Diario y Radio Universidad Chile

Año XVI, 25 de abril de 2024


Escritorio

Marco Enríquez Ominami: El díscolo que se salió con la suya

El joven candidato presidencial nacido en 1973, hijo biológico de Miguel Enríquez, promete refrescar la política chilena tomando como ideas fuerza las de libertad y pluralismo, la diversidad y dejando atrás las negociaciones de las cúpulas partidarias. Además según la última encuesta del CEP en una segunda vuelta sólo estaría a tres puntos de Sebastián Piñera. 

Francisco Mardones

  Domingo 13 de diciembre 2009 9:13 hrs. 
Radio-Uchile

Compartir en

El joven candidato presidencial nacido en 1973, hijo biológico de Miguel Enríquez, promete refrescar la política chilena tomando como ideas fuerza las de libertad y pluralismo, la diversidad y dejando atrás las negociaciones de las cúpulas partidarias. Además según la última encuesta del CEP en una segunda vuelta sólo estaría a tres puntos de Sebastián Piñera. 

Fiel a su estilo crítico y confrontacional, Marco Antonio Enríquez-Ominami Gumucio, diputado por el distrito 10 en la región de Valparaíso, se ganó el rechazo de varios sectores políticos sobre la base de desacuerdos y constantes cuestionamientos a sus pares fueran o no sus camaradas.

"Este niño no es de la Concertación", indicó el diputado demócrata cristiano, Jorge Burgos, reflejando el sentir de muchos miembros que vieron con extrañeza cómo en enero pasado el diputado díscolo, porfiado y ácido apostaba por disputar elecciones primarias en la Concertación para ser su abanderado presidencial.

"Creemos que las primarias son un hecho esencial de la democracia y que no hay ninguna posibilidad de que la proclamación de uno, dos o tres partidos no permita construir una voz transformadora suficiente para ganarle a la derecha", enfatizó Enríquez Ominami.

Pocos lo escucharon en el Partido Socialista y en la Concertación así que el 12 de junio, decidió marcharse en medio de una polémica, que dura hasta hoy, con el presidente del PS Camilo Escalona, aduciendo que las cúpulas partidistas sólo quieren perpetuarse en el poder.

"Queridos compatriotas, hoy renuncio a mi militancia en el Partido Socialista, se trata de un acto doloroso, pero necesario que responde a la decisión de las cúpulas dirigentes de la Concertación y del PS de ahogar la competencia y el debate de ideas al interior de la coalición”, precisó Enríquez Ominami.

Respecto de este asunto, el presidente de la colectividad, Camilo Escalona, señaló que era un hecho publicitario y reconoció que tenían imperfecciones, que cometían errores, pero afirmó que nunca se presentaban como lo que no son.     

De ahí en adelante sólo descalificaciones para “Marquito”, como despectivamente lo comenzaron a llamar sus ex correligionarios en cuanto debate aparecían.

Poco a poco comenzó a reclutar adeptos los más cercanos: el ex MIR Max Marambio, el diputado Álvaro Escobar y –aunque con cierto escepticismo- su padre adoptivo el senador ex PS, Carlos Ominami.

Debía reunir 36 mil firmas para inscribir su candidatura independiente a la presidencia y juntó más de 70 mil. Así, acompañado de su familia y sus colaboradores cercanos se matriculó como candidato a lo grande y con palabras que acarrearon polémica.

"Sigue el cambio, sigue el cambio de Bachelet, aquí sigue el cambio y aquí está el progresismo. Un beso y un abrazo, muchas gracias”, dijo el candidato independiente.  

Sumó a Humanistas, Ecologistas, Progresistas, Regionalistas, minorías sexuales y al MAS de Alejandro Navarro. De la mano de su equipo comenzó a ganar terreno su nombre, su imagen de joven rebelde, sus críticas a la Concertación, sus inteligentes emplazamientos a Sebastián Piñera y la imagen de su esposa, la animadora de TVN Karen Doggenweiler potenciaron su figura y comenzó a sumar puntos en las principales encuestas.

"La dinámica está claramente del lado de esta campaña y me parece que hay tiempo suficiente para poder estar en segunda vuelta y generar una opción creíble para derrotar a la derecha en el balotaje", señaló el senador y padre del candidato.

Carlos Ominami comentaba así los 17 puntos que su hijo marcaba en la encuesta CEP de agosto, superando los 13 marcados en junio. Pese a las altas expectativas, el último sondeo que sin ser “un oráculo” no le dio el piso necesario para asegurar el segundo lugar en la primera vuelta, con apenas 19 puntos, aunque sí reveló que es mejor competidor que Frei en el balotaje.

“La encuesta confirmó lo que hoy es innegable, lo que ya nueve encuestas anteriores han mostrado y que el único capaz de ganarle al ultraconservador soy yo", precisó el candidato independiente.

Enemigo de Hidroaysén y partidario de aplicar un royalty al uso de recursos naturales,  impulsor de un régimen político unicameral, con un primer ministro a cargo de los temas país y con elección universal de intendentes regionales, proclive a privatizar el 5 por ciento de CODELCO para aumentar su competitividad, a fortalecer los sindicatos y a devolver la educación pública al Estado, Marco Enríquez Ominami basa todas sus propuestas en una controvertida reforma tributaria que pretende bajar el impuesto a las personas y subirlo a las grandes empresas, al tabaco y al alcohol.

Si el independiente supera la primera valla, el gran desafío que tendrá será el de demostrar que tiene capacidad y un equipo con quien gobernar el país.

"Hemos dicho que no le pediremos certificado de militancia a nadie, siempre y cuando esté de acuerdo con esto. Cualquier hombre o mujer que quiera trabajar por una Constitución Política más democrática será bienvenido en mi gobierno", indicó Enríquez Ominami  

Pese a esto, tiene claro que no negociará  con los líderes de los partidos de la Concertación ni como candidato de segunda vuelta ni como espectador de un balotaje.

"Quiero decirle a los presidentes de los partidos de la Concertación que no se equivoquen, nadie de mi equipo negociará con ustedes, porque encarnan lo que nosotros no queremos para Chile", subrayó Marco Enríquez Ominami.  

En estas elecciones quedará sellado el futuro político de un díscolo que será clave en la conformación política del Chile de los próximos años. De su figura dependerá el futuro de la Concertación y de una nueva oposición.

Síguenos en