PSU: Expertos plantean necesidad de profundizar otros mecanismos de ingreso a la universidad
Este lunes y martes miles de estudiantes deberán rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU), para ingresar al sistema de educación superior el próximo año. Desde el DEMRE destacaron el aumento de personas en situación de discapacidad que se inscribieron en este proceso.
Domingo 26 de noviembre 2017 8:49 hrs.
Más de 295 mil estudiantes se inscribieron para rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU) este lunes y martes. Cifra histórica de personas, de las cuales el 70,2 por ciento egresó este año del colegio, mientras que el 29,78 proviene de promociones anteriores.
En tanto, del total de inscritos 4113 estudiantes son extranjeros, número que se triplicó respecto del año pasado. Desde Departamento de Medición y Registro de la Educación (DEMRE), explicaron que anteriormente este dato se obtenía del Registro Civil, pero que desde este año se obtiene directamente del formulario de inscripción.
Leonor Varas, directora del DEMRE, destacó que en este proceso hubo cambios en la fase de inscripción y difusión, lo que impulsó una serie de ajustes que permitieron que se quintuplicara el número de personas en situación de discapacidad que rendirán la PSU este año.
“Les preguntamos si tenían alguna situación de discapacidad y más de tres mil personas dijeron que sí. Luego presentaron solicitud de ajuste un poco más de 700 estudiantes, lo que se aprobó en 452 casos. A parte del número, la otra novedad es que los ajustes que hemos otorgado son muchísimo más sofisticados que lo que teníamos antes, estamos muy bien asesorados por un equipo experto y multidisciplinario”, indicó.
Este lunes 27 de noviembre de rendirá la prueba de Lenguaje y Comunicación en la mañana y la Ciencias en la tarde, mientras que el martes los estudiantes realizarán las prueba de Matemáticas en la mañana y la Historia, Geografía y Ciencias Sociales en la tarde.
Los puntajes se conocerán el martes 26 de diciembre, mismo día en que comenzarán las postulaciones a las universidades, proceso que se llevará a cabo hasta el sábado 30 de diciembre. Finalmente, los resultados de selección serán publicados el 18 de enero a las 23 horas.
La necesidad de nuevos mecanismos de ingreso
Ante las críticas que ha recibido la PSU por tratarse de una medición estandarizada que define el ingreso a la educación superior, desde DEMRE indicaron que tienen la intención de desarrollar nuevas pruebas, pero que para llevarlas a cabo se requiere un tiempo prudente de varios años.
Para Leonor Varas, “la PSU es una prueba que mide en un momento de la vida ciertas cosas, por lo tanto no puede ser un número tan importante que signifique una medida global de un ser humano”.
Carlos Henríquez, secretario ejecutivo de la Agencia de Calidad de la Educación, comentó que vale la pena tener mecanismos de ingreso más amplios, no solo una prueba masiva.
“Hay una agenda que, al parecer, está liderando la Universidad de Chile, pero creo que el Consejo de Rectores (CRUCh) tiene un tremendo desafío en cómo ir mejorando los instrumentos de selección, para que tengan una mirada más amplia”, sostuvo.
A su juicio, ningún instrumento podrá hacerse cargo de la inequidad del país. Sin embargo, una medida que podría compensar esta situación son los cupos de equidad que entregan algunas universidades. “El punto central es cómo la reforma educacional en marcha y los esfuerzos que se harán en los próximos años nos permitirán entregar el apoyo necesario para que los que menos tienen tengan mayores posibilidades de desarrollar sus potencialidades”.
Mario Sobarzo, académico de la Universidad de Santiago y director del Magister de Filosofía Política de dicha casa de estudio, explicó que la PSU radicalizó las diferencias entre los puntajes respecto de la Prueba de Actitud Académica (PAA).
En esa línea, dijo que es cada vez más grande la brecha que se genera en términos socioeconómicos. “Lo que muestra la PSU es que puede servir para que las universidades seleccionen, pero que no necesariamente implica que los mejores estudiantes van a tener buenos resultados en ellas, por lo tanto hay que ampliar las posibilidades de selección”.
“Por supuesto que se han generado, pero desgraciadamente son iniciativas que tienen carácter aislado, que no están necesariamente coordinadas a nivel de todas las universidades o al nivel del sistema de educación en general. Lo peor o más complejo de todo esto es que estas iniciativas no implican un cambio del sistema de selección”, expresó.
Más de 295 mil estudiantes se inscribieron para rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU) este lunes y martes. Cifra histórica de personas, de las cuales el 70,2 por ciento egresó este año del colegio, mientras que el 29,78 proviene de promociones anteriores.
En tanto, del total de inscritos 4113 estudiantes son extranjeros, número que se triplicó respecto del año pasado. Desde Departamento de Medición y Registro de la Educación (DEMRE), explicaron que anteriormente este dato se obtenía del Registro Civil, pero que desde este año se obtiene directamente del formulario de inscripción.
Leonor Varas, directora del DEMRE, destacó que en este proceso hubo cambios en la fase de inscripción y difusión, lo que impulsó una serie de ajustes que permitieron que se quintuplicara el número de personas en situación de discapacidad que rendirán la PSU este año.
“Les preguntamos si tenían alguna situación de discapacidad y más de tres mil personas dijeron que sí. Luego presentaron solicitud de ajuste un poco más de 700 estudiantes, lo que se aprobó en 452 casos. A parte del número, la otra novedad es que los ajustes que hemos otorgado son muchísimo más sofisticados que lo que teníamos antes, estamos muy bien asesorados por un equipo experto y multidisciplinario”, indicó.
Este lunes 27 de noviembre de rendirá la prueba de Lenguaje y Comunicación en la mañana y la Ciencias en la tarde, mientras que el martes los estudiantes realizarán las prueba de Matemáticas en la mañana y la Historia, Geografía y Ciencias Sociales en la tarde.
Los puntajes se conocerán el martes 26 de diciembre, mismo día en que comenzarán las postulaciones a las universidades, proceso que se llevará a cabo hasta el sábado 30 de diciembre. Finalmente, los resultados de selección serán publicados el 18 de enero a las 23 horas.
La necesidad de nuevos mecanismos de ingreso
Ante las críticas que ha recibido la PSU por tratarse de una medición estandarizada que define el ingreso a la educación superior, desde DEMRE indicaron que tienen la intención de desarrollar nuevas pruebas, pero que para llevarlas a cabo se requiere un tiempo prudente de varios años.
Para Leonor Varas, “la PSU es una prueba que mide en un momento de la vida ciertas cosas, por lo tanto no puede ser un número tan importante que signifique una medida global de un ser humano”.
Carlos Henríquez, secretario ejecutivo de la Agencia de Calidad de la Educación, comentó que vale la pena tener mecanismos de ingreso más amplios, no solo una prueba masiva.
“Hay una agenda que, al parecer, está liderando la Universidad de Chile, pero creo que el Consejo de Rectores (CRUCh) tiene un tremendo desafío en cómo ir mejorando los instrumentos de selección, para que tengan una mirada más amplia”, sostuvo.
A su juicio, ningún instrumento podrá hacerse cargo de la inequidad del país. Sin embargo, una medida que podría compensar esta situación son los cupos de equidad que entregan algunas universidades. “El punto central es cómo la reforma educacional en marcha y los esfuerzos que se harán en los próximos años nos permitirán entregar el apoyo necesario para que los que menos tienen tengan mayores posibilidades de desarrollar sus potencialidades”.
Mario Sobarzo, académico de la Universidad de Santiago y director del Magister de Filosofía Política de dicha casa de estudio, explicó que la PSU radicalizó las diferencias entre los puntajes respecto de la Prueba de Actitud Académica (PAA).
En esa línea, dijo que es cada vez más grande la brecha que se genera en términos socioeconómicos. “Lo que muestra la PSU es que puede servir para que las universidades seleccionen, pero que no necesariamente implica que los mejores estudiantes van a tener buenos resultados en ellas, por lo tanto hay que ampliar las posibilidades de selección”.
“Por supuesto que se han generado, pero desgraciadamente son iniciativas que tienen carácter aislado, que no están necesariamente coordinadas a nivel de todas las universidades o al nivel del sistema de educación en general. Lo peor o más complejo de todo esto es que estas iniciativas no implican un cambio del sistema de selección”, expresó.
Más de 295 mil estudiantes se inscribieron para rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU) este lunes y martes. Cifra histórica de personas, de las cuales el 70,2 por ciento egresó este año del colegio, mientras que el 29,78 proviene de promociones anteriores.
En tanto, del total de inscritos 4113 estudiantes son extranjeros, número que se triplicó respecto del año pasado. Desde Departamento de Medición y Registro de la Educación (DEMRE), explicaron que anteriormente este dato se obtenía del Registro Civil, pero que desde este año se obtiene directamente del formulario de inscripción.
Leonor Varas, directora del DEMRE, destacó que en este proceso hubo cambios en la fase de inscripción y difusión, lo que impulsó una serie de ajustes que permitieron que se quintuplicara el número de personas en situación de discapacidad que rendirán la PSU este año.
“Les preguntamos si tenían alguna situación de discapacidad y más de tres mil personas dijeron que sí. Luego presentaron solicitud de ajuste un poco más de 700 estudiantes, lo que se aprobó en 452 casos. A parte del número, la otra novedad es que los ajustes que hemos otorgado son muchísimo más sofisticados que lo que teníamos antes, estamos muy bien asesorados por un equipo experto y multidisciplinario”, indicó.
Este lunes 27 de noviembre de rendirá la prueba de Lenguaje y Comunicación en la mañana y la Ciencias en la tarde, mientras que el martes los estudiantes realizarán las prueba de Matemáticas en la mañana y la Historia, Geografía y Ciencias Sociales en la tarde.
Los puntajes se conocerán el martes 26 de diciembre, mismo día en que comenzarán las postulaciones a las universidades, proceso que se llevará a cabo hasta el sábado 30 de diciembre. Finalmente, los resultados de selección serán publicados el 18 de enero a las 23 horas.
La necesidad de nuevos mecanismos de ingreso
Ante las críticas que ha recibido la PSU por tratarse de una medición estandarizada que define el ingreso a la educación superior, desde DEMRE indicaron que tienen la intención de desarrollar nuevas pruebas, pero que para llevarlas a cabo se requiere un tiempo prudente de varios años.
Para Leonor Varas, “la PSU es una prueba que mide en un momento de la vida ciertas cosas, por lo tanto no puede ser un número tan importante que signifique una medida global de un ser humano”.
Carlos Henríquez, secretario ejecutivo de la Agencia de Calidad de la Educación, comentó que vale la pena tener mecanismos de ingreso más amplios, no solo una prueba masiva.
“Hay una agenda que, al parecer, está liderando la Universidad de Chile, pero creo que el Consejo de Rectores (CRUCh) tiene un tremendo desafío en cómo ir mejorando los instrumentos de selección, para que tengan una mirada más amplia”, sostuvo.
A su juicio, ningún instrumento podrá hacerse cargo de la inequidad del país. Sin embargo, una medida que podría compensar esta situación son los cupos de equidad que entregan algunas universidades. “El punto central es cómo la reforma educacional en marcha y los esfuerzos que se harán en los próximos años nos permitirán entregar el apoyo necesario para que los que menos tienen tengan mayores posibilidades de desarrollar sus potencialidades”.
Mario Sobarzo, académico de la Universidad de Santiago y director del Magister de Filosofía Política de dicha casa de estudio, explicó que la PSU radicalizó las diferencias entre los puntajes respecto de la Prueba de Actitud Académica (PAA).
En esa línea, dijo que es cada vez más grande la brecha que se genera en términos socioeconómicos. “Lo que muestra la PSU es que puede servir para que las universidades seleccionen, pero que no necesariamente implica que los mejores estudiantes van a tener buenos resultados en ellas, por lo tanto hay que ampliar las posibilidades de selección”.
“Por supuesto que se han generado, pero desgraciadamente son iniciativas que tienen carácter aislado, que no están necesariamente coordinadas a nivel de todas las universidades o al nivel del sistema de educación en general. Lo peor o más complejo de todo esto es que estas iniciativas no implican un cambio del sistema de selección”, expresó.
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