El incendio del domingo que afectó al Cerro Mariposa de Valparaíso, dejó un saldo de 17 viviendas destruidas y 18 familias damnificadas, en una de las primeras instancias en las que el fuego alcanzó partes habitadas.
Como medidas de respuesta, el ministerio del Interior dispondrá de fondos sociales, para que las familias afectadas puedan recuperar parte de sus enceres, como cocinas, mobiliario y camas.
De la misma manera, el ministerio de Vivienda y Urbanismo dispondrá de subsidios para las familias afectadas, que ascienden a 570 UF, sin ahorro previo.
Estas medidas buscan erradicar a los habitantes de este lugar, ya que las autoridades argumentan que es una zona de alta peligrosidad.
“Vamos a trabajar en un proyecto para que todas las familias salgan e allí porque es muy peligroso, no se puede urbanizar, en el invierno se aísla y que en el verano puede sufrir los siniestros que acaban de suceder”, insistió la secretaria de Estado.
Pero los vecinos no piensan lo mismo. La falta de pavimentación en ciertas zonas, la escasez de servicios de alcantarillado permanente y la dificultad de acceso debido a la topografía del sector son motivos para acusar necesidades desatendidas hasta esta emergencia.
Además, existe otro factor que empieza a jugar, como es la permanencia por años en una zona escarpada de Valparaíso. “Tuvo que pasar esto para que se preocuparan por nosotros. Estuvieron el primer día del siniestro hasta hoy que estamos conversando”, dijo Marina Robles, una de las pobladoras.
Otras personas manifiestan sus desconfianza con que se implementen a tiempo los subsidios prometidos.
“Llevo ocho años en esto y todavía no han hecho nada. Me tuve que cambiar y ahora estoy arrendando. Hablé con la ministra y dijo que ese no era tema de conversación”, indicó Julio Hurtado, habitante de la zona.
Con las discrepancias planteadas, se decidió conformar una mesa de trabajo entre funcionarios públicos y los vecinos, para determinar las mejores soluciones a los problemas que afectaron a las familias.
A pesar de que algunas personas ya hicieron efectivos los subsidios, igualmente queda planteada la interrogante sobre qué hubiese ocurrido con el Cerro Mariposa si esta tragedia no hubiese ocurrido.
El incendio del domingo que afectó al Cerro Mariposa de Valparaíso, dejó un saldo de 17 viviendas destruidas y 18 familias damnificadas, en una de las primeras instancias en las que el fuego alcanzó partes habitadas.
Como medidas de respuesta, el ministerio del Interior dispondrá de fondos sociales, para que las familias afectadas puedan recuperar parte de sus enceres, como cocinas, mobiliario y camas.
De la misma manera, el ministerio de Vivienda y Urbanismo dispondrá de subsidios para las familias afectadas, que ascienden a 570 UF, sin ahorro previo.
Estas medidas buscan erradicar a los habitantes de este lugar, ya que las autoridades argumentan que es una zona de alta peligrosidad.
“Vamos a trabajar en un proyecto para que todas las familias salgan e allí porque es muy peligroso, no se puede urbanizar, en el invierno se aísla y que en el verano puede sufrir los siniestros que acaban de suceder”, insistió la secretaria de Estado.
Pero los vecinos no piensan lo mismo. La falta de pavimentación en ciertas zonas, la escasez de servicios de alcantarillado permanente y la dificultad de acceso debido a la topografía del sector son motivos para acusar necesidades desatendidas hasta esta emergencia.
Además, existe otro factor que empieza a jugar, como es la permanencia por años en una zona escarpada de Valparaíso. “Tuvo que pasar esto para que se preocuparan por nosotros. Estuvieron el primer día del siniestro hasta hoy que estamos conversando”, dijo Marina Robles, una de las pobladoras.
Otras personas manifiestan sus desconfianza con que se implementen a tiempo los subsidios prometidos.
“Llevo ocho años en esto y todavía no han hecho nada. Me tuve que cambiar y ahora estoy arrendando. Hablé con la ministra y dijo que ese no era tema de conversación”, indicó Julio Hurtado, habitante de la zona.
Con las discrepancias planteadas, se decidió conformar una mesa de trabajo entre funcionarios públicos y los vecinos, para determinar las mejores soluciones a los problemas que afectaron a las familias.
A pesar de que algunas personas ya hicieron efectivos los subsidios, igualmente queda planteada la interrogante sobre qué hubiese ocurrido con el Cerro Mariposa si esta tragedia no hubiese ocurrido.
El incendio del domingo que afectó al Cerro Mariposa de Valparaíso, dejó un saldo de 17 viviendas destruidas y 18 familias damnificadas, en una de las primeras instancias en las que el fuego alcanzó partes habitadas.
Como medidas de respuesta, el ministerio del Interior dispondrá de fondos sociales, para que las familias afectadas puedan recuperar parte de sus enceres, como cocinas, mobiliario y camas.
De la misma manera, el ministerio de Vivienda y Urbanismo dispondrá de subsidios para las familias afectadas, que ascienden a 570 UF, sin ahorro previo.
Estas medidas buscan erradicar a los habitantes de este lugar, ya que las autoridades argumentan que es una zona de alta peligrosidad.
“Vamos a trabajar en un proyecto para que todas las familias salgan e allí porque es muy peligroso, no se puede urbanizar, en el invierno se aísla y que en el verano puede sufrir los siniestros que acaban de suceder”, insistió la secretaria de Estado.
Pero los vecinos no piensan lo mismo. La falta de pavimentación en ciertas zonas, la escasez de servicios de alcantarillado permanente y la dificultad de acceso debido a la topografía del sector son motivos para acusar necesidades desatendidas hasta esta emergencia.
Además, existe otro factor que empieza a jugar, como es la permanencia por años en una zona escarpada de Valparaíso. “Tuvo que pasar esto para que se preocuparan por nosotros. Estuvieron el primer día del siniestro hasta hoy que estamos conversando”, dijo Marina Robles, una de las pobladoras.
Otras personas manifiestan sus desconfianza con que se implementen a tiempo los subsidios prometidos.
“Llevo ocho años en esto y todavía no han hecho nada. Me tuve que cambiar y ahora estoy arrendando. Hablé con la ministra y dijo que ese no era tema de conversación”, indicó Julio Hurtado, habitante de la zona.
Con las discrepancias planteadas, se decidió conformar una mesa de trabajo entre funcionarios públicos y los vecinos, para determinar las mejores soluciones a los problemas que afectaron a las familias.
A pesar de que algunas personas ya hicieron efectivos los subsidios, igualmente queda planteada la interrogante sobre qué hubiese ocurrido con el Cerro Mariposa si esta tragedia no hubiese ocurrido.
