Por cuarta sesión consecutiva el dólar operó a la baja en el mercado. Durante la jornada del miércoles la divisa rompió la barrera de los 490 pesos, ubicándose en su menor precio desde inicios de junio de 2008.
Al término de la jornada el tipo de cambio bajó 0,9 a 492,8 pesos comprador y 493,2 vendedor en el mercado chileno.
En este contexto, el precio al contado del cobre subió un 2,44 por ciento en la bolsa de Metales de Londres, su mayor nivel desde septiembre del 2008. De acuerdo a los expertos, este sería uno de los factores que explicaría el descenso del dólar y la apreciación del peso chileno.
La moneda extranjera comenzó a caer después de conocer la cifra de crecimiento del Producto Interno Bruto chileno, que se contrajo un 1,6 por ciento en el tercer trimestre. No obstante, la serie de datos entregados por el Banco Central hablan de una mejora en el consumo y la demanda interna.
En este incierto escenario, los exportadores esperan que el Banco Central pueda intervenir para restar fuerza al peso, si continúa con el sostenido avance que ha registrado en las últimas semanas.
Sin embargo, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Rafael Guilisasti, afirmó que la intervención cambiaria no es único camino para mitigar este problema.
“Estamos preocupados y estamos pensando distintos mecanismos, pero no se trata de creer que clamar por intervención es la única solución. Tengo plena confianza en las autoridades del Banco Central, y si ellos estiman esa medida pertinente la van a aplicar”, dijo Guilisasti.
Respecto de los instrumentos que podría aplicar la autoridad en esta materia, el economista Tomás Flores, sostuvo que la opción más adecuada sería que el ministerio de Hacienda deje de liquidar dólares en el mercado para financiar el plan de estímulo fiscal. Sin embargo, el experto dijo que a estas alturas no se puede descartar una intervención del Central.
“Yo no creo que se pueda descartar porque el Banco Central ha sido pecador en estas materias. En abril del año pasado salió a comprar dólares cuando el tipo de cambio llegó a los 430 pesos, por tanto, mirando el pasado el mercado tiene ciertas expectativas de que teniendo un cierto valor, el organismo emisor tendría que salir a adquirir divisas otra vez. Lamentablemente, esa decisión sentó un precedente que ahora puede costar bastante caro”, afirmó el experto.
En el sector privado han señalado que la incesante caída del tipo de cambio podría afectar la dinámica de recuperación de la economía y el empleo. Ante esto, el subsecretario del Trabajo, Mauricio Jélvez, se mostró confiado en que el consejo del instituto emisor aplicará las medidas respectivas del caso.
“Espero que actuemos con el debido pragmatismo y oportunidad para resolver esta situación para poder seguir protegiendo el empleo porque, desde el punto de vista de la tarea del Banco Central, la preocupación no debe estar solamente en la inflación, sino que también, como ocurre en el mundo desarrollado, el foco debe estar en el empleo y en el crecimiento económico”, señaló la autoridad.
Las negociaciones electrónicas en el mercado cambiario local subieron ayer a mil 94 millones de dólares, desde los US$963 millones negociados en la jornada anterior.
Por cuarta sesión consecutiva el dólar operó a la baja en el mercado. Durante la jornada del miércoles la divisa rompió la barrera de los 490 pesos, ubicándose en su menor precio desde inicios de junio de 2008.
Al término de la jornada el tipo de cambio bajó 0,9 a 492,8 pesos comprador y 493,2 vendedor en el mercado chileno.
En este contexto, el precio al contado del cobre subió un 2,44 por ciento en la bolsa de Metales de Londres, su mayor nivel desde septiembre del 2008. De acuerdo a los expertos, este sería uno de los factores que explicaría el descenso del dólar y la apreciación del peso chileno.
La moneda extranjera comenzó a caer después de conocer la cifra de crecimiento del Producto Interno Bruto chileno, que se contrajo un 1,6 por ciento en el tercer trimestre. No obstante, la serie de datos entregados por el Banco Central hablan de una mejora en el consumo y la demanda interna.
En este incierto escenario, los exportadores esperan que el Banco Central pueda intervenir para restar fuerza al peso, si continúa con el sostenido avance que ha registrado en las últimas semanas.
Sin embargo, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Rafael Guilisasti, afirmó que la intervención cambiaria no es único camino para mitigar este problema.
“Estamos preocupados y estamos pensando distintos mecanismos, pero no se trata de creer que clamar por intervención es la única solución. Tengo plena confianza en las autoridades del Banco Central, y si ellos estiman esa medida pertinente la van a aplicar”, dijo Guilisasti.
Respecto de los instrumentos que podría aplicar la autoridad en esta materia, el economista Tomás Flores, sostuvo que la opción más adecuada sería que el ministerio de Hacienda deje de liquidar dólares en el mercado para financiar el plan de estímulo fiscal. Sin embargo, el experto dijo que a estas alturas no se puede descartar una intervención del Central.
“Yo no creo que se pueda descartar porque el Banco Central ha sido pecador en estas materias. En abril del año pasado salió a comprar dólares cuando el tipo de cambio llegó a los 430 pesos, por tanto, mirando el pasado el mercado tiene ciertas expectativas de que teniendo un cierto valor, el organismo emisor tendría que salir a adquirir divisas otra vez. Lamentablemente, esa decisión sentó un precedente que ahora puede costar bastante caro”, afirmó el experto.
En el sector privado han señalado que la incesante caída del tipo de cambio podría afectar la dinámica de recuperación de la economía y el empleo. Ante esto, el subsecretario del Trabajo, Mauricio Jélvez, se mostró confiado en que el consejo del instituto emisor aplicará las medidas respectivas del caso.
“Espero que actuemos con el debido pragmatismo y oportunidad para resolver esta situación para poder seguir protegiendo el empleo porque, desde el punto de vista de la tarea del Banco Central, la preocupación no debe estar solamente en la inflación, sino que también, como ocurre en el mundo desarrollado, el foco debe estar en el empleo y en el crecimiento económico”, señaló la autoridad.
Las negociaciones electrónicas en el mercado cambiario local subieron ayer a mil 94 millones de dólares, desde los US$963 millones negociados en la jornada anterior.
Por cuarta sesión consecutiva el dólar operó a la baja en el mercado. Durante la jornada del miércoles la divisa rompió la barrera de los 490 pesos, ubicándose en su menor precio desde inicios de junio de 2008.
Al término de la jornada el tipo de cambio bajó 0,9 a 492,8 pesos comprador y 493,2 vendedor en el mercado chileno.
En este contexto, el precio al contado del cobre subió un 2,44 por ciento en la bolsa de Metales de Londres, su mayor nivel desde septiembre del 2008. De acuerdo a los expertos, este sería uno de los factores que explicaría el descenso del dólar y la apreciación del peso chileno.
La moneda extranjera comenzó a caer después de conocer la cifra de crecimiento del Producto Interno Bruto chileno, que se contrajo un 1,6 por ciento en el tercer trimestre. No obstante, la serie de datos entregados por el Banco Central hablan de una mejora en el consumo y la demanda interna.
En este incierto escenario, los exportadores esperan que el Banco Central pueda intervenir para restar fuerza al peso, si continúa con el sostenido avance que ha registrado en las últimas semanas.
Sin embargo, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Rafael Guilisasti, afirmó que la intervención cambiaria no es único camino para mitigar este problema.
“Estamos preocupados y estamos pensando distintos mecanismos, pero no se trata de creer que clamar por intervención es la única solución. Tengo plena confianza en las autoridades del Banco Central, y si ellos estiman esa medida pertinente la van a aplicar”, dijo Guilisasti.
Respecto de los instrumentos que podría aplicar la autoridad en esta materia, el economista Tomás Flores, sostuvo que la opción más adecuada sería que el ministerio de Hacienda deje de liquidar dólares en el mercado para financiar el plan de estímulo fiscal. Sin embargo, el experto dijo que a estas alturas no se puede descartar una intervención del Central.
“Yo no creo que se pueda descartar porque el Banco Central ha sido pecador en estas materias. En abril del año pasado salió a comprar dólares cuando el tipo de cambio llegó a los 430 pesos, por tanto, mirando el pasado el mercado tiene ciertas expectativas de que teniendo un cierto valor, el organismo emisor tendría que salir a adquirir divisas otra vez. Lamentablemente, esa decisión sentó un precedente que ahora puede costar bastante caro”, afirmó el experto.
En el sector privado han señalado que la incesante caída del tipo de cambio podría afectar la dinámica de recuperación de la economía y el empleo. Ante esto, el subsecretario del Trabajo, Mauricio Jélvez, se mostró confiado en que el consejo del instituto emisor aplicará las medidas respectivas del caso.
“Espero que actuemos con el debido pragmatismo y oportunidad para resolver esta situación para poder seguir protegiendo el empleo porque, desde el punto de vista de la tarea del Banco Central, la preocupación no debe estar solamente en la inflación, sino que también, como ocurre en el mundo desarrollado, el foco debe estar en el empleo y en el crecimiento económico”, señaló la autoridad.
Las negociaciones electrónicas en el mercado cambiario local subieron ayer a mil 94 millones de dólares, desde los US$963 millones negociados en la jornada anterior.
