierno.
Jorge Sandoval, vocero de los ex presos en huelga, sostuvo que si bien se estableció un grupo para analizar sus reclamos, finalmente nunca hubo definiciones por parte del Ejecutivo.
“Cuando se levantó la huelga, ellos dieron un bono de un millón de pesos. Primero eran 2 millones de pesos para solamente los huelguistas. Cuando se pide que sea para todos los presos políticos de Chile, entonces ellos lo rebajan a un millón 200 mil, pero dejan afuera a las viudas y a los viudos, no los toman en cuenta. Entonces para tomar en cuenta a las viudas, les dan el 60 por ciento solamente, que lo encontramos aberrante, y a todos los presos en general, les dan un millón de pesos”, explicó el vocero.
El dirigente apuntó a la representante del Gobierno en la mesa de trabajo, la subsecretaria de la Presidencia, Patricia Silva, quien dijo nunca tomó decisiones concretas para resolver los reclamos de los ex prisioneros políticos.
Sandoval indicó que los beneficios disminuyeron e incluso recordó que en el caso de los ex prisioneros políticos que fueron exonerados luego del golpe de Estado de 1973, se les obligó a optar por una de las dos pensiones como si se tratara de problemas diferentes.
En ese sentido subrayó que “no hay una reparación real aquí. Ningún Gobierno se ha tomado la molestia de escucharnos y reconocernos realmente. Ellos han publicitado mundialmente de que en Chile no hay deuda con los presos políticos, que está todo saldado. Pero todo fue en la medida de lo posible”.
A ello se suma la mala calidad de la atención médica que reciben cuando se trata de personas con una serie de problemas físicos a raíz de la tortura y las precarias condiciones que debieron enfrentar en la cárceles de todo el país mientras estuvieron detenidos.
El dirigente sostuvo que ex prisioneros de otras regiones han solidarizado con el movimiento que iniciaron el lunes 18 de abril recién pasado y que no descartan que se sumen al ayuno en Antofagasta, Valparaíso y Coyhaique.
Una semana en huelga de hambre cumple este lunes un grupo de ex prisioneros políticos, en reclamo por la falta de soluciones a sus demandas que se arrastran de un ayuno que realizaron el año pasado y que derivó en una mesa de trabajo con el Gobierno.
Jorge Sandoval, vocero de los ex presos en huelga, sostuvo que si bien se estableció un grupo para analizar sus reclamos, finalmente nunca hubo definiciones por parte del Ejecutivo.
“Cuando se levantó la huelga, ellos dieron un bono de un millón de pesos. Primero eran 2 millones de pesos para solamente los huelguistas. Cuando se pide que sea para todos los presos políticos de Chile, entonces ellos lo rebajan a un millón 200 mil, pero dejan afuera a las viudas y a los viudos, no los toman en cuenta. Entonces para tomar en cuenta a las viudas, les dan el 60 por ciento solamente, que lo encontramos aberrante, y a todos los presos en general, les dan un millón de pesos”, explicó el vocero.
El dirigente apuntó a la representante del Gobierno en la mesa de trabajo, la subsecretaria de la Presidencia, Patricia Silva, quien dijo nunca tomó decisiones concretas para resolver los reclamos de los ex prisioneros políticos.
Sandoval indicó que los beneficios disminuyeron e incluso recordó que en el caso de los ex prisioneros políticos que fueron exonerados luego del golpe de Estado de 1973, se les obligó a optar por una de las dos pensiones como si se tratara de problemas diferentes.
En ese sentido subrayó que “no hay una reparación real aquí. Ningún Gobierno se ha tomado la molestia de escucharnos y reconocernos realmente. Ellos han publicitado mundialmente de que en Chile no hay deuda con los presos políticos, que está todo saldado. Pero todo fue en la medida de lo posible”.
A ello se suma la mala calidad de la atención médica que reciben cuando se trata de personas con una serie de problemas físicos a raíz de la tortura y las precarias condiciones que debieron enfrentar en la cárceles de todo el país mientras estuvieron detenidos.
El dirigente sostuvo que ex prisioneros de otras regiones han solidarizado con el movimiento que iniciaron el lunes 18 de abril recién pasado y que no descartan que se sumen al ayuno en Antofagasta, Valparaíso y Coyhaique.
