La directora de bibliotecas, archivos y museos, hizo una evaluación positiva del estado de edificios y colecciones de dependencias de la DIBAM. Sin embargo, advirtió que el patrimonio material que no está bajo la protección de esta entidad presenta severos daños luego del terremoto.
Una señal de tranquilidad respecto del estado de las colecciones y edificios de la DIBAM entregó su directora y Vicepresidenta del Consejo de Monumentos Nacionales Nivia Palma.
En el programa Semáforo de Radio Universidad de Chile, la directora de Bibliotecas, Archivos y Museos destacó que de más de tres millones de objetos sólo resultaron dañados seis, que el patrimonio bibliográfico- incluyendo los más de dos millones de libros de la Biblioteca Nacional- se encuentra intacto, al igual que las pinturas del Museo Nacional de Bellas Artes.
A juicio de Nivia Palma, este positivo balance refleja la importancia de que el Estado cuente con instituciones especializadas en el resguardo del patrimonio material.
Sin embargo, la vicepresidenta del Consejo de Monumentos advirtió que hay daños considerables en algunos museos en la zona afectada por el sismo. “El Museo de Talca creemos que puede tener daños muy importantes y tenemos que evaluar si podremos continuar con el edificio restaurado. El Archivo de la Araucanía está muy dañado, creemos que no es recuperable, pero haremos lo que los especialistas nos indiquen”, dijo.
Nivia Palma enfatizó que el patrimonio cultural es mucho más que lo que alberga la DIBAM y lamentó la destrucción de colecciones privadas como el Museo de Colchagua en Santa Cruz.
Sobre los problemas que presentaron edificios como el Museo Nacional de Historia Natural- el más visitado de Chile- la directora de la DIBAM recalcó que luego del terremoto del año 1985, las autoridades de la época taparon las grietas con cemento.
“La dictadura no sólo mató gente, sino que actuó criminalmente con el patrimonio cultural. En la Biblioteca Nacional apareció una grieta por el lado de Moneda que (el régimen militar) la tapó, no como lo estamos haciendo ahora en un gobierno democrático donde contratamos estudios y tomamos medidas de reparación estructural, que es lo que hay que hacer”, subrayó.
Palma indicó que estas reparaciones serán relativamente baratas y rápidas, pero no así la reconstrucción de iglesias patrimoniales a menos que la Iglesia Católica chilena cree un comité para dialogar con las autoridades.
Ante el inminente cambio de gobierno, Nivia Palma opinó que debiera aplazarse la entrega de la tercera etapa del maletín literario y destinar esos más de dos mil millones a regenerar el patrimonio destruido por el sismo.
La directora de bibliotecas, archivos y museos, hizo una evaluación positiva del estado de edificios y colecciones de dependencias de la DIBAM. Sin embargo, advirtió que el patrimonio material que no está bajo la protección de esta entidad presenta severos daños luego del terremoto.
Una señal de tranquilidad respecto del estado de las colecciones y edificios de la DIBAM entregó su directora y Vicepresidenta del Consejo de Monumentos Nacionales Nivia Palma.
En el programa Semáforo de Radio Universidad de Chile, la directora de Bibliotecas, Archivos y Museos destacó que de más de tres millones de objetos sólo resultaron dañados seis, que el patrimonio bibliográfico- incluyendo los más de dos millones de libros de la Biblioteca Nacional- se encuentra intacto, al igual que las pinturas del Museo Nacional de Bellas Artes.
A juicio de Nivia Palma, este positivo balance refleja la importancia de que el Estado cuente con instituciones especializadas en el resguardo del patrimonio material.
Sin embargo, la vicepresidenta del Consejo de Monumentos advirtió que hay daños considerables en algunos museos en la zona afectada por el sismo. “El Museo de Talca creemos que puede tener daños muy importantes y tenemos que evaluar si podremos continuar con el edificio restaurado. El Archivo de la Araucanía está muy dañado, creemos que no es recuperable, pero haremos lo que los especialistas nos indiquen”, dijo.
Nivia Palma enfatizó que el patrimonio cultural es mucho más que lo que alberga la DIBAM y lamentó la destrucción de colecciones privadas como el Museo de Colchagua en Santa Cruz.
Sobre los problemas que presentaron edificios como el Museo Nacional de Historia Natural- el más visitado de Chile- la directora de la DIBAM recalcó que luego del terremoto del año 1985, las autoridades de la época taparon las grietas con cemento.
“La dictadura no sólo mató gente, sino que actuó criminalmente con el patrimonio cultural. En la Biblioteca Nacional apareció una grieta por el lado de Moneda que (el régimen militar) la tapó, no como lo estamos haciendo ahora en un gobierno democrático donde contratamos estudios y tomamos medidas de reparación estructural, que es lo que hay que hacer”, subrayó.
Palma indicó que estas reparaciones serán relativamente baratas y rápidas, pero no así la reconstrucción de iglesias patrimoniales a menos que la Iglesia Católica chilena cree un comité para dialogar con las autoridades.
Ante el inminente cambio de gobierno, Nivia Palma opinó que debiera aplazarse la entrega de la tercera etapa del maletín literario y destinar esos más de dos mil millones a regenerar el patrimonio destruido por el sismo.
La directora de bibliotecas, archivos y museos, hizo una evaluación positiva del estado de edificios y colecciones de dependencias de la DIBAM. Sin embargo, advirtió que el patrimonio material que no está bajo la protección de esta entidad presenta severos daños luego del terremoto.
Una señal de tranquilidad respecto del estado de las colecciones y edificios de la DIBAM entregó su directora y Vicepresidenta del Consejo de Monumentos Nacionales Nivia Palma.
En el programa Semáforo de Radio Universidad de Chile, la directora de Bibliotecas, Archivos y Museos destacó que de más de tres millones de objetos sólo resultaron dañados seis, que el patrimonio bibliográfico- incluyendo los más de dos millones de libros de la Biblioteca Nacional- se encuentra intacto, al igual que las pinturas del Museo Nacional de Bellas Artes.
A juicio de Nivia Palma, este positivo balance refleja la importancia de que el Estado cuente con instituciones especializadas en el resguardo del patrimonio material.
Sin embargo, la vicepresidenta del Consejo de Monumentos advirtió que hay daños considerables en algunos museos en la zona afectada por el sismo. “El Museo de Talca creemos que puede tener daños muy importantes y tenemos que evaluar si podremos continuar con el edificio restaurado. El Archivo de la Araucanía está muy dañado, creemos que no es recuperable, pero haremos lo que los especialistas nos indiquen”, dijo.
Nivia Palma enfatizó que el patrimonio cultural es mucho más que lo que alberga la DIBAM y lamentó la destrucción de colecciones privadas como el Museo de Colchagua en Santa Cruz.
Sobre los problemas que presentaron edificios como el Museo Nacional de Historia Natural- el más visitado de Chile- la directora de la DIBAM recalcó que luego del terremoto del año 1985, las autoridades de la época taparon las grietas con cemento.
“La dictadura no sólo mató gente, sino que actuó criminalmente con el patrimonio cultural. En la Biblioteca Nacional apareció una grieta por el lado de Moneda que (el régimen militar) la tapó, no como lo estamos haciendo ahora en un gobierno democrático donde contratamos estudios y tomamos medidas de reparación estructural, que es lo que hay que hacer”, subrayó.
Palma indicó que estas reparaciones serán relativamente baratas y rápidas, pero no así la reconstrucción de iglesias patrimoniales a menos que la Iglesia Católica chilena cree un comité para dialogar con las autoridades.
Ante el inminente cambio de gobierno, Nivia Palma opinó que debiera aplazarse la entrega de la tercera etapa del maletín literario y destinar esos más de dos mil millones a regenerar el patrimonio destruido por el sismo.
