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Escritorio

Estable dentro de su gravedad se encuentra el padre Pierre Dubois

Sebastián Silva

  Lunes 21 de diciembre 2009 10:22 hrs. 
Radio-Uchile

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Sin ventilación mecánica e ingiriendo alimentos por sí solo se encuentra el sacerdote Pierre Dubois, aquejado por un cuadro de septicemia producto de una infección urinaria, por el que este viernes fue trasladado al hospital clínico de la Universidad Católica.

El religioso se encuentra consciente y se mantiene estable dentro de su condición de gravedad, según el último parte médico entregado.

Dubois, de 78 años, continúa recibiendo tratamiento antibiótico para controlar la infección y está en permanente monitoreo, así lo afirmó el doctor Jaime Retamal de la unidad de pacientes críticos de este centro asistencial.

“Por la gravedad de su patología tuvo algunas disfunciones orgánicas las cuales han sido recuperadas de una manera progresiva, pero lenta. En este momento se encuentra extubado, fuera de ventilación mecánica, sin requerimiento de drogas vaso activas”, informó Retamal.

Durante el fin de semana, el sacerdote recibió el apoyo de amigos y diferentes personalidades,  entre ellas, el subsecretario general de gobierno, Neftalí Carabantes quien le envió un mensaje especial de la Presidenta Michelle Bachelet.

“Le señalé que estaba aquí por instrucciones de la Presidenta, quien lo quiere muchísimos, lo valora en su inmensidad, en su obra y el quedó muy agradecido. En un gesto inmediato, con mucha humildad señaló que no era merecedor de este saludo, que él se ha hecho conocido gracias al padre Jarlan. Yo le dije que no era así, que él tiene una obra enorme, eso grafica en parte su humildad, su grandeza, él es un hombre capital, por eso lo estamos acompañado y esperamos su pronta recuperación”, señaló Carabantes.

El sacerdote, junto al misionero francés André Jarlan, tuvo un activo rol contra la Dictadura en la población La Victoria.  Fue párroco de la iglesia Nuestra Señora de La Victoria desde 1983 hasta 1986, cuando fue exiliado.

De hecho, fue el mismo Dubois quien encontró muerto a su compañero y amigo André Jarlan por un impacto de bala en dicha población, mientras leía la Biblia, el 4 de septiembre de 1984.

El sacerdote además hizo trabajo pastoral entre los pobres, situación que durante la dictadura le costó varias detenciones.
 

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