En el marco de una jornada de discusión sobre la Reforma a la Educación Superior presentada hace tres meses por el Ejecutivo, rectores, académicos y funcionarios de distintas instituciones se reunieron en la Casa Central de Universidad de Chile y delinearon los elementos a impulsar en su tramitación.

El fortalecimiento a la educación pública, el financiamiento, la administración y gobernanza de las instituciones, serían los principales ejes del diálogo, registrándose en los dos últimos dificultades de acuerdos entre los actores.

Representantes de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) aseguraron que ya se tiene un borrador con indicaciones y la próxima semana estará listo el documento oficial, no obstante se requerirían últimos trabajos con comunidades universitarias para alcanzar decisiones en común sobre la administración y gobernanza.

El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago y vocero de la Confech, Patricio Medina, indicó que se realizarán más jornadas de trabajo para robustecer los puntos de encuentro y disminuir las discrepancias.

“Principalmente vislumbramos que la eliminación del CAE es un punto central, aumentar los aportes basales a las instituciones del Estado y también sobre gobernanza y administración, la elección de la autoridad unipersonales y tener mayor participación”, expresó el dirigente.

Al encuentro también asistió el rector de la Universidad de Chile y presidente del Consorcio de Universidades del Estado (Cuech), Ennio Vivaldi, y el rector de la Universidad de Valparaíso y vicepresidente del Consejo de Rectores (Cruch), Aldo Valle. Este último reconoció que no hay pleno acuerdo en el organismo colegiado con los representantes de planteles no estatales del G-9 a propósito de los instrumentos de financiamiento.

“Se están hoy apreciando la distribución de los recursos entre las universidades estatales y no estatales, pero no tengo claro todavía cuál es específicamente el problema que se produce, el menoscabo o la diferencia en contra de las universidades del G-9. Obviamente estamos conversando acerca de cómo superamos esa situación porque el documento que hemos trabajado se inspira en que no haya discriminaciones, descalificación del rol que han cumplido todas las universidades del Consejo de Rectores”, dijo el rector de la Universidad de Valparaíso.

Cabe señalar que los rectores esta semana entregaron al Ministerio de Educación sus propias indicaciones al proyecto, sin el respaldo de las universidades del G-9. Sin embargo, Valle desestimó la posibilidad de una ruptura de las relaciones, a pesar de también existir críticas en torno al debate del presupuesto 2017.

Desde la perspectiva de otros actores, la presidenta de la Federación Nacional de Profesionales y Técnicos de las Universidades Estatales, Betsy Saavedra, destacó la importancia de tener una política de recursos humanos dentro de las universidades estales y privadas.

“De base una política que realmente entregue estabilidad a los trabajadores y asegure sus oportunidades de desarrollo. Asimismo, nos interesa la gobernanza, es importante asegurar el buen uso de los recursos públicos y por eso estamos haciendo propuestas en torno a que se mejoren los mecanismos de control y fiscalización de los recursos dentro de las universidades”, indicó Betsy Saavedra.

En tanto, representantes de los trabajadores de los planteles enfatizaron en que es necesario incluir un capítulo aparte en el proyecto de ley de Reforma a la Educación Superior que aborde las relaciones laborales. Por último, los académicos llamaron a los parlamentarios a escuchar a las comunidades universitarias en la tramitación de la iniciativa.