Cuando se cumplen diez días del terremoto de 8,8 grados Richter, la falta de agua potable y la acumulación de basura en las calles son problemas que siguen presentes en las localidades de la región del Bío Bío.
Por esta razón, la seremi de Salud, Marta Werner, aseguró hoy que existe un riesgo sanitario en la región.
Según lo detallado por la autoridad, hay comunas que sólo cuentan con el cuarenta por ciento de abastecimiento de agua, lo que "constituye por sí mismo un riesgo para la salud de las personas".
En lugares como Llico, Dichato, Tirúa y Chiguayante, añadió, existen habitantes afectados por diarreas, por lo que 361 niños ya fueron vacunados.
La seremi de Salud, recomendó a la población enterrar la basura, para evitar así focos de insalubridad, aunque el Ejército ya dispuso de camiones adicionales para su retiro.