La presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, dijo que el Instituto promulgado hoy por la Presidenta Bachelet no cuenta con la independencia necesaria. En cambio, la Mandataria aseveró que la entidad podrá actuar sin condicionamientos externos.
Un organismo independiente, capaz de coordinar todo el entramado jurídico asumido por Chile en los últimos años, incluyendo la ratificación de la Corte Penal Internacional, es el objetivo que persigue el Instituto Nacional de Derechos Humanos que fue promulgado esta mañana por la Presidenta Michelle Bachelet.
La Mandataria manifestó que este es un primer paso, el que no dudó de calificar como histórico, para una institucionalidad que se constituye en una sociedad que aún busca el reencuentro y curar las heridas provocadas por las violaciones a estos derechos.
"El Instituto de Derechos Humanos basará su acción en los principios de independencia, pluralismo, autonomía, estabilidad y con un mandato amplio para su promoción y protección conforme a las directrices que recomiendan los estándares internacionales. Será un organismo independiente de cualquier otra autoridad del Estado para que pueda cumplir con eficacia y libertad su rol tutelar y vigilante con la autonomía suficiente en materia de organización, financiamiento y control que le permita actuar sin condicionamientos externos", destacó la Presidenta.
A la satisfacción por la entrada en vigencia del Instituto de Derechos Humanos se sumaron desde la Fundación de Ayuda Social de las Iglesias Cristianas, organismo que cuenta con la mayoría de los abogados que trabajaron bajo la dictadura en la Vicaría de la Solidaridad.
El presidente de este organismo, Claudio González, sostuvo que la importancia de esta promulgación radica en la creación del organismo que vendrá a observar de manera global la protección de los derechos humanos.
"No siempre las cosas son perfectas cuando parten, pero no por eso podemos rechazarlas, nos parece que se debe tener una mirada un poco más comprometida estrictamente con los derechos humanos, con una visión de futuro en el buen sentido, esto no es olvidar el pasado ni mucho menos, pero ir componiendo y perfeccionando las instituciones con el paso del tiempo", indicó González.
El ministro del Interior, Edmundo Pérez, afirmó tajante que el nuevo Instituto de Derechos Humanos no tiene capacidad de presentar querellas ante los tribunales por delitos de lesa humanidad.
Lo cierto es que el Parlamento aprobó un veto aditivo hace sólo un par de semanas para entregarle esta facultad. Sin embargo, esto se presentó sólo cuando las Naciones Unidas criticó al gobierno que la nueva institucionalidad no pudiera ser parte de querellas en los tribunales de justicia, aunque a pesar que ahora cuenta con esta potestad, todavía no es suficiente para la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
"No cumple con todos los reparos que hizo la ONU a esta iniciativa legislativa, y el veto aditivo no cumple con todos los reparos que nosotros teníamos. Un veto aditivo que considera que todavía seguimos teniendo un Instituto de Derechos Humanos que no se fundamenta en los principios de París, referidos a la normativa establecida por los países que adhieren y que crean estas instituciones de protección a los derechos humanos y que demandan ciertas condiciones, entre ellas, la autonomía absoluta que no tiene este instituto", enfatizó la dirigenta de DD.HH.
Además, sostuvo Pizarro, que no se va a perseguir la tortura como un delito terrorista, es decir “pareciera que no es delito”, comentó la dirigenta de los familiares de detenidos desaparecidos, quien junto a los representantes de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos se restaron de la ceremonia de promulgación en La Moneda por no estar de acuerdo con este nuevo instituto creado por el gobierno de Michelle Bachelet.