La impaciencia y la curiosidad empiezan a levantarse en torno al contenido del proyecto que exime a Codelco de entregar el 10 por ciento a las Fuerzas Armadas, pues aún se mantiene en secreto y retenido en la Secretaría General de la Presidencia. Se espera que la próxima semana se termine el misterio y comience su discusión.
A pesar de que la Presidenta Michelle Bachelet firmó este martes el proyecto que deroga la ley reservada del cobre, el texto aún no ingresa a trámite en el Congreso, ya que no se ha dado cuenta de la iniciativa en la sala de la Cámara de Diputados.
De acuerdo a la diputada socialista Isabel Allende, quien consultó por el retraso, el proyecto está estancado en las oficinas de la Secretaría General de la Presidencia porque aún falta un informe financiero que debe presentarse para que ingrese a trámite y comience a ser debatido en comisión, pero señaló que su discusión debería empezar la próxima semana.
La diputada prefirió destacar que el envío de este proyecto por parte del Ejecutivo “es histórico y ya es un hecho, lo importante además es que el país maduró porque esto no era posible hace 18 años atrás porque las Fuerzas Armadas se hubieran opuesto, hoy todo el país lo entiende”.
En tanto, el diputado de Renovación Nacional Alberto Cardemil, criticó que los contenidos del proyecto permanezcan en secreto, sobre todo después que se realizara una ceremonia especialmente para destacar la firma e ingreso del texto.
“Me parece una curiosidad porque la Presidenta firma, van todos los comandantes en jefe, se hace una gran declaración y todavía no aparece la ley. Hay bastante debate de lo que contiene la ley, pero estamos hablando de una ley virtual, que no existe, esta es una ley hasta ahora misteriosa, más reservada que la otra, nosotros estamos abiertos a cambiar el sistema, pero por un sistema seguro”, ironizó Cardemil.
El proyecto marca un hito en su artículo número cuatro, que establece la derogación de la ley nº 13.196, más conocida como Ley Reservada del Cobre, que destina el 10 por ciento de las ventas de Codelco a financiar en tres tercios a las Fuerzas Armadas.
A cambio, el proyecto, entre otras cosas, establece que el desarrollo de la Defensa Nacional será planificado por el Ministerio del ramo, para períodos de doce años y será actualizada y aprobada cada cuatro años por el Presidente de la República mediante decreto supremo. Para esto, cada rama de las Fuerzas Armadas elaborará presupuestos considerando un horizonte de cuatro años.
En cuanto a la fiscalización, corresponderá a la Contraloría General de la República en materia de inversiones, lo que se realizará en forma reservada, al igual que los informes de control, que serán remitidos al Ejecutivo y a las Comisiones de Defensa del Senado y la Cámara.
La impaciencia y la curiosidad empiezan a levantarse en torno al contenido del proyecto que exime a Codelco de entregar el 10 por ciento a las Fuerzas Armadas, pues aún se mantiene en secreto y retenido en la Secretaría General de la Presidencia. Se espera que la próxima semana se termine el misterio y comience su discusión.
A pesar de que la Presidenta Michelle Bachelet firmó este martes el proyecto que deroga la ley reservada del cobre, el texto aún no ingresa a trámite en el Congreso, ya que no se ha dado cuenta de la iniciativa en la sala de la Cámara de Diputados.
De acuerdo a la diputada socialista Isabel Allende, quien consultó por el retraso, el proyecto está estancado en las oficinas de la Secretaría General de la Presidencia porque aún falta un informe financiero que debe presentarse para que ingrese a trámite y comience a ser debatido en comisión, pero señaló que su discusión debería empezar la próxima semana.
La diputada prefirió destacar que el envío de este proyecto por parte del Ejecutivo “es histórico y ya es un hecho, lo importante además es que el país maduró porque esto no era posible hace 18 años atrás porque las Fuerzas Armadas se hubieran opuesto, hoy todo el país lo entiende”.
En tanto, el diputado de Renovación Nacional Alberto Cardemil, criticó que los contenidos del proyecto permanezcan en secreto, sobre todo después que se realizara una ceremonia especialmente para destacar la firma e ingreso del texto.
“Me parece una curiosidad porque la Presidenta firma, van todos los comandantes en jefe, se hace una gran declaración y todavía no aparece la ley. Hay bastante debate de lo que contiene la ley, pero estamos hablando de una ley virtual, que no existe, esta es una ley hasta ahora misteriosa, más reservada que la otra, nosotros estamos abiertos a cambiar el sistema, pero por un sistema seguro”, ironizó Cardemil.
El proyecto marca un hito en su artículo número cuatro, que establece la derogación de la ley nº 13.196, más conocida como Ley Reservada del Cobre, que destina el 10 por ciento de las ventas de Codelco a financiar en tres tercios a las Fuerzas Armadas.
A cambio, el proyecto, entre otras cosas, establece que el desarrollo de la Defensa Nacional será planificado por el Ministerio del ramo, para períodos de doce años y será actualizada y aprobada cada cuatro años por el Presidente de la República mediante decreto supremo. Para esto, cada rama de las Fuerzas Armadas elaborará presupuestos considerando un horizonte de cuatro años.
En cuanto a la fiscalización, corresponderá a la Contraloría General de la República en materia de inversiones, lo que se realizará en forma reservada, al igual que los informes de control, que serán remitidos al Ejecutivo y a las Comisiones de Defensa del Senado y la Cámara.
La impaciencia y la curiosidad empiezan a levantarse en torno al contenido del proyecto que exime a Codelco de entregar el 10 por ciento a las Fuerzas Armadas, pues aún se mantiene en secreto y retenido en la Secretaría General de la Presidencia. Se espera que la próxima semana se termine el misterio y comience su discusión.
A pesar de que la Presidenta Michelle Bachelet firmó este martes el proyecto que deroga la ley reservada del cobre, el texto aún no ingresa a trámite en el Congreso, ya que no se ha dado cuenta de la iniciativa en la sala de la Cámara de Diputados.
De acuerdo a la diputada socialista Isabel Allende, quien consultó por el retraso, el proyecto está estancado en las oficinas de la Secretaría General de la Presidencia porque aún falta un informe financiero que debe presentarse para que ingrese a trámite y comience a ser debatido en comisión, pero señaló que su discusión debería empezar la próxima semana.
La diputada prefirió destacar que el envío de este proyecto por parte del Ejecutivo “es histórico y ya es un hecho, lo importante además es que el país maduró porque esto no era posible hace 18 años atrás porque las Fuerzas Armadas se hubieran opuesto, hoy todo el país lo entiende”.
En tanto, el diputado de Renovación Nacional Alberto Cardemil, criticó que los contenidos del proyecto permanezcan en secreto, sobre todo después que se realizara una ceremonia especialmente para destacar la firma e ingreso del texto.
“Me parece una curiosidad porque la Presidenta firma, van todos los comandantes en jefe, se hace una gran declaración y todavía no aparece la ley. Hay bastante debate de lo que contiene la ley, pero estamos hablando de una ley virtual, que no existe, esta es una ley hasta ahora misteriosa, más reservada que la otra, nosotros estamos abiertos a cambiar el sistema, pero por un sistema seguro”, ironizó Cardemil.
El proyecto marca un hito en su artículo número cuatro, que establece la derogación de la ley nº 13.196, más conocida como Ley Reservada del Cobre, que destina el 10 por ciento de las ventas de Codelco a financiar en tres tercios a las Fuerzas Armadas.
A cambio, el proyecto, entre otras cosas, establece que el desarrollo de la Defensa Nacional será planificado por el Ministerio del ramo, para períodos de doce años y será actualizada y aprobada cada cuatro años por el Presidente de la República mediante decreto supremo. Para esto, cada rama de las Fuerzas Armadas elaborará presupuestos considerando un horizonte de cuatro años.
En cuanto a la fiscalización, corresponderá a la Contraloría General de la República en materia de inversiones, lo que se realizará en forma reservada, al igual que los informes de control, que serán remitidos al Ejecutivo y a las Comisiones de Defensa del Senado y la Cámara.
