Terminando con las especulaciones y generando consigo una nueva polémica, el Presidente Sebastián Piñera presentó al comandante en Jefe del Ejército (r), Óscar Izurieta, como subsecretario de Defensa.
El mandatario destacó que la “brillante trayectoria” del general (r) Izurieta sería un gran aporte a las funciones que deberá cumplir en el proceso de modernización de las Fuerzas Armadas del país.
Piñera señaló que el subsecretario tendrá cuatro labores principales: planificación, cooperación internacional, estrategia militar y desarrollo científico y tecnológico al interior de la Defensa Nacional.
El jefe de Estado además aseguró que no hubo ninguna conversación sobre la designación mientras Izurieta se desempeñaba como comandante en Jefe, hasta el 9 de marzo pasado, “pero también creo que una vez que está en retiro, como es el caso del general (r) Oscar Izurieta, no hay ninguna razón para prescindir de su trayectoria, experiencia, capacidad y excelencia profesional para cumplir labores en beneficio de nuestro país”, dijo.
Izurieta a su vez destacó que su principal desafío será la de efectuar la organización del trabajo de las instituciones militares bajo la nueva ley 20.424 que reorganiza el Ministerio de Defensa y crea el Estado Mayor Conjunto… una tarea a la que, según dijo, nadie puede restarse.
“Hay una nueva ley de ministerio de Defensa Nacional que significa poner en marcha un sistema completamente distinto. Este es el cambio más grande que ha habido en Defensa que requiere un trabajo de planificación nuevo.”, indicó el nuevo subsecretario.
En el mundo político, inmediatamente surgieron reacciones en torno a la designación de Izurieta en el cargo, uno de los secretos a voces más conocidos antes de que asumiera el nuevo gobierno.
El presidente del Partido Comunista, diputado Guillermo Teillier, criticó los procedimientos que utilizan para realizar los nombramientos, pues lo preferible es que “las Fuerzas Armadas tengan prescindencia política” lo que quedaría en entredicho.
“El sistema civil de conducción del Estado es el que tiene que prevalecer en todo momento, en este caso también debiera haber sido un civil el subsecretario. Un ex general en jefe recién salido que pasa a ser subsecretario, es como si siguiera al mando de las Fuerzas Armadas”, aseguró Teillier.
Al contrario, el diputado RN Alberto Cardemil indicó que le nombramiento de Izurieta responde exclusivamente a sus capacidades técnicas y no tendrá implicancias políticas “en una nueva estructura que tenemos que echar a andar, que hay cuatro años para implementarla, para complementarla y donde el va a dar un gran aporte”, indicó.
Similar es la opinión del diputado PPD Jorge Tarud, quien lo ve como la persona idónea para asumir el cargo por el acercamiento de la institución a la ciudadana durante su administración.
Cabe señalar que el general (r) Izurieta el 9 de marzo pasado dejó el cargo como jefe del Ejército a los 59 años, pero las conversaciones sobre su eventual nombramiento en la subsecretaría levantó críticas desde la Concertación, que acusó al gobierno de estar negociando cargos políticos con militares aún en ejercicio.
De esta manera, el mandatario concretó el nombramiento en uno de los últimos cargos que le faltaba por designar.
Terminando con las especulaciones y generando consigo una nueva polémica, el Presidente Sebastián Piñera presentó al comandante en Jefe del Ejército (r), Óscar Izurieta, como subsecretario de Defensa.
El mandatario destacó que la “brillante trayectoria” del general (r) Izurieta sería un gran aporte a las funciones que deberá cumplir en el proceso de modernización de las Fuerzas Armadas del país.
Piñera señaló que el subsecretario tendrá cuatro labores principales: planificación, cooperación internacional, estrategia militar y desarrollo científico y tecnológico al interior de la Defensa Nacional.
El jefe de Estado además aseguró que no hubo ninguna conversación sobre la designación mientras Izurieta se desempeñaba como comandante en Jefe, hasta el 9 de marzo pasado, “pero también creo que una vez que está en retiro, como es el caso del general (r) Oscar Izurieta, no hay ninguna razón para prescindir de su trayectoria, experiencia, capacidad y excelencia profesional para cumplir labores en beneficio de nuestro país”, dijo.
Izurieta a su vez destacó que su principal desafío será la de efectuar la organización del trabajo de las instituciones militares bajo la nueva ley 20.424 que reorganiza el Ministerio de Defensa y crea el Estado Mayor Conjunto… una tarea a la que, según dijo, nadie puede restarse.
“Hay una nueva ley de ministerio de Defensa Nacional que significa poner en marcha un sistema completamente distinto. Este es el cambio más grande que ha habido en Defensa que requiere un trabajo de planificación nuevo.”, indicó el nuevo subsecretario.
En el mundo político, inmediatamente surgieron reacciones en torno a la designación de Izurieta en el cargo, uno de los secretos a voces más conocidos antes de que asumiera el nuevo gobierno.
El presidente del Partido Comunista, diputado Guillermo Teillier, criticó los procedimientos que utilizan para realizar los nombramientos, pues lo preferible es que “las Fuerzas Armadas tengan prescindencia política” lo que quedaría en entredicho.
“El sistema civil de conducción del Estado es el que tiene que prevalecer en todo momento, en este caso también debiera haber sido un civil el subsecretario. Un ex general en jefe recién salido que pasa a ser subsecretario, es como si siguiera al mando de las Fuerzas Armadas”, aseguró Teillier.
Al contrario, el diputado RN Alberto Cardemil indicó que le nombramiento de Izurieta responde exclusivamente a sus capacidades técnicas y no tendrá implicancias políticas “en una nueva estructura que tenemos que echar a andar, que hay cuatro años para implementarla, para complementarla y donde el va a dar un gran aporte”, indicó.
Similar es la opinión del diputado PPD Jorge Tarud, quien lo ve como la persona idónea para asumir el cargo por el acercamiento de la institución a la ciudadana durante su administración.
Cabe señalar que el general (r) Izurieta el 9 de marzo pasado dejó el cargo como jefe del Ejército a los 59 años, pero las conversaciones sobre su eventual nombramiento en la subsecretaría levantó críticas desde la Concertación, que acusó al gobierno de estar negociando cargos políticos con militares aún en ejercicio.
De esta manera, el mandatario concretó el nombramiento en uno de los últimos cargos que le faltaba por designar.
Terminando con las especulaciones y generando consigo una nueva polémica, el Presidente Sebastián Piñera presentó al comandante en Jefe del Ejército (r), Óscar Izurieta, como subsecretario de Defensa.
El mandatario destacó que la “brillante trayectoria” del general (r) Izurieta sería un gran aporte a las funciones que deberá cumplir en el proceso de modernización de las Fuerzas Armadas del país.
Piñera señaló que el subsecretario tendrá cuatro labores principales: planificación, cooperación internacional, estrategia militar y desarrollo científico y tecnológico al interior de la Defensa Nacional.
El jefe de Estado además aseguró que no hubo ninguna conversación sobre la designación mientras Izurieta se desempeñaba como comandante en Jefe, hasta el 9 de marzo pasado, “pero también creo que una vez que está en retiro, como es el caso del general (r) Oscar Izurieta, no hay ninguna razón para prescindir de su trayectoria, experiencia, capacidad y excelencia profesional para cumplir labores en beneficio de nuestro país”, dijo.
Izurieta a su vez destacó que su principal desafío será la de efectuar la organización del trabajo de las instituciones militares bajo la nueva ley 20.424 que reorganiza el Ministerio de Defensa y crea el Estado Mayor Conjunto… una tarea a la que, según dijo, nadie puede restarse.
“Hay una nueva ley de ministerio de Defensa Nacional que significa poner en marcha un sistema completamente distinto. Este es el cambio más grande que ha habido en Defensa que requiere un trabajo de planificación nuevo.”, indicó el nuevo subsecretario.
En el mundo político, inmediatamente surgieron reacciones en torno a la designación de Izurieta en el cargo, uno de los secretos a voces más conocidos antes de que asumiera el nuevo gobierno.
El presidente del Partido Comunista, diputado Guillermo Teillier, criticó los procedimientos que utilizan para realizar los nombramientos, pues lo preferible es que “las Fuerzas Armadas tengan prescindencia política” lo que quedaría en entredicho.
“El sistema civil de conducción del Estado es el que tiene que prevalecer en todo momento, en este caso también debiera haber sido un civil el subsecretario. Un ex general en jefe recién salido que pasa a ser subsecretario, es como si siguiera al mando de las Fuerzas Armadas”, aseguró Teillier.
Al contrario, el diputado RN Alberto Cardemil indicó que le nombramiento de Izurieta responde exclusivamente a sus capacidades técnicas y no tendrá implicancias políticas “en una nueva estructura que tenemos que echar a andar, que hay cuatro años para implementarla, para complementarla y donde el va a dar un gran aporte”, indicó.
Similar es la opinión del diputado PPD Jorge Tarud, quien lo ve como la persona idónea para asumir el cargo por el acercamiento de la institución a la ciudadana durante su administración.
Cabe señalar que el general (r) Izurieta el 9 de marzo pasado dejó el cargo como jefe del Ejército a los 59 años, pero las conversaciones sobre su eventual nombramiento en la subsecretaría levantó críticas desde la Concertación, que acusó al gobierno de estar negociando cargos políticos con militares aún en ejercicio.
De esta manera, el mandatario concretó el nombramiento en uno de los últimos cargos que le faltaba por designar.
