Patricio Rossende, subsecretario del Interior, reiteró que en su momento se tomarán todas las acciones que sean necesarias por El caso de las organizaciones ficticias que afecta al Instituto de Derechos Humanos.
“Como lo informamos, hemos consultado a la Contraloría esta situación extraña que se ha detectado y esperamos que se hagan las reclamaciones y las impugnaciones que correspondan, porque si efectivamente se confirma que ha habido una acción dolosa, destinada a alterar la representatividad de organizaciones de derechos humanos, habrá que tomar todas las acciones judiciales que corresponda contra quienes han intentado vulnerar la integridad de una institución que costó tanto como el Instituto de Derechos Humanos”, afirmó Rosende.
Por su parte un grupo de organizaciones respaldó la elección de Jorge Campos Mancilla y Anita Jacob.Este grupo representa a la Coordinadora de Agrupaciones de Derechos Humanos de Osorno que integran a la Agrupación de Derechos Humanos Salvador Allende, Agrupación Víctor Jara, Agrupación Cultural Licarayen, Agrupación Esperanza, Agrupación de Derechos Humanos Juan Bustos y Agrupación de Ex Menores Víctimas de Prisión Política y Tortura.
Estas organizaciones concluyeron que el Instituto de Derechos Humanos no debe ser presa de organismos corporativos, sino de la verdadera base social que constituye la lucha histórica por los derechos humanos y su promoción.
Patricio Rossende, subsecretario del Interior, reiteró que en su momento se tomarán todas las acciones que sean necesarias por El caso de las organizaciones ficticias que afecta al Instituto de Derechos Humanos.
“Como lo informamos, hemos consultado a la Contraloría esta situación extraña que se ha detectado y esperamos que se hagan las reclamaciones y las impugnaciones que correspondan, porque si efectivamente se confirma que ha habido una acción dolosa, destinada a alterar la representatividad de organizaciones de derechos humanos, habrá que tomar todas las acciones judiciales que corresponda contra quienes han intentado vulnerar la integridad de una institución que costó tanto como el Instituto de Derechos Humanos”, afirmó Rosende.
Por su parte un grupo de organizaciones respaldó la elección de Jorge Campos Mancilla y Anita Jacob.Este grupo representa a la Coordinadora de Agrupaciones de Derechos Humanos de Osorno que integran a la Agrupación de Derechos Humanos Salvador Allende, Agrupación Víctor Jara, Agrupación Cultural Licarayen, Agrupación Esperanza, Agrupación de Derechos Humanos Juan Bustos y Agrupación de Ex Menores Víctimas de Prisión Política y Tortura.
Estas organizaciones concluyeron que el Instituto de Derechos Humanos no debe ser presa de organismos corporativos, sino de la verdadera base social que constituye la lucha histórica por los derechos humanos y su promoción.
Patricio Rossende, subsecretario del Interior, reiteró que en su momento se tomarán todas las acciones que sean necesarias por El caso de las organizaciones ficticias que afecta al Instituto de Derechos Humanos.
“Como lo informamos, hemos consultado a la Contraloría esta situación extraña que se ha detectado y esperamos que se hagan las reclamaciones y las impugnaciones que correspondan, porque si efectivamente se confirma que ha habido una acción dolosa, destinada a alterar la representatividad de organizaciones de derechos humanos, habrá que tomar todas las acciones judiciales que corresponda contra quienes han intentado vulnerar la integridad de una institución que costó tanto como el Instituto de Derechos Humanos”, afirmó Rosende.
Por su parte un grupo de organizaciones respaldó la elección de Jorge Campos Mancilla y Anita Jacob.Este grupo representa a la Coordinadora de Agrupaciones de Derechos Humanos de Osorno que integran a la Agrupación de Derechos Humanos Salvador Allende, Agrupación Víctor Jara, Agrupación Cultural Licarayen, Agrupación Esperanza, Agrupación de Derechos Humanos Juan Bustos y Agrupación de Ex Menores Víctimas de Prisión Política y Tortura.
Estas organizaciones concluyeron que el Instituto de Derechos Humanos no debe ser presa de organismos corporativos, sino de la verdadera base social que constituye la lucha histórica por los derechos humanos y su promoción.
