La segunda jornada del conflicto por el no pago de la deuda histórica de los profesores comenzó con las partes más irreconciliables que nunca.
El fin de semana se conoció que la Asociación Chilena de Municipalidades evalúa contratar profesores para reemplazo mientras dure el paro indefinido del magisterio que comenzó el viernes pasado.
La medida responde al hecho que se retrasara la prueba Simce en dos semanas, los riesgos que corren tanto la aplicación de la PSU como la finalización del año escolar y la falta de ingresos por subvenciones y alimentación para los alumnos, que superarían los 4 millones de dólares.
Por eso, los alcaldes prefirieron tomar iniciativas y endurecer su posición ante el Magisterio, como lo dejó en claro Pablo Zalaquett, alcalde de Santiago y presidente de la comisión de educación de la Asociación Chilena de municipalidades.
“Desde el punto de vista académico, para mi el año está perdido porque muchos jóvenes van a dar un Simce y una PSU sin haber pasado toda la materia y en una absoluta desventaja. Se descontarán todos los días no trabajados y veremos si tomaremos medidas más drásticas. Vamos a buscar reemplazos durante esta semana porque este paro indefinido no puede seguir”, sentenció el edil de Santiago.
La medida será evaluada al interior del organismo que agrupa a los alcaldes y, aunque es una iniciativa de presión fuerte sobre la movilización, es posible que tenga eco entre los representantes de las demás comunas del país.
Ante esta situación, el presidente del Magisterio, Jaime Gajardo indicó que este tipo de medidas atentan contra el legítimo derecho a huelga de los trabajadores y calificó que esta idea además como inviable.
“Vemos con preocupación que Claudio Arriagada y otra gente estén promoviendo iniciativas de reemplazo que lo único que buscan es dividir a nuestro movimiento. Es imposible encontrar 80 mil profesores para reemplazar. Lo único que buscan este tipo de práctica es atemorizar cuando aquí lo que hay que hacer es dialogar”, afirmó el dirigente.
Por su parte, en el gobierno habló a través de un inserto de prensa que no mejora en mucho las posibilidades de diálogo.
Bajo el título “un paro injustificado”, el Ministerio de Educación argumentó que “no existen obligaciones económicas incumplidas con los profesores”, señalando, casi irónicamente, un llamado al entendimiento y a retomar el diálogo.
En el magisterio, Gajardo confirmó que desde mañana sostendrán nuevas reuniones con las distintas bancadas de diputados en el Congreso Nacional, para potenciar el frente parlamentario, el único donde han tenido algo de respaldo.
La demanda de los profesores se mantiene en exigir un proyecto de reparación, que sea ingresado con discusión inmediata, lo que depende de La Moneda, ya que cualquier texto que involucre gasto fiscal es de iniciativa exclusiva del Ejecutivo.
La segunda jornada del conflicto por el no pago de la deuda histórica de los profesores comenzó con las partes más irreconciliables que nunca.
El fin de semana se conoció que la Asociación Chilena de Municipalidades evalúa contratar profesores para reemplazo mientras dure el paro indefinido del magisterio que comenzó el viernes pasado.
La medida responde al hecho que se retrasara la prueba Simce en dos semanas, los riesgos que corren tanto la aplicación de la PSU como la finalización del año escolar y la falta de ingresos por subvenciones y alimentación para los alumnos, que superarían los 4 millones de dólares.
Por eso, los alcaldes prefirieron tomar iniciativas y endurecer su posición ante el Magisterio, como lo dejó en claro Pablo Zalaquett, alcalde de Santiago y presidente de la comisión de educación de la Asociación Chilena de municipalidades.
“Desde el punto de vista académico, para mi el año está perdido porque muchos jóvenes van a dar un Simce y una PSU sin haber pasado toda la materia y en una absoluta desventaja. Se descontarán todos los días no trabajados y veremos si tomaremos medidas más drásticas. Vamos a buscar reemplazos durante esta semana porque este paro indefinido no puede seguir”, sentenció el edil de Santiago.
La medida será evaluada al interior del organismo que agrupa a los alcaldes y, aunque es una iniciativa de presión fuerte sobre la movilización, es posible que tenga eco entre los representantes de las demás comunas del país.
Ante esta situación, el presidente del Magisterio, Jaime Gajardo indicó que este tipo de medidas atentan contra el legítimo derecho a huelga de los trabajadores y calificó que esta idea además como inviable.
“Vemos con preocupación que Claudio Arriagada y otra gente estén promoviendo iniciativas de reemplazo que lo único que buscan es dividir a nuestro movimiento. Es imposible encontrar 80 mil profesores para reemplazar. Lo único que buscan este tipo de práctica es atemorizar cuando aquí lo que hay que hacer es dialogar”, afirmó el dirigente.
Por su parte, en el gobierno habló a través de un inserto de prensa que no mejora en mucho las posibilidades de diálogo.
Bajo el título “un paro injustificado”, el Ministerio de Educación argumentó que “no existen obligaciones económicas incumplidas con los profesores”, señalando, casi irónicamente, un llamado al entendimiento y a retomar el diálogo.
En el magisterio, Gajardo confirmó que desde mañana sostendrán nuevas reuniones con las distintas bancadas de diputados en el Congreso Nacional, para potenciar el frente parlamentario, el único donde han tenido algo de respaldo.
La demanda de los profesores se mantiene en exigir un proyecto de reparación, que sea ingresado con discusión inmediata, lo que depende de La Moneda, ya que cualquier texto que involucre gasto fiscal es de iniciativa exclusiva del Ejecutivo.
La segunda jornada del conflicto por el no pago de la deuda histórica de los profesores comenzó con las partes más irreconciliables que nunca.
El fin de semana se conoció que la Asociación Chilena de Municipalidades evalúa contratar profesores para reemplazo mientras dure el paro indefinido del magisterio que comenzó el viernes pasado.
La medida responde al hecho que se retrasara la prueba Simce en dos semanas, los riesgos que corren tanto la aplicación de la PSU como la finalización del año escolar y la falta de ingresos por subvenciones y alimentación para los alumnos, que superarían los 4 millones de dólares.
Por eso, los alcaldes prefirieron tomar iniciativas y endurecer su posición ante el Magisterio, como lo dejó en claro Pablo Zalaquett, alcalde de Santiago y presidente de la comisión de educación de la Asociación Chilena de municipalidades.
“Desde el punto de vista académico, para mi el año está perdido porque muchos jóvenes van a dar un Simce y una PSU sin haber pasado toda la materia y en una absoluta desventaja. Se descontarán todos los días no trabajados y veremos si tomaremos medidas más drásticas. Vamos a buscar reemplazos durante esta semana porque este paro indefinido no puede seguir”, sentenció el edil de Santiago.
La medida será evaluada al interior del organismo que agrupa a los alcaldes y, aunque es una iniciativa de presión fuerte sobre la movilización, es posible que tenga eco entre los representantes de las demás comunas del país.
Ante esta situación, el presidente del Magisterio, Jaime Gajardo indicó que este tipo de medidas atentan contra el legítimo derecho a huelga de los trabajadores y calificó que esta idea además como inviable.
“Vemos con preocupación que Claudio Arriagada y otra gente estén promoviendo iniciativas de reemplazo que lo único que buscan es dividir a nuestro movimiento. Es imposible encontrar 80 mil profesores para reemplazar. Lo único que buscan este tipo de práctica es atemorizar cuando aquí lo que hay que hacer es dialogar”, afirmó el dirigente.
Por su parte, en el gobierno habló a través de un inserto de prensa que no mejora en mucho las posibilidades de diálogo.
Bajo el título “un paro injustificado”, el Ministerio de Educación argumentó que “no existen obligaciones económicas incumplidas con los profesores”, señalando, casi irónicamente, un llamado al entendimiento y a retomar el diálogo.
En el magisterio, Gajardo confirmó que desde mañana sostendrán nuevas reuniones con las distintas bancadas de diputados en el Congreso Nacional, para potenciar el frente parlamentario, el único donde han tenido algo de respaldo.
La demanda de los profesores se mantiene en exigir un proyecto de reparación, que sea ingresado con discusión inmediata, lo que depende de La Moneda, ya que cualquier texto que involucre gasto fiscal es de iniciativa exclusiva del Ejecutivo.
