El Ballet Folklórico Nacional (Bafona), por primera vez en 45 años, comenzó un paro indefinido de actividades para exigir los mismos derechos del resto de los empleados públicos, porque son los únicos que no recibieron el bono por término de conflicto.
El Bafona depende del Consejo Nacional de Cultura y las Artes, y realiza periódicamente presentaciones a nivel nacional e internacional de las que el público no podrá disfrutar este verano, a menos que logren un acuerdo con la autoridad.
Se trata de setenta profesionales entre músicos, bailarines y técnicos en sonido e iluminación que participan de esta movilización