Durante este año se dieron a conocer varios problemas que atraviesa la Selección Chilena de Voleibol Femenino, después de que el equipo finalizara en el último puesto en el Torneo Preolímpico de Bariloche.
Para Jorge Pino, presidente de la Federación Chilena de Voleibol, las Seleccionadas Chilenas no son entendidas en sus respectivas casas de estudios respecto a la necesidad que tienen de entrenar para mejorar como atletas de alto rendimiento. Por lo tanto, se les hace muy difícil congeniar sus estudios con su actividad deportiva. Esto, se suma al factor económico. Según Pino, “a los 18 años, cuando pasan a la universidad, la universidad de transforma en un problema y en una amenaza para el deporte de alto rendimiento, sobre todo para las seleccionadas, producto de que los profesores no les suspenden las pruebas si tienen que ir a representar a Chile y hacen las pruebas antes o cuando llegan les hacen dos o tres pruebas y las terminan matando con sus horarios. Segundo, las universidades les ofrecen una carrera y los papás les dicen que se queden con las carreras y que dejen la Selección porque eso no les da plata”.
De hecho, las seleccionadas sólo reciben dinero en el caso de ganar medallas (Beca Proddar). Pino afirma que además de que ellas deberían recibir un pago aparte, los dirigentes también deberían poder acceder a aquello.
Según la autoridad “es un tema país. Es un tema de los rectores de las universidades. Es un problema del Gobierno. Tenemos que sentarnos a conversar, porque yo finalmente termino diciendo que la universidad es el cementerio del alto rendimiento”.
Para Jorge Pino habría una falta de acuerdo entre “el Instituto Nacional del Deporte (IND), los responsables de las universidades y las federaciones. Debemos llegar a un acuerdo en tres temas: Darle facilidades a los seleccionados nacionales para estudiar. Los seleccionados nacionales de Argentina, hacen las pruebas por Internet. Segundo, que no entreguen mayor recurso, y que sea equiparado, a las ligas universitarias y las ligadas federadas. Y tercero, hacer una alianza estratégica entre las federaciones y las universidades y que estas últimas no sean una amenaza”.
Seleccionadas jugando para otros clubes
Jorge Pino afirma que “la ley dice que el deporte de alto rendimiento lo administran las federaciones. Pero, en estos momentos, las universidades vienen al gimnasio a ver los campeonatos y les ofrecen becas a las jugadoras y jugadores. Van y entrenan dos, máximo tres veces a la semana. Uno de esos días tiene la competencia universitaria. Por lo tanto, al profesor se le facilitan las cosas y se ve como si la universidad tuviera mejor nivel. Terminan sacándonos jugadoras a nosotros y las seleccionados se van al universitario para tener mejores notas. El Gobierno estaría dando más de 500 millones de pesos a los campeonatos universitarios y faltaría una alianza estratégica. Según Pino, “el gobierno no se ha dado cuenta que está financiando organismos paralelos que son los mismos que terminan jugando en las selecciones y en las ligas. El Instituto Nacional del Deporte debería actuar como garante, pero hoy actúa como financista de nosotros y de los clubes de las universidades”.
El 14 de noviembre culminó el Campeonato Nacional Universitario. El Instituto Nacional del Deporte habría financiado la visita de un árbitro internacional y un técnico argentino. Según el Presidente de la Federación, “habían 12 técnicos de los cuales 6 eran ayudantes en la charla. Habiendo 48 técnicos en el nacional universitario. El IND debió haberse juntado con la Federación y haber buscado la manera de aprovechar el recurso humano y haber abierto el espectro para que todos hubieran podido tener esa capacitación”.
Sin ir más lejos, este sábado se dará comienzo a la Liga Nacional de Voleibol Femenino 2016. Para este Campeonato, las ligas habrían recibido 800 millones de pesos y la Selección Nacional 24 millones, dijo Jorge Pino.
Durante este año se dieron a conocer varios problemas que atraviesa la Selección Chilena de Voleibol Femenino, después de que el equipo finalizara en el último puesto en el Torneo Preolímpico de Bariloche.
Para Jorge Pino, presidente de la Federación Chilena de Voleibol, las Seleccionadas Chilenas no son entendidas en sus respectivas casas de estudios respecto a la necesidad que tienen de entrenar para mejorar como atletas de alto rendimiento. Por lo tanto, se les hace muy difícil congeniar sus estudios con su actividad deportiva. Esto, se suma al factor económico. Según Pino, “a los 18 años, cuando pasan a la universidad, la universidad de transforma en un problema y en una amenaza para el deporte de alto rendimiento, sobre todo para las seleccionadas, producto de que los profesores no les suspenden las pruebas si tienen que ir a representar a Chile y hacen las pruebas antes o cuando llegan les hacen dos o tres pruebas y las terminan matando con sus horarios. Segundo, las universidades les ofrecen una carrera y los papás les dicen que se queden con las carreras y que dejen la Selección porque eso no les da plata”.
De hecho, las seleccionadas sólo reciben dinero en el caso de ganar medallas (Beca Proddar). Pino afirma que además de que ellas deberían recibir un pago aparte, los dirigentes también deberían poder acceder a aquello.
Según la autoridad “es un tema país. Es un tema de los rectores de las universidades. Es un problema del Gobierno. Tenemos que sentarnos a conversar, porque yo finalmente termino diciendo que la universidad es el cementerio del alto rendimiento”.
Para Jorge Pino habría una falta de acuerdo entre “el Instituto Nacional del Deporte (IND), los responsables de las universidades y las federaciones. Debemos llegar a un acuerdo en tres temas: Darle facilidades a los seleccionados nacionales para estudiar. Los seleccionados nacionales de Argentina, hacen las pruebas por Internet. Segundo, que no entreguen mayor recurso, y que sea equiparado, a las ligas universitarias y las ligadas federadas. Y tercero, hacer una alianza estratégica entre las federaciones y las universidades y que estas últimas no sean una amenaza”.
Seleccionadas jugando para otros clubes
Jorge Pino afirma que “la ley dice que el deporte de alto rendimiento lo administran las federaciones. Pero, en estos momentos, las universidades vienen al gimnasio a ver los campeonatos y les ofrecen becas a las jugadoras y jugadores. Van y entrenan dos, máximo tres veces a la semana. Uno de esos días tiene la competencia universitaria. Por lo tanto, al profesor se le facilitan las cosas y se ve como si la universidad tuviera mejor nivel. Terminan sacándonos jugadoras a nosotros y las seleccionados se van al universitario para tener mejores notas. El Gobierno estaría dando más de 500 millones de pesos a los campeonatos universitarios y faltaría una alianza estratégica. Según Pino, “el gobierno no se ha dado cuenta que está financiando organismos paralelos que son los mismos que terminan jugando en las selecciones y en las ligas. El Instituto Nacional del Deporte debería actuar como garante, pero hoy actúa como financista de nosotros y de los clubes de las universidades”.
El 14 de noviembre culminó el Campeonato Nacional Universitario. El Instituto Nacional del Deporte habría financiado la visita de un árbitro internacional y un técnico argentino. Según el Presidente de la Federación, “habían 12 técnicos de los cuales 6 eran ayudantes en la charla. Habiendo 48 técnicos en el nacional universitario. El IND debió haberse juntado con la Federación y haber buscado la manera de aprovechar el recurso humano y haber abierto el espectro para que todos hubieran podido tener esa capacitación”.
Sin ir más lejos, este sábado se dará comienzo a la Liga Nacional de Voleibol Femenino 2016. Para este Campeonato, las ligas habrían recibido 800 millones de pesos y la Selección Nacional 24 millones, dijo Jorge Pino.
Durante este año se dieron a conocer varios problemas que atraviesa la Selección Chilena de Voleibol Femenino, después de que el equipo finalizara en el último puesto en el Torneo Preolímpico de Bariloche.
Para Jorge Pino, presidente de la Federación Chilena de Voleibol, las Seleccionadas Chilenas no son entendidas en sus respectivas casas de estudios respecto a la necesidad que tienen de entrenar para mejorar como atletas de alto rendimiento. Por lo tanto, se les hace muy difícil congeniar sus estudios con su actividad deportiva. Esto, se suma al factor económico. Según Pino, “a los 18 años, cuando pasan a la universidad, la universidad de transforma en un problema y en una amenaza para el deporte de alto rendimiento, sobre todo para las seleccionadas, producto de que los profesores no les suspenden las pruebas si tienen que ir a representar a Chile y hacen las pruebas antes o cuando llegan les hacen dos o tres pruebas y las terminan matando con sus horarios. Segundo, las universidades les ofrecen una carrera y los papás les dicen que se queden con las carreras y que dejen la Selección porque eso no les da plata”.
De hecho, las seleccionadas sólo reciben dinero en el caso de ganar medallas (Beca Proddar). Pino afirma que además de que ellas deberían recibir un pago aparte, los dirigentes también deberían poder acceder a aquello.
Según la autoridad “es un tema país. Es un tema de los rectores de las universidades. Es un problema del Gobierno. Tenemos que sentarnos a conversar, porque yo finalmente termino diciendo que la universidad es el cementerio del alto rendimiento”.
Para Jorge Pino habría una falta de acuerdo entre “el Instituto Nacional del Deporte (IND), los responsables de las universidades y las federaciones. Debemos llegar a un acuerdo en tres temas: Darle facilidades a los seleccionados nacionales para estudiar. Los seleccionados nacionales de Argentina, hacen las pruebas por Internet. Segundo, que no entreguen mayor recurso, y que sea equiparado, a las ligas universitarias y las ligadas federadas. Y tercero, hacer una alianza estratégica entre las federaciones y las universidades y que estas últimas no sean una amenaza”.
Seleccionadas jugando para otros clubes
Jorge Pino afirma que “la ley dice que el deporte de alto rendimiento lo administran las federaciones. Pero, en estos momentos, las universidades vienen al gimnasio a ver los campeonatos y les ofrecen becas a las jugadoras y jugadores. Van y entrenan dos, máximo tres veces a la semana. Uno de esos días tiene la competencia universitaria. Por lo tanto, al profesor se le facilitan las cosas y se ve como si la universidad tuviera mejor nivel. Terminan sacándonos jugadoras a nosotros y las seleccionados se van al universitario para tener mejores notas. El Gobierno estaría dando más de 500 millones de pesos a los campeonatos universitarios y faltaría una alianza estratégica. Según Pino, “el gobierno no se ha dado cuenta que está financiando organismos paralelos que son los mismos que terminan jugando en las selecciones y en las ligas. El Instituto Nacional del Deporte debería actuar como garante, pero hoy actúa como financista de nosotros y de los clubes de las universidades”.
El 14 de noviembre culminó el Campeonato Nacional Universitario. El Instituto Nacional del Deporte habría financiado la visita de un árbitro internacional y un técnico argentino. Según el Presidente de la Federación, “habían 12 técnicos de los cuales 6 eran ayudantes en la charla. Habiendo 48 técnicos en el nacional universitario. El IND debió haberse juntado con la Federación y haber buscado la manera de aprovechar el recurso humano y haber abierto el espectro para que todos hubieran podido tener esa capacitación”.
Sin ir más lejos, este sábado se dará comienzo a la Liga Nacional de Voleibol Femenino 2016. Para este Campeonato, las ligas habrían recibido 800 millones de pesos y la Selección Nacional 24 millones, dijo Jorge Pino.
