El Tribunal Fiscal de la Nación Argentina, falló en contra de la sociedad Alto Paraná S.A, filial de la chilena Celulosa Arauco y Constitución, liderada por Roberto Angelini, obligándola a pagar 107 millones de dólares, debido a una serie de operaciones económicas realizadas en 2001.
Matías Domeyko, gerente general de Arauco, señaló que el tribunal rechazó las deducciones "efectuadas por la filial frente al impuesto a las ganancias de ciertos gastos, intereses y diferencias de cambio generados, por un endeudamiento contraído por la empresa".
El conflicto de Alto Paraná en Argentina data desde hace ocho años, cuando la empresa realizó una emisión de duda por 25 millones de dólares para inyectar capitales. Con parte de la deuda que se emitió se rescataron acciones, preferentes emitidas para la compra de la sociedad en 1996. En 2004, la Administración Federal de Ingresos Públicos, símil del Servicio de Impuestos Internos, cuestionó las operaciones, al no considerarlas deuda, y aplicó los impuestos correspondientes a la ganancia de capital.
El gerente de Asuntos Corporativos de la empresa, Adrián Lerer, afirmó la empresa rechaza por completo las acusaciones, por lo que reclamará el caso a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo, un tribunal de carácter judicial. "Nuestro argumento más fuerte es el principio contable de la universalidad del pasivo, que señala que no importa para qué se usó la deuda, todo es deuda, y es deducible según el impuesto a las ganancias", dijo.
Arauco tendráe 30 días hábiles para presentar sus descargos ante el tribunal, pero la firma lo haría antes de fines de febrero.
El Tribunal Fiscal de la Nación Argentina, falló en contra de la sociedad Alto Paraná S.A, filial de la chilena Celulosa Arauco y Constitución, liderada por Roberto Angelini, obligándola a pagar 107 millones de dólares, debido a una serie de operaciones económicas realizadas en 2001.
Matías Domeyko, gerente general de Arauco, señaló que el tribunal rechazó las deducciones "efectuadas por la filial frente al impuesto a las ganancias de ciertos gastos, intereses y diferencias de cambio generados, por un endeudamiento contraído por la empresa".
El conflicto de Alto Paraná en Argentina data desde hace ocho años, cuando la empresa realizó una emisión de duda por 25 millones de dólares para inyectar capitales. Con parte de la deuda que se emitió se rescataron acciones, preferentes emitidas para la compra de la sociedad en 1996. En 2004, la Administración Federal de Ingresos Públicos, símil del Servicio de Impuestos Internos, cuestionó las operaciones, al no considerarlas deuda, y aplicó los impuestos correspondientes a la ganancia de capital.
El gerente de Asuntos Corporativos de la empresa, Adrián Lerer, afirmó la empresa rechaza por completo las acusaciones, por lo que reclamará el caso a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo, un tribunal de carácter judicial. "Nuestro argumento más fuerte es el principio contable de la universalidad del pasivo, que señala que no importa para qué se usó la deuda, todo es deuda, y es deducible según el impuesto a las ganancias", dijo.
Arauco tendráe 30 días hábiles para presentar sus descargos ante el tribunal, pero la firma lo haría antes de fines de febrero.
El Tribunal Fiscal de la Nación Argentina, falló en contra de la sociedad Alto Paraná S.A, filial de la chilena Celulosa Arauco y Constitución, liderada por Roberto Angelini, obligándola a pagar 107 millones de dólares, debido a una serie de operaciones económicas realizadas en 2001.
Matías Domeyko, gerente general de Arauco, señaló que el tribunal rechazó las deducciones "efectuadas por la filial frente al impuesto a las ganancias de ciertos gastos, intereses y diferencias de cambio generados, por un endeudamiento contraído por la empresa".
El conflicto de Alto Paraná en Argentina data desde hace ocho años, cuando la empresa realizó una emisión de duda por 25 millones de dólares para inyectar capitales. Con parte de la deuda que se emitió se rescataron acciones, preferentes emitidas para la compra de la sociedad en 1996. En 2004, la Administración Federal de Ingresos Públicos, símil del Servicio de Impuestos Internos, cuestionó las operaciones, al no considerarlas deuda, y aplicó los impuestos correspondientes a la ganancia de capital.
El gerente de Asuntos Corporativos de la empresa, Adrián Lerer, afirmó la empresa rechaza por completo las acusaciones, por lo que reclamará el caso a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo, un tribunal de carácter judicial. "Nuestro argumento más fuerte es el principio contable de la universalidad del pasivo, que señala que no importa para qué se usó la deuda, todo es deuda, y es deducible según el impuesto a las ganancias", dijo.
Arauco tendráe 30 días hábiles para presentar sus descargos ante el tribunal, pero la firma lo haría antes de fines de febrero.
