Para hoy quedó pendiente la discusión del proyecto de ley sobre información, orientación y prestaciones en materia de fertilidad que, entre otras cosas, consagra la entrega gratuita de la denominada, píldora del día después.
No hubo votos suficientes para dar el vamos al proyecto de ley sobre información, orientación y prestaciones en materia de fertilidad, que incluye la distribución gratuita de la denominada píldora del día después.
Los principales desacuerdos se produjeron en torno a las modificaciones insertadas por el Senado en el trámite anterior, que tienen que ver con la confidencialidad a la que debieran estar sometidos los menores de 14 años y con la prohibición de distribuir anticonceptivos cuya finalidad sea provocar un aborto.
En el caso de la privacidad de los menores, el texto legal plantea que “en aquellos casos en que el método anticonceptivo de emergencia sea solicitado por una persona menor de 14 años, el funcionario o facultativo que corresponda, en el sistema público o privado de salud, procederá a la entrega de dicho medicamento, debiendo informar posteriormente al padre o madre de la menor o al adulto responsable que ella señale”.
Sin embargo, el principal foco de conflicto tiene que ver con el segundo ámbito de discusión. El diputado del PPD, Marco Antonio Núñez, señaló que, bajo los términos actuales, la ley podría prestarse para cuestionar otros métodos de prevención del embarazo. Y es que una de los aspectos que impidió el despacho expedito de la iniciativa fue, precisamente, el intenso debate en torno a si el Levogenestrel es abortivo, condición que terminó desmintiéndose.
“La comunidad científica internacional ha dicho que no existe prueba alguna que podamos tomar en cuenta de que la píldora del día después sea abortiva. Existe la duda razonable y en función de estas dudas, el dispositivo intrauterino y el propio Levogenestrel, podrían ser declarados por alguna autoridad el día de mañana como métodos de regulación de la fertilidad que pueden provocar un aborto. Ahí está el problema”, afirmó el parlamentario.
Sin embargo, el ministro Secretario General de la Presidencia, José Antonio Viera Gallo, aseguró que esta disposición legal podrá garantizar el respaldo del uso de la píldora como anticonceptivo de emergencia, en el caso de que se presenten litigios judiciales en ese sentido.
“La indicación que ayuda al proyecto está diciendo explícitamente que el legislador considera que la píldora del día después no es abortiva. Los abogados pueden realizar todas las acciones legales que consideren oportunas, pero el fallo del tribunal será frente a una ley que ha sido aprobada en unanimidad en el senado”, indicó el secretario de Estado.
En la actualidad, el proyecto está en su tercer trámite constitucional en la Cámara Baja, luego de haber pasado por el Senado. Si se rechaza algún punto de la normativa en cuanto a las modificaciones hechas en su instancia anterior, se deberá conformar una comisión mixta para zanjar las diferencias, lo que retrasaría el despacho de la ley hasta fines de enero.