Elecciones Fech: La lucha por recobrar la relevancia social

Es innegable. La Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile no es lo que era hace un par de décadas y menos aún en sus inicios hace ya un siglo. Pero el complejo panorama que enfrenta la educación superior pública en Chile obligó a que las listas postulantes se volcaran a la reconcepción del rol de la organización como actor relevante en la vida social del país. 


Es innegable. La Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile no es lo que era hace un par de décadas y menos aún en sus inicios hace ya un siglo. Pero el complejo panorama que enfrenta la educación superior pública en Chile obligó a que las listas postulantes se volcaran a la reconcepción del rol de la organización como actor relevante en la vida social del país. 

Ya es octubre y todos los rincones de las facultades de la Universidad de Chile están tapizados de afiches, carteles y pendones con los rostros y consignas de quienes aspiran a liderar una de las federaciones de estudiantes más antiguas del continente.

Y es que este año la carrera por llegar a la mítica Fech promete estar cruzada por el complejo panorama que vive la educación superior pública en el país y la exigencia de una mayor incidencia de la organización en la vida nacional.

Una de las novedades de este periodo fue la ampliación  del número de listas en competencia, entre las que se incluyen dos de centroderecha, sector que, hasta hace un par de años, no tenía representación organizada en el espectro político de la casa de estudios.

Pese a las diferencias y matices en los planes de trabajo, los candidatos de las diversas listas anticipan que la discusión se centrará en la manera de revitalizar la alicaída presencia de la federación en la vida universitaria y reposicionarse como actor relevante dentro de la realidad social de Chile.

Importancia que históricamente se traducía en el protagonismo de la Fech en los grandes procesos sociales que ha experimentado el país, como el derrocamiento de Carlos Ibañez del Campo en 1931 y la lucha por el término de la dictadura. Pero además, los liderazgos que surgían allí tenían y continúan teniendo un trampolín directo hacia las grandes ligas de la política nacional.

Mayor participación de las Izquierdas

Hacia ese horizonte apuntan las listas de izquierda que postulan este año, que buscan a como de lugar, retomar la preponderancia de la Fech en los denominados, temas país.

Francisco Figueroa, representante de la Izquierda Autónoma, señaló que “la Fech debe tener mayor utilidad y sentido para los estudiantes, para la resolución de sus problemas concretos dentro de la universidad, pero también para retomar su relevancia política para Chile. La imagen de los jóvenes no puede seguir siendo Yingo. Hay muchos que en la actualidad son excluidos de las decisiones más relevantes del país y en ese sentido, la Fech tiene mucho que hacer”.

En la misma línea, Bárbara Brito de la lista C: “Estudiantes junto a los trabajadores” indicó que “la federación ha perdido  influencia en el debate nacional. El movimiento estudiantil tiene que alzar las banderas de educación gratuita para todos y enfrentar a la derecha que es la que ha ido privatizándola, elitisándola y precarizándola”.

Julio Sarmiento de los estudiantes de Izquierda se unió a estas críticas y afirmó que esperan “tener una entidad relevante a nivel nacional que pueda influir en las políticas públicas, en la agenda legislativa del gobierno y llevar la voz estudiantil a los temas que nos preocupan y  afectan. No queremos hacer ese aporte solamente al egresar, sino que creemos que como estudiantes se pueden hacer muchas cosas si utilizamos la herramienta que tenemos que es la Federación”.

En este sentido, Ignacio Piñeiro de la Lista D “Renovemos nuestra universidad” dijo que “queremos ser un canal de comunicación que genere discusión efectiva y que sirva para dar soluciones a todos los problemas de nuestro país en la educación y más allá de nuestros problemas de universidad. El tema de los secundarios, el de la calidad de la educación, deuda histórica de los profesores. Hemos tenido muy poca relevancia este año, queremos plantearnos para ser una vía comunicante  entre todos los estamentos y también proponer soluciones como estudiantes y como personas que vamos a forjar el futuro de nuestro país".

Sin embargo, una de las listas que más se involucró con este cometido fue la U Social, desde donde se desarrolló un proyecto de Planificación Nacional de Educación Superior que incluye los ámbitos financiero, que plantea una reforma trinutaria; de información estratégica y de proyecto país. “Desde nuestra posición de universidad pública queremos involucrarnos directamente con la necesidad profesional del país y enfrentar la crisis que se está dando por la mercantilización de la educación”, expresó Lorena Trujillo.

La derecha de la U

Una de las sorpresas de esta contienda fue la presencia de dos listas de centroderecha que representan un movimiento que, en los últimos años, ha movido capas y adquirido adeptos dentro de las paredes de la universidad.

Diego Poblete de la lista A “Centroderecha universitaria” reconoce que esta necesidad de aunar criterios nace de una disconformidad con la manera en que se han llevado a cabo las políticas universitarias y afirma que “no es que no haya gente de derecha en la ‘U’, sino que no ha existido la capacidad o disposición de los dirigentes de este sector de juntarse y crear un proyecto juntos”.

Por su parte, la agrupación “La Chile para todos”, que se autodefine como un movimiento gremial, se hace parte de este nuevo espectro político universitario y se la juega por propuestas más pragmáticas como la asignación de becas de alimentación, movilización y fotocopias otorgadas por la misma federación a los alumnos.

Según Verónica Pulgar, representante de esta lista, la idea es hacer que la Fech vuelva a los estudiantes y que la utilicen como un medio para resolver los problemas que surgen en cada una de las facultades.

¿La federación de los estudiantes?

Pero en medio de la algarabía de los procesos eleccionarios existen algunas críticas que apuntan hacia el verdadero rol de la Fech como representación real de los estudiantes.

“En mi facultad la Fech no tiene mucho peso, o por lo menos no existe mayor interés entre los estudiantes en informarse sobre las actividades. Esta falta de ganas por informarse, según mi percepción, se puede deber a que no existe interés, o a que las a autoridades de mi facultad tratan de bajarle al máximo el perfil a todos de estos asuntos. Como muestra de ello tenemos que cuando se ha votado para adherirse a algún paro, las autoridades no han respetado esta votación, y las clases se mantienen con carácter obligatorio y para estas elecciones se mandó a sacar toda la propaganda electoral, siendo que todos los afiches estaban puestos en lugares destinados para ello”, comenta María José Garrido de tercer año de Ingeniería Comercial.

Para Patricio Castillo, estudiante de cuarto año de Derecho, el asumido rol social de la universidad se ha desvirtuado. “ Todo lo que se propone se hace desde la U hacia afuera, pero qué hace por nosotros.  Se supone que la excelencia debería ir en aumento pero, por ejemplo, que en nuestra facultado no podamos revisar las pruebas, que no haya recorreccion, que no haya un tiempo máximo de entrega de notas, que de ciertos libros haya una sola copia en la biblioteca, la captura de profesores por universidades privadas que les exigen exclusividad, me imagino que son todos problemas que se podrían resolver a nivel de federación”.

Y pese a que las demandas locales en algunas ocasiones superan las buenas intenciones, los candidatos son enfáticos al recalcar que un cambio en la concepción de la educación pública y del rol de la universidad al interior de la sociedad es esencial para superar los problemas que vive la educación superior en la actualidad.   

Revise el listado completo de candidatos aquí





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