El respeto escasea entre los candidatos presidenciales. Así lo indica la encuesta "Respeto y campaña política: ¿Qué opina la gente?" realizada por la Corporación Genera, en la que el 77 por ciento de los entrevistados cree que, por sobre cualquier otra cosa, los aspirantes a La Moneda están ocupados en atacar a sus rivales con descalificaciones personales.
Sólo una nota de 2,9 en promedio obtuvieron los candidatos presidenciales al momento de evaluar el respeto entre ellos. El 29 por ciento de los encuestados le puso nota 1 a los aspirantes a La Moneda en este ámbito, y sólo el 1 por ciento calificó con un 7 el trato entre los presidenciables.
En tanto, tan sólo el 10 por ciento percibe que están preocupados de incentivar el crecimiento económico y el 6% que están abocados a lograr que Chile sea un país más igualitario.
Una peor evaluación, de 2,6 promedio obtuvieron respecto al respeto por los espacios públicos. Las tres mayores faltas de respeto de los políticos son el rayado de murallas con propaganda electoral, las promesas no cumplidas de los candidatos y la invasión de publicidad en la calle y alumbrado público.
La encuesta se llevó a cabo entre el 8 y el 25 de agosto a 500 personas de comunas urbanas y rurales de la Región Metropolitana a través de entrevistas presenciales. El margen de error fue estimado en alrededor de 4,4 por ciento.
El respeto escasea entre los candidatos presidenciales. Así lo indica la encuesta "Respeto y campaña política: ¿Qué opina la gente?" realizada por la Corporación Genera, en la que el 77 por ciento de los entrevistados cree que, por sobre cualquier otra cosa, los aspirantes a La Moneda están ocupados en atacar a sus rivales con descalificaciones personales.
Sólo una nota de 2,9 en promedio obtuvieron los candidatos presidenciales al momento de evaluar el respeto entre ellos. El 29 por ciento de los encuestados le puso nota 1 a los aspirantes a La Moneda en este ámbito, y sólo el 1 por ciento calificó con un 7 el trato entre los presidenciables.
En tanto, tan sólo el 10 por ciento percibe que están preocupados de incentivar el crecimiento económico y el 6% que están abocados a lograr que Chile sea un país más igualitario.
Una peor evaluación, de 2,6 promedio obtuvieron respecto al respeto por los espacios públicos. Las tres mayores faltas de respeto de los políticos son el rayado de murallas con propaganda electoral, las promesas no cumplidas de los candidatos y la invasión de publicidad en la calle y alumbrado público.
La encuesta se llevó a cabo entre el 8 y el 25 de agosto a 500 personas de comunas urbanas y rurales de la Región Metropolitana a través de entrevistas presenciales. El margen de error fue estimado en alrededor de 4,4 por ciento.
El respeto escasea entre los candidatos presidenciales. Así lo indica la encuesta "Respeto y campaña política: ¿Qué opina la gente?" realizada por la Corporación Genera, en la que el 77 por ciento de los entrevistados cree que, por sobre cualquier otra cosa, los aspirantes a La Moneda están ocupados en atacar a sus rivales con descalificaciones personales.
Sólo una nota de 2,9 en promedio obtuvieron los candidatos presidenciales al momento de evaluar el respeto entre ellos. El 29 por ciento de los encuestados le puso nota 1 a los aspirantes a La Moneda en este ámbito, y sólo el 1 por ciento calificó con un 7 el trato entre los presidenciables.
En tanto, tan sólo el 10 por ciento percibe que están preocupados de incentivar el crecimiento económico y el 6% que están abocados a lograr que Chile sea un país más igualitario.
Una peor evaluación, de 2,6 promedio obtuvieron respecto al respeto por los espacios públicos. Las tres mayores faltas de respeto de los políticos son el rayado de murallas con propaganda electoral, las promesas no cumplidas de los candidatos y la invasión de publicidad en la calle y alumbrado público.
La encuesta se llevó a cabo entre el 8 y el 25 de agosto a 500 personas de comunas urbanas y rurales de la Región Metropolitana a través de entrevistas presenciales. El margen de error fue estimado en alrededor de 4,4 por ciento.
