Este jueves se desarrollaron los alegatos del recurso de amparo en favor de los jóvenes de la Residencia Alihuén, ubicada en Buin, que, de acuerdo a la denuncia del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), sufrieron malos tratos por parte de funcionarios de este centro administrado por Coanil y bajo custodia del Servicio Nacional de Menores (Sename).
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, el director INDH, Branislav Marelic, afirmó que los representantes de Coanil desconocieron sus atribuciones de fiscalizar este caso y, en general, a las residencias del Estado o de las organizaciones colaboradoras acreditadas, porque estarían vulnerando y estigmatizando a los niños y jóvenes internados.
Sobre esta situación, la posición del Instituto, además de denunciar el trato vejatorio contra estos jóvenes, fue difundir un video donde se evidenciaban las contenciones que efectuaban los funcionarios. En estas grabaciones se observaba que los trabajadores los amarraban a una camilla boca abajo y que, en algunos casos, los mantenían en ese estado por más de una hora.
Coanil señaló ante la Corte de Apelaciones de San Miguel que estos mecanismos eran apropiados y respondían a un protocolo institucional, lo que, a juicio, de Marelic estaría fuera de toda norma.
Además, reconoció que los protocolos o el marco regulatorio para determinar el trato de los funcionarios con los jóvenes en estas condiciones es muy amplio y está normado por el Ministerio de Salud, sumado a otras regulaciones de Sename.
Pero más allá de eso, indicó que si en algún punto esas normativas dejan espacio para justificar este tipo de contenciones van a insistir en modificarlas para que se apeguen a un trato digno y respetuoso.
“Independiente de que esto tenga presuntamente un aval médico y esté protocolizado, esto no puede ser incompatible con la dignidad humana. Nosotros estamos fijando los límites de lo que no puede pasar y eso es lo que se muestra en los videos y en los relatos de los funcionarios del centro de Coanil”, sostuvo.
Investigación en los centros de Sename
El director del INDH se refirió a la misión de observación que han realizado en 170 residencias de Sename a nivel nacional. Con esto concluyó la primera etapa de trabajo que tenía por objetivo recoger información sobre el funcionamiento al interior de los centros y que compilarán en un informe que sería entregado durante el próximo mes de junio.
Marelic señaló que las denuncias por malos tratos en la Residencia Alihuén respaldan el trabajo que han venido realizando durante los últimos meses, porque este centro fue al único donde debieron ingresar con una orden de allanamiento policial y ese era un síntoma de las irregularidades que luego se denunciaron.
A propósito de la tramitación legislativa de la Ley de Garantías de los Derechos de la Niñez, el abogado dijo que sin duda será un aporte en la materia, pero que para implementar reformas a la institucionalidad basta con lo establecido por Convención Internacional sobre los Derechos del Niño que Chile ratificó en 1990.
Además, indicó que uno de los temas donde se encuentran sistematizando información es la situación que enfrentan los niños y niñas que viven en las cárceles hasta los dos años porque su madre cumple con una condena. Sobre esto esperan dar a conocer un informe al corto plazo.
Este jueves se desarrollaron los alegatos del recurso de amparo en favor de los jóvenes de la Residencia Alihuén, ubicada en Buin, que, de acuerdo a la denuncia del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), sufrieron malos tratos por parte de funcionarios de este centro administrado por Coanil y bajo custodia del Servicio Nacional de Menores (Sename).
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, el director INDH, Branislav Marelic, afirmó que los representantes de Coanil desconocieron sus atribuciones de fiscalizar este caso y, en general, a las residencias del Estado o de las organizaciones colaboradoras acreditadas, porque estarían vulnerando y estigmatizando a los niños y jóvenes internados.
Sobre esta situación, la posición del Instituto, además de denunciar el trato vejatorio contra estos jóvenes, fue difundir un video donde se evidenciaban las contenciones que efectuaban los funcionarios. En estas grabaciones se observaba que los trabajadores los amarraban a una camilla boca abajo y que, en algunos casos, los mantenían en ese estado por más de una hora.
Coanil señaló ante la Corte de Apelaciones de San Miguel que estos mecanismos eran apropiados y respondían a un protocolo institucional, lo que, a juicio, de Marelic estaría fuera de toda norma.
Además, reconoció que los protocolos o el marco regulatorio para determinar el trato de los funcionarios con los jóvenes en estas condiciones es muy amplio y está normado por el Ministerio de Salud, sumado a otras regulaciones de Sename.
Pero más allá de eso, indicó que si en algún punto esas normativas dejan espacio para justificar este tipo de contenciones van a insistir en modificarlas para que se apeguen a un trato digno y respetuoso.
“Independiente de que esto tenga presuntamente un aval médico y esté protocolizado, esto no puede ser incompatible con la dignidad humana. Nosotros estamos fijando los límites de lo que no puede pasar y eso es lo que se muestra en los videos y en los relatos de los funcionarios del centro de Coanil”, sostuvo.
Investigación en los centros de Sename
El director del INDH se refirió a la misión de observación que han realizado en 170 residencias de Sename a nivel nacional. Con esto concluyó la primera etapa de trabajo que tenía por objetivo recoger información sobre el funcionamiento al interior de los centros y que compilarán en un informe que sería entregado durante el próximo mes de junio.
Marelic señaló que las denuncias por malos tratos en la Residencia Alihuén respaldan el trabajo que han venido realizando durante los últimos meses, porque este centro fue al único donde debieron ingresar con una orden de allanamiento policial y ese era un síntoma de las irregularidades que luego se denunciaron.
A propósito de la tramitación legislativa de la Ley de Garantías de los Derechos de la Niñez, el abogado dijo que sin duda será un aporte en la materia, pero que para implementar reformas a la institucionalidad basta con lo establecido por Convención Internacional sobre los Derechos del Niño que Chile ratificó en 1990.
Además, indicó que uno de los temas donde se encuentran sistematizando información es la situación que enfrentan los niños y niñas que viven en las cárceles hasta los dos años porque su madre cumple con una condena. Sobre esto esperan dar a conocer un informe al corto plazo.
Este jueves se desarrollaron los alegatos del recurso de amparo en favor de los jóvenes de la Residencia Alihuén, ubicada en Buin, que, de acuerdo a la denuncia del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), sufrieron malos tratos por parte de funcionarios de este centro administrado por Coanil y bajo custodia del Servicio Nacional de Menores (Sename).
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, el director INDH, Branislav Marelic, afirmó que los representantes de Coanil desconocieron sus atribuciones de fiscalizar este caso y, en general, a las residencias del Estado o de las organizaciones colaboradoras acreditadas, porque estarían vulnerando y estigmatizando a los niños y jóvenes internados.
Sobre esta situación, la posición del Instituto, además de denunciar el trato vejatorio contra estos jóvenes, fue difundir un video donde se evidenciaban las contenciones que efectuaban los funcionarios. En estas grabaciones se observaba que los trabajadores los amarraban a una camilla boca abajo y que, en algunos casos, los mantenían en ese estado por más de una hora.
Coanil señaló ante la Corte de Apelaciones de San Miguel que estos mecanismos eran apropiados y respondían a un protocolo institucional, lo que, a juicio, de Marelic estaría fuera de toda norma.
Además, reconoció que los protocolos o el marco regulatorio para determinar el trato de los funcionarios con los jóvenes en estas condiciones es muy amplio y está normado por el Ministerio de Salud, sumado a otras regulaciones de Sename.
Pero más allá de eso, indicó que si en algún punto esas normativas dejan espacio para justificar este tipo de contenciones van a insistir en modificarlas para que se apeguen a un trato digno y respetuoso.
“Independiente de que esto tenga presuntamente un aval médico y esté protocolizado, esto no puede ser incompatible con la dignidad humana. Nosotros estamos fijando los límites de lo que no puede pasar y eso es lo que se muestra en los videos y en los relatos de los funcionarios del centro de Coanil”, sostuvo.
Investigación en los centros de Sename
El director del INDH se refirió a la misión de observación que han realizado en 170 residencias de Sename a nivel nacional. Con esto concluyó la primera etapa de trabajo que tenía por objetivo recoger información sobre el funcionamiento al interior de los centros y que compilarán en un informe que sería entregado durante el próximo mes de junio.
Marelic señaló que las denuncias por malos tratos en la Residencia Alihuén respaldan el trabajo que han venido realizando durante los últimos meses, porque este centro fue al único donde debieron ingresar con una orden de allanamiento policial y ese era un síntoma de las irregularidades que luego se denunciaron.
A propósito de la tramitación legislativa de la Ley de Garantías de los Derechos de la Niñez, el abogado dijo que sin duda será un aporte en la materia, pero que para implementar reformas a la institucionalidad basta con lo establecido por Convención Internacional sobre los Derechos del Niño que Chile ratificó en 1990.
Además, indicó que uno de los temas donde se encuentran sistematizando información es la situación que enfrentan los niños y niñas que viven en las cárceles hasta los dos años porque su madre cumple con una condena. Sobre esto esperan dar a conocer un informe al corto plazo.
