En el primer programa de Chile a todo color de esta temporada, Rodrigo Sandoval jefe del Departamento de Extranjería y Migración del Ministerio del Interior, señaló que se ha verificado un cambio de enfoque sobre la migración, ya que antes era tomada desde un punto de vista vulnerabilizador y como un problema, cuestión que ha cambiado para enfocar este fenómeno como una oportunidad para nuestro país.

En este sentido, Sandoval hizo énfasis en que la migración, sobre todo a nivel de medios de comunicación, está siendo tratada desde esta nueva perspectiva, imponiendo nuevos paradigmas para analizar el fenómeno.

“Lo políticamente correcto es hablar de la migración como lo que es: una oportunidad, y yo creo que ese es un triunfo en términos comunicacionales. Hoy día uno tiene que felicitarse en que es más difícil hablar mal de la migración que bien, y uno tiene que asumir que, al menos, a nivel de medios de comunicación existe una conciencia o, por lo menos, un pudor a cómo referirse a la migración algo que no existía hace dos o tres años”.

Además, Sandoval señaló que el Departamento de Extranjería dejó de ser un organismo invisible para pasar a tener un rol fundamental en la generación de políticas públicas y también como un interlocutor válido en los últimos tres años, tiempo en el que ha habido un crecimiento tanto en recursos físicos como humanos para atender a los miles de extranjeros que vienen a quedarse a Chile: “Eso habla de una dignidad con la que queremos tratar a los inmigrantes”, aseguró.

El jefe del Departamento de Extranjería destacó una serie de instrumentos legales que se han venido a sumar para responder a las distintas realidades que plantea la migración.

“Creamos la visa por motivos laborales que, en la práctica, es un proceso de regularización para todos aquellos que cuentan con contrato de trabajo. La visa de unión civil que es un ejercicio ético de defensa de la familia, de todas las formas de familia, y que da cuenta de una mirada distinta, una mirada de entender que la migración, la política migratoria es la gestión de la realidad del mundo que llega a Chile, en formato de proyecto migratorio y, por lo tanto, nosotros siempre tenemos que ir más delante de lo que es la realidad nacional”.

Rodrigo Sandoval destacó la campaña que están llevando a cabo para evitar que los extranjeros que vengan a trabajar a Chile sean víctimas de los llamados contratos falsos, algo que incluso puede repercutir en la expulsión de la persona que sea sorprendida en esta condición, por lo mismo han intensificado la entrega de información en aeropuertos y pasos fronterizos a quienes llegan al país.

“Lo que nosotros tenemos que preservar no es solamente el derecho de las personas a migrar, sino que también la integridad de la buena fe pública en el Estado de Chile. En Chile lo que consta en un contrato de trabajo da cuenta de la realidad y debe suscribirse de buena fe, por lo tanto nuestra obligación es que cada vez que constatamos la existencia de esos contratos falsos es no dar lugar a ese beneficio migratorio y poner los antecedentes en conocimiento de la justicia para que siga las responsabilidades de aquellas personas que lucran con esa realidad”.

Respecto del postergado proyecto que moderniza la Ley de Migraciones, Sandoval reconoció que el Gobierno prefirió priorizar otras iniciativas por sobre esta, no obstante manifestó su esperanza en que este cuerpo legal será ingresado a trámite al Parlamento antes que termine la administración de Michelle Bachelet.

“Un gobierno tiene entre sus grandes desafíos el administrar prioridades, administrar urgencias, administrar jerarquías, y por lo tanto yo no estoy llamado a hacer una evaluación respecto de si la migración es o no es más importante que otras áreas que han sido prioritarias en esta gestión gubernamental. Lo que yo sí puedo manifestar es la esperanza y el compromiso que tiene este gobierno, a través de un proyecto de ley y confío de verdad que ese proyecto va a entrar al Congreso Nacional”.

Finalmente, el jefe del Departamento de Extranjería y Migración reiteró que la migración resulta ser una oportunidad para el país, y no solamente al nivel económico sino que para el desarrollo democrático: “Una sociedad que aprende a convivir con la migración, es una sociedad que termina siendo más democrática”, concluyó.