El ministro del Exterior de nuestro país, Mariano Fernández desmintió tajantemente que el gobierno estuviera involucrado en el caso de un integrante de las fuerzas armadas peruanas que espiaría para Chile. Asimismo, acusó a Perú de mala educación y provocación por cómo ha enfrentado el caso.
El gobierno chileno criticó la actitud del Presidente del Perú, Alan García, de retirarse del encuentro del Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC), que se llevaba a cabo en Singapur, como una forma de expresar su malestar por el caso de presunto espionaje que habría realizado para Chile un integrante de la Fuerza Aérea de ese país.
El canciller, Mariano Fernández, afirmó que si bien se entiende la situación generada en el Perú por estas acusaciones, la actitud mostrada por el representante de esa nación en el país asiático es incluso provocativa.
“No confundan firmeza con las provocaciones y con la mala educación. Nosotros tenemos una posición bastante clara y sólida en todas estas cosas. Lo que sucede es que no andamos haciendo alarde ni vamos a practicar el matonaje verbal, ni vamos a utilizar un lenguaje destemplado. Ese es otro problema, problema del Perú. Nosotros no lo practicamos. Y que no confundan la firmeza con el lenguaje destemplado, con la provocación. Seamos enfáticos y claros, Chile no practica el espionaje y no aceptamos imputaciones de este tipo de nadie”, recalcó Fernández.
El jefe de la diplomacia recalcó que descarta la participación del gobierno chileno en cualquier cosa que sea ilegal en la relación entre ambos países, mientras calificó como un derecho del gobierno de García de llamar a consulta a su embajador, Carlos Pareja, además de suspender el encuentro entre la ministra de Producción, Mercedes Aráoz, con la Presidenta, Michelle Bachelet, el miércoles en La Moneda.
Por su parte, el canciller peruano, José Antonio García Belaúnde, reiteró la veracidad de la existencia del espía de la Fuerza Aérea de su país, el que está sometido al proceso correspondiente por parte del tribunal.
“Es una situación difícil. Una conducta así es una conducta muy ofensiva para un país, que le planten un espía. Lo que hay es un espía y hay plata que ha recibido y está demostrado. Ahora quién ha dado la orden, quién ha estado pagando eso, no lo sabemos, pero que hay un espía, no lo hemos inventado nosotros”, afirmó el canciller peruano.
Belaúnde junto con recordar un caso anterior de espionaje de Chile a su país en 1978, recalcó que el caso provocó la indignación del Presidente García, quien controla personalmente la crisis provocada por este hecho conocido la semana recién pasada.
En Santiago, quien se refirió a este caso fue el candidato presidencial de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, quien afirmó que se debe entregar todo el respaldo al gobierno frente a esta tensión.
“Chile está viviendo momentos problemas difíciles en nuestras relaciones con nuestro vecinos del norte, Perú y Bolivia. Creo que para enfrentar con éxito esta situación, requerimos mucha unidad. Nosotros vamos a apoyar a nuestro gobierno. Mucha firmeza, en defender lo que nos pertenece, mucha prudencia, porque Chile es un país amante de la paz, y por sobretodo, una mirada de futuro, una mirada constructiva”, recalcó Piñera.
En Perú los principales medios de comunicación siguen con especial interés este caso, donde el acusado, el ex suboficial de la FAP Víctor Ariza Mendoza, aparece confeso del espionaje para Chile y podría hacer frente a una condena que va de los 35 años de presidio hasta incluso pena de muerte.
El ministro del Exterior de nuestro país, Mariano Fernández desmintió tajantemente que el gobierno estuviera involucrado en el caso de un integrante de las fuerzas armadas peruanas que espiaría para Chile. Asimismo, acusó a Perú de mala educación y provocación por cómo ha enfrentado el caso.
El gobierno chileno criticó la actitud del Presidente del Perú, Alan García, de retirarse del encuentro del Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC), que se llevaba a cabo en Singapur, como una forma de expresar su malestar por el caso de presunto espionaje que habría realizado para Chile un integrante de la Fuerza Aérea de ese país.
El canciller, Mariano Fernández, afirmó que si bien se entiende la situación generada en el Perú por estas acusaciones, la actitud mostrada por el representante de esa nación en el país asiático es incluso provocativa.
“No confundan firmeza con las provocaciones y con la mala educación. Nosotros tenemos una posición bastante clara y sólida en todas estas cosas. Lo que sucede es que no andamos haciendo alarde ni vamos a practicar el matonaje verbal, ni vamos a utilizar un lenguaje destemplado. Ese es otro problema, problema del Perú. Nosotros no lo practicamos. Y que no confundan la firmeza con el lenguaje destemplado, con la provocación. Seamos enfáticos y claros, Chile no practica el espionaje y no aceptamos imputaciones de este tipo de nadie”, recalcó Fernández.
El jefe de la diplomacia recalcó que descarta la participación del gobierno chileno en cualquier cosa que sea ilegal en la relación entre ambos países, mientras calificó como un derecho del gobierno de García de llamar a consulta a su embajador, Carlos Pareja, además de suspender el encuentro entre la ministra de Producción, Mercedes Aráoz, con la Presidenta, Michelle Bachelet, el miércoles en La Moneda.
Por su parte, el canciller peruano, José Antonio García Belaúnde, reiteró la veracidad de la existencia del espía de la Fuerza Aérea de su país, el que está sometido al proceso correspondiente por parte del tribunal.
“Es una situación difícil. Una conducta así es una conducta muy ofensiva para un país, que le planten un espía. Lo que hay es un espía y hay plata que ha recibido y está demostrado. Ahora quién ha dado la orden, quién ha estado pagando eso, no lo sabemos, pero que hay un espía, no lo hemos inventado nosotros”, afirmó el canciller peruano.
Belaúnde junto con recordar un caso anterior de espionaje de Chile a su país en 1978, recalcó que el caso provocó la indignación del Presidente García, quien controla personalmente la crisis provocada por este hecho conocido la semana recién pasada.
En Santiago, quien se refirió a este caso fue el candidato presidencial de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, quien afirmó que se debe entregar todo el respaldo al gobierno frente a esta tensión.
“Chile está viviendo momentos problemas difíciles en nuestras relaciones con nuestro vecinos del norte, Perú y Bolivia. Creo que para enfrentar con éxito esta situación, requerimos mucha unidad. Nosotros vamos a apoyar a nuestro gobierno. Mucha firmeza, en defender lo que nos pertenece, mucha prudencia, porque Chile es un país amante de la paz, y por sobretodo, una mirada de futuro, una mirada constructiva”, recalcó Piñera.
En Perú los principales medios de comunicación siguen con especial interés este caso, donde el acusado, el ex suboficial de la FAP Víctor Ariza Mendoza, aparece confeso del espionaje para Chile y podría hacer frente a una condena que va de los 35 años de presidio hasta incluso pena de muerte.
El ministro del Exterior de nuestro país, Mariano Fernández desmintió tajantemente que el gobierno estuviera involucrado en el caso de un integrante de las fuerzas armadas peruanas que espiaría para Chile. Asimismo, acusó a Perú de mala educación y provocación por cómo ha enfrentado el caso.
El gobierno chileno criticó la actitud del Presidente del Perú, Alan García, de retirarse del encuentro del Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC), que se llevaba a cabo en Singapur, como una forma de expresar su malestar por el caso de presunto espionaje que habría realizado para Chile un integrante de la Fuerza Aérea de ese país.
El canciller, Mariano Fernández, afirmó que si bien se entiende la situación generada en el Perú por estas acusaciones, la actitud mostrada por el representante de esa nación en el país asiático es incluso provocativa.
“No confundan firmeza con las provocaciones y con la mala educación. Nosotros tenemos una posición bastante clara y sólida en todas estas cosas. Lo que sucede es que no andamos haciendo alarde ni vamos a practicar el matonaje verbal, ni vamos a utilizar un lenguaje destemplado. Ese es otro problema, problema del Perú. Nosotros no lo practicamos. Y que no confundan la firmeza con el lenguaje destemplado, con la provocación. Seamos enfáticos y claros, Chile no practica el espionaje y no aceptamos imputaciones de este tipo de nadie”, recalcó Fernández.
El jefe de la diplomacia recalcó que descarta la participación del gobierno chileno en cualquier cosa que sea ilegal en la relación entre ambos países, mientras calificó como un derecho del gobierno de García de llamar a consulta a su embajador, Carlos Pareja, además de suspender el encuentro entre la ministra de Producción, Mercedes Aráoz, con la Presidenta, Michelle Bachelet, el miércoles en La Moneda.
Por su parte, el canciller peruano, José Antonio García Belaúnde, reiteró la veracidad de la existencia del espía de la Fuerza Aérea de su país, el que está sometido al proceso correspondiente por parte del tribunal.
“Es una situación difícil. Una conducta así es una conducta muy ofensiva para un país, que le planten un espía. Lo que hay es un espía y hay plata que ha recibido y está demostrado. Ahora quién ha dado la orden, quién ha estado pagando eso, no lo sabemos, pero que hay un espía, no lo hemos inventado nosotros”, afirmó el canciller peruano.
Belaúnde junto con recordar un caso anterior de espionaje de Chile a su país en 1978, recalcó que el caso provocó la indignación del Presidente García, quien controla personalmente la crisis provocada por este hecho conocido la semana recién pasada.
En Santiago, quien se refirió a este caso fue el candidato presidencial de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, quien afirmó que se debe entregar todo el respaldo al gobierno frente a esta tensión.
“Chile está viviendo momentos problemas difíciles en nuestras relaciones con nuestro vecinos del norte, Perú y Bolivia. Creo que para enfrentar con éxito esta situación, requerimos mucha unidad. Nosotros vamos a apoyar a nuestro gobierno. Mucha firmeza, en defender lo que nos pertenece, mucha prudencia, porque Chile es un país amante de la paz, y por sobretodo, una mirada de futuro, una mirada constructiva”, recalcó Piñera.
En Perú los principales medios de comunicación siguen con especial interés este caso, donde el acusado, el ex suboficial de la FAP Víctor Ariza Mendoza, aparece confeso del espionaje para Chile y podría hacer frente a una condena que va de los 35 años de presidio hasta incluso pena de muerte.
