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Once días en huelga de hambre cumplieron tres comerciantes discapacitados en la Plaza de Armas, frente a la puerta principal de la Municipalidad de Santiago.
Hace varios meses que están solicitando al gobierno comunal los permisos necesarios para trabajar como vendedores ambulantes en las principales calles de la comuna, aprovechando que el fin de año es una de las mejores épocas de venta.
Armando Villar, representante de los vendedores ambulantes de la comuna, que agrupa a 37 personas, afirma no han recibido ninguna explicación por parte del alcalde Zalaquett, por lo que algunos de ellos decidieron comenzar con esta manifestación.
“No nos quiere otorgar los permisos para trabajar ni siquiera para el mes de diciembre. Hemos hecho todas las gestiones que se han podido, pero no hay respuesta. Realizamos distintos métodos de presión como tomarnos la municipalidad y el fondo de discapacidad, pero no ha pasado nada. Nos acabamos de enterar que el alcalde se ha negado rotundamente ante los concejales a entregar todo tipo de permiso”, comentó Villar.
Los manifestantes han buscado la ayuda del Fondo Nacional de la Discapacidad (Fonadis) de la Iglesia Católica a través del Arzobispado de Santiago y de algunos concejales, pero no han llegado a acuerdos con las autoridades.
Nelly Granado es una de las comerciantes afectadas. Es no vidente, tiene hijos pequeños y necesita de una fuente de ingresos adicional a la pensión de discapacidad que recibe del Estado para sus necesidades más básicas.
“Es tanta la preocupación de que no podamos trabajar tranquilos porque nos pueden decomisar las cosas, nos pueden dejar sin nada, que no nos queda otra alternativa más que presionar de esta manera”, aseveró la afectada.
Con el pasar de los días, el estado de salud de los cuatro huelguistas ha empeorado, poniendo en peligro su integridad física. Sin embargo, esta es la única forma válida que ven para que el municipio cambie de opinión respecto de sus casos.
Así lo manifestó otro de los comerciantes que está en huelga de hambre, Eduardo Seymour, quien indicó que están “desesperados por esta situación. Tenemos que buscar la manera de poder trabajar tranquilos. En este momento estamos analizando algunos puntos para poder seguir la lucha porque tenemos que tener una fuente de ingresos tal como cualquier persona”.
Todos coinciden en que el alcalde Pablo Zalaquett no ha dado razones para negar los permisos. En conversación con Universidad de Chile Noticias, el edil aseguró que la decisión es intransable y que está avalada por informes policiales que recomiendan terminar con el comercio informal.
“Estamos saturados de comercio ambulante en Santiago y no estamos dando más permisos porque, lamentablemente, se ha comprobado que estas actividades generan un espacio propicio para la delincuencia, algunos de ellos están entrelazados con los criminales y hay muchos reclamos de la gente que vive, transita y trabaja en la comuna y mi deber es protegerlos”, aseguró Zalaquett.
Según indicó el jefe comunal, se han ofrecido otros tipos de ayuda como la creación de capital semilla para crear negocios o lograr el establecimiento definitivo en algún galpón para efectuar sus ventas, pero, según él, los comerciantes se han negado a ello.
Pese a ello, para estos cuatro huelguistas, el comercio ambulante es su única forma de vida y no están dispuestos a renunciar a ella.
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Armando Villar, representante de los vendedores ambulantes de la comuna, que agrupa a 37 personas, afirma no han recibido ninguna explicación por parte del alcalde Zalaquett, por lo que algunos de ellos decidieron comenzar con esta manifestación.
“No nos quiere otorgar los permisos para trabajar ni siquiera para el mes de diciembre. Hemos hecho todas las gestiones que se han podido, pero no hay respuesta. Realizamos distintos métodos de presión como tomarnos la municipalidad y el fondo de discapacidad, pero no ha pasado nada. Nos acabamos de enterar que el alcalde se ha negado rotundamente ante los concejales a entregar todo tipo de permiso”, comentó Villar.
Los manifestantes han buscado la ayuda del Fondo Nacional de la Discapacidad (Fonadis) de la Iglesia Católica a través del Arzobispado de Santiago y de algunos concejales, pero no han llegado a acuerdos con las autoridades.
Nelly Granado es una de las comerciantes afectadas. Es no vidente, tiene hijos pequeños y necesita de una fuente de ingresos adicional a la pensión de discapacidad que recibe del Estado para sus necesidades más básicas.
“Es tanta la preocupación de que no podamos trabajar tranquilos porque nos pueden decomisar las cosas, nos pueden dejar sin nada, que no nos queda otra alternativa más que presionar de esta manera”, aseveró la afectada.
Con el pasar de los días, el estado de salud de los cuatro huelguistas ha empeorado, poniendo en peligro su integridad física. Sin embargo, esta es la única forma válida que ven para que el municipio cambie de opinión respecto de sus casos.
Así lo manifestó otro de los comerciantes que está en huelga de hambre, Eduardo Seymour, quien indicó que están “desesperados por esta situación. Tenemos que buscar la manera de poder trabajar tranquilos. En este momento estamos analizando algunos puntos para poder seguir la lucha porque tenemos que tener una fuente de ingresos tal como cualquier persona”.
Todos coinciden en que el alcalde Pablo Zalaquett no ha dado razones para negar los permisos. En conversación con Universidad de Chile Noticias, el edil aseguró que la decisión es intransable y que está avalada por informes policiales que recomiendan terminar con el comercio informal.
“Estamos saturados de comercio ambulante en Santiago y no estamos dando más permisos porque, lamentablemente, se ha comprobado que estas actividades generan un espacio propicio para la delincuencia, algunos de ellos están entrelazados con los criminales y hay muchos reclamos de la gente que vive, transita y trabaja en la comuna y mi deber es protegerlos”, aseguró Zalaquett.
Según indicó el jefe comunal, se han ofrecido otros tipos de ayuda como la creación de capital semilla para crear negocios o lograr el establecimiento definitivo en algún galpón para efectuar sus ventas, pero, según él, los comerciantes se han negado a ello.
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Armando Villar, representante de los vendedores ambulantes de la comuna, que agrupa a 37 personas, afirma no han recibido ninguna explicación por parte del alcalde Zalaquett, por lo que algunos de ellos decidieron comenzar con esta manifestación.
“No nos quiere otorgar los permisos para trabajar ni siquiera para el mes de diciembre. Hemos hecho todas las gestiones que se han podido, pero no hay respuesta. Realizamos distintos métodos de presión como tomarnos la municipalidad y el fondo de discapacidad, pero no ha pasado nada. Nos acabamos de enterar que el alcalde se ha negado rotundamente ante los concejales a entregar todo tipo de permiso”, comentó Villar.
Los manifestantes han buscado la ayuda del Fondo Nacional de la Discapacidad (Fonadis) de la Iglesia Católica a través del Arzobispado de Santiago y de algunos concejales, pero no han llegado a acuerdos con las autoridades.
Nelly Granado es una de las comerciantes afectadas. Es no vidente, tiene hijos pequeños y necesita de una fuente de ingresos adicional a la pensión de discapacidad que recibe del Estado para sus necesidades más básicas.
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“Estamos saturados de comercio ambulante en Santiago y no estamos dando más permisos porque, lamentablemente, se ha comprobado que estas actividades generan un espacio propicio para la delincuencia, algunos de ellos están entrelazados con los criminales y hay muchos reclamos de la gente que vive, transita y trabaja en la comuna y mi deber es protegerlos”, aseguró Zalaquett.
Según indicó el jefe comunal, se han ofrecido otros tipos de ayuda como la creación de capital semilla para crear negocios o lograr el establecimiento definitivo en algún galpón para efectuar sus ventas, pero, según él, los comerciantes se han negado a ello.
Pese a ello, para estos cuatro huelguistas, el comercio ambulante es su única forma de vida y no están dispuestos a renunciar a ella.
