La visita de Rudy Giuliani a Chile en momentos que nuestro país se encuentra atravesando una especie de paradigma en materias seguridad pública no es una casualidad. La conferencia otorgada por el ex alcalde de Nueva York, famoso por impulsar del llamado plan Tolerancia 0, viene a reafirmar la necesidad de realizar algunos cambios estructurales profundos en la forma en que el país enfrenta el flagelo de la delincuencia.

La postura del experto orador norteamericano -invitado por la Fundación La Otra Mirada, la Universidad Adolfo Ibáñez y el diario El Mercurio-, claramente se identifica con los postulados del Partido Demócrata de Estados Unidos y su cercanía a las políticas públicas de control como la legitimización del porte y uso de armamento o el endurecimiento de las penas por delitos, nos plantea otro tipo de reflexión que me gustaría destacar.

Conocida es la política pública aplicada a fines de la década del 90 en Nueva York y que se denominó “teoría de las ventanas rotas”, que en simple nos plantea que si la sociedad permite que se rompa una ventana, no pasará mucho tiempo en que se rompan las siguiente y así sucesivamente hasta hacer caer la casa por completo, y este es justamente el punto que nos debe llamar a reflexionar acerca de cómo estamos haciendo las cosas en Chile. Según esta tesis, si dejamos que una manifestación destroce el bien de uso público, se tomen calles y avenidas y se destruyan entre otras cosas como iglesias y símbolos importantes para algún segmento de nuestra población, sin duda que estamos frente al inicio de una impunidad de hechos que constituyen pequeños detalles pero que si no logramos controlar en el tiempo, se van a transformar en verdaderos procesos vandálicos, semilla ideal para la delincuencia y el delito.

Sin duda la realidad americana es distinta a la nuestra en muchos sentidos, pero la idea basal de la teoría impulsada por Giuliani en Nueva York, más allá de su aplicación en nuestro país, nos está diciendo que debemos actuar pronto, con actitud y voluntad política.  Hoy Chile se encuentra en una inédita escalada de violencia y delincuencia, con una percepción de temor histórica y con autoridades que simplemente no han sabido responder ante esta situación de una manera eficiente y oportuna, con debates legislativos de agenda corta que se transforman en eternas discusiones sin un mejor rumbo.

Ya lo dicen los expertos, los delincuentes son unos pocos pero actúan como si fueran la mayoría. Esperemos que esta visita de Giuliani sea el punto de partida para escuchar y abrir los ojos a otras realidades, y así poder evitar seguir rompiendo las ventanas de nuestro hermoso país.

– Por René Barba, concejal por Lo Barnechea.