Esta es la cuarta vez que ambas partes no logran llegar a acuerdo, y según señaló el abogado de las victimas, Juan Pablo Hermosilla, se debe a que la institución eclesiástica se niega a admitir encubrimiento.
“¡Basta de mentiras y delincuentes!”, denunció una de las víctimas, Juan Carlos Cruz, frente a la acción judicial.
En tanto, a través de redes sociales, las víctimas del ex sacerdote, manifestaron su descontento.
Las complicaciones de salud del Arzobispo de Malta obligaron al enviado del Papa Francisco a ser internado en la clínica de la Universidad Católica y delegar sus funciones en el sacerdote español Jordi Bertomeu.
A raíz de la carta enviada al Papa Francisco en 2015 en que Juan Carlos Cruz denuncia a Karadima, por los abusos y a Barros como encubridor de los mismos, el líder de los laicos de Osorno, Juan Carlos Claret cuestionó la verdadera independencia que tendrá la investigación en contra del Obispo de Osorno tomando en cuenta la postura del Sumo Pontífice, quien hasta ahora jamás hizo nada.
Uno de los querellantes contra la Iglesia Católica por su encubrimiento del ex párroco de El Bosque, Fernando Karadima, criticó la decisión del tribunal que desechó la denuncia que exigía una indemnización y disculpas públicas del clero local.
Con esta acción el magistrado descartó la indemnización a las víctimas Juan Carlos Cruz, José Andrés Murillo y James George Hamilton.
“Yo creo que aquí todas las personas que han estado implicadas en el caso deben declarar, la justicia civil tiene que conocer todos los antecedentes y Ezzati conocía del caso del año 2005”, indicó Murillo.
Los correos electrónicos intercambiados entre el arzobispo de Santiago y su antecesor, el cardenal Francisco Javier Errázuriz, siguen generando críticas y malestar en distintos sectores de la sociedad. Sin embargo, Ezzati insiste en el robo de correspondencia privada y en la intención de generar confusión y descrédito.
