Los movimientos telúricos que suelen remecer a nuestro país y las secuelas del más reciente, con frecuencia nos hacen olvidar la relevancia que cobra Chile frente al mundo en otras áreas naturales. La astronomía tiene importantes sedes en nuestro país y podría estar cercano a albergar en sus tierras el último y más avanzado telescopio del mundo.
El norte de Chile ha estado observando a los cielos desde la década de los ochenta. En ese entonces, el organismo astrofísico europeo ESO eligió Paranal, en la Región de Antofagasta, para la edificación de un observatorio astronómico. Hoy el mismo organismo busca una nueva plataforma para investigar el universo, con su mayor y más importante avance tecnológico: el telescopio E-TLT, el más grande construido hasta hoy. Entre los candidatos para albergar este nuevo dispositivo están cuatro zonas de Chile y una en España.
El Comité Asesor para La Selección del Sitio de la ESO ha emitido un comunicado en el que recomienda el Cerro Armazones, ubicado a sólo unos kilómetros del Observatorio Paranal, para la instalación del telescopio. Se concluye, luego de un informe técnico, que este sector destaca por la calidad de sus cielos. Además, esta estratégica ubicación permitirá que el nuevo centro astronómico opere en conjunto y de forma integrada con el Observatorio Paranal.
Gabriel Rodríguez, director de Ciencia, tecnología e Innovación del Ministerio de Relaciones Exteriores, valora esta recomendación y asegura que de darse este avance científico, tendrá grandes efectos, tales como “que la investigación astronómica va a poder crecer aún más rápido de lo que ha crecido, pero también por el hecho de que la instalación de un telescopio de estas características trae aparejado una transferencia tecnológica significativa”. Rodríguez espera que este avance científico le permita a Chile “tener mayor participación y un desarrollo hacia el futuro”.
Ni la contingencia ni desastre natural al que asistimos, pone en duda la idoneidad de tierras chilenas para estos fines investigativos. Pues, a pesar de que los aparatos apostados en los observatorios son de una precisión milimétrica, Gabriel Rodríguez afirma que “ninguno de nuestros telescopios sufrió ningún tipo de problemas. En ese sentido, se puede decir que se confirma que Chile es un lugar seguro y adecuado para la instalación de centros científicos de esta envergadura”.
El Consejo se reunirá de nuevo próximamente para tomar una decisión acerca del sitio en el que se ubicará el mega telescopio. Las recomendaciones del comité asesor serán consideradas en la resolución. Una noticia que conforta. Pues entre tanta incertidumbre con respecto a la tierra y sus movimientos, podemos tener la seguridad de que en materia de investigación del universo, Chile es un país competente, estando cerca de transformarse en la primera sede astronómica a nivel mundial.
Los movimientos telúricos que suelen remecer a nuestro país y las secuelas del más reciente, con frecuencia nos hacen olvidar la relevancia que cobra Chile frente al mundo en otras áreas naturales. La astronomía tiene importantes sedes en nuestro país y podría estar cercano a albergar en sus tierras el último y más avanzado telescopio del mundo.
El norte de Chile ha estado observando a los cielos desde la década de los ochenta. En ese entonces, el organismo astrofísico europeo ESO eligió Paranal, en la Región de Antofagasta, para la edificación de un observatorio astronómico. Hoy el mismo organismo busca una nueva plataforma para investigar el universo, con su mayor y más importante avance tecnológico: el telescopio E-TLT, el más grande construido hasta hoy. Entre los candidatos para albergar este nuevo dispositivo están cuatro zonas de Chile y una en España.
El Comité Asesor para La Selección del Sitio de la ESO ha emitido un comunicado en el que recomienda el Cerro Armazones, ubicado a sólo unos kilómetros del Observatorio Paranal, para la instalación del telescopio. Se concluye, luego de un informe técnico, que este sector destaca por la calidad de sus cielos. Además, esta estratégica ubicación permitirá que el nuevo centro astronómico opere en conjunto y de forma integrada con el Observatorio Paranal.
Gabriel Rodríguez, director de Ciencia, tecnología e Innovación del Ministerio de Relaciones Exteriores, valora esta recomendación y asegura que de darse este avance científico, tendrá grandes efectos, tales como “que la investigación astronómica va a poder crecer aún más rápido de lo que ha crecido, pero también por el hecho de que la instalación de un telescopio de estas características trae aparejado una transferencia tecnológica significativa”. Rodríguez espera que este avance científico le permita a Chile “tener mayor participación y un desarrollo hacia el futuro”.
Ni la contingencia ni desastre natural al que asistimos, pone en duda la idoneidad de tierras chilenas para estos fines investigativos. Pues, a pesar de que los aparatos apostados en los observatorios son de una precisión milimétrica, Gabriel Rodríguez afirma que “ninguno de nuestros telescopios sufrió ningún tipo de problemas. En ese sentido, se puede decir que se confirma que Chile es un lugar seguro y adecuado para la instalación de centros científicos de esta envergadura”.
El Consejo se reunirá de nuevo próximamente para tomar una decisión acerca del sitio en el que se ubicará el mega telescopio. Las recomendaciones del comité asesor serán consideradas en la resolución. Una noticia que conforta. Pues entre tanta incertidumbre con respecto a la tierra y sus movimientos, podemos tener la seguridad de que en materia de investigación del universo, Chile es un país competente, estando cerca de transformarse en la primera sede astronómica a nivel mundial.
Los movimientos telúricos que suelen remecer a nuestro país y las secuelas del más reciente, con frecuencia nos hacen olvidar la relevancia que cobra Chile frente al mundo en otras áreas naturales. La astronomía tiene importantes sedes en nuestro país y podría estar cercano a albergar en sus tierras el último y más avanzado telescopio del mundo.
El norte de Chile ha estado observando a los cielos desde la década de los ochenta. En ese entonces, el organismo astrofísico europeo ESO eligió Paranal, en la Región de Antofagasta, para la edificación de un observatorio astronómico. Hoy el mismo organismo busca una nueva plataforma para investigar el universo, con su mayor y más importante avance tecnológico: el telescopio E-TLT, el más grande construido hasta hoy. Entre los candidatos para albergar este nuevo dispositivo están cuatro zonas de Chile y una en España.
El Comité Asesor para La Selección del Sitio de la ESO ha emitido un comunicado en el que recomienda el Cerro Armazones, ubicado a sólo unos kilómetros del Observatorio Paranal, para la instalación del telescopio. Se concluye, luego de un informe técnico, que este sector destaca por la calidad de sus cielos. Además, esta estratégica ubicación permitirá que el nuevo centro astronómico opere en conjunto y de forma integrada con el Observatorio Paranal.
Gabriel Rodríguez, director de Ciencia, tecnología e Innovación del Ministerio de Relaciones Exteriores, valora esta recomendación y asegura que de darse este avance científico, tendrá grandes efectos, tales como “que la investigación astronómica va a poder crecer aún más rápido de lo que ha crecido, pero también por el hecho de que la instalación de un telescopio de estas características trae aparejado una transferencia tecnológica significativa”. Rodríguez espera que este avance científico le permita a Chile “tener mayor participación y un desarrollo hacia el futuro”.
Ni la contingencia ni desastre natural al que asistimos, pone en duda la idoneidad de tierras chilenas para estos fines investigativos. Pues, a pesar de que los aparatos apostados en los observatorios son de una precisión milimétrica, Gabriel Rodríguez afirma que “ninguno de nuestros telescopios sufrió ningún tipo de problemas. En ese sentido, se puede decir que se confirma que Chile es un lugar seguro y adecuado para la instalación de centros científicos de esta envergadura”.
El Consejo se reunirá de nuevo próximamente para tomar una decisión acerca del sitio en el que se ubicará el mega telescopio. Las recomendaciones del comité asesor serán consideradas en la resolución. Una noticia que conforta. Pues entre tanta incertidumbre con respecto a la tierra y sus movimientos, podemos tener la seguridad de que en materia de investigación del universo, Chile es un país competente, estando cerca de transformarse en la primera sede astronómica a nivel mundial.
