ANEF se reunirá con el gobierno para discutir diferencias y reiterar demandas
La situación de los empleados fiscales, donde predominan los contratos precarios por sobre los funcionarios de planta, y el reajuste salarial 2010, serán algunos de los temas que debatirá la ANEF con el gobierno de Sebastián Piñera esta semana. Sin embargo, el encuentro estará cruzado por el despido de unos 200 trabajadores en diferentes reparticiones, los que habrían sido desvinculados por motivos políticos.
Lunes 12 de abril 2010 1:31 hrs.
Este martes 13 y miércoles 14 de abril, los dirigentes de los empleados fiscales se reunirán para analizar la plataforma en la que se presentan ante el nuevo gobierno, caracterizado, según Raúl de la Puente, presidente de la asociación que los reúne, por la amplia presencia de autoridades que vienen del mundo empresarial y que en cierta medida, desconocen el sector público.
Según el presidente de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), la forma en que el gobierno de Sebastián Piñera concibe el sistema de funcionarios públicos y sus regulaciones generan “mucha preocupación” en el gremio. Para Raúl de la Puente, “un contrato de trabajo flexible y negociación centralizada con mediación forzosa” se contrapone a lo que como asociación de empleados públicos siempre han planteado, incluyendo la eterna demanda de que “se derogue el artículo de la Constitución que prohíbe la huelga para los funcionarios públicos”.
El presidente de la ANEF aseguró que tienen muchas diferencias con el gobierno de Piñera que esperan conversar con sus representantes en los próximos meses, donde además propondrán una negociación de todo el sector público por reajuste salarial y para aumentar la dotación de funcionarios de planta.
Uno de los invitados al encuentro del martes es el diputado y ex ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, quien señaló que es necesario establecer sistemas de negociación con los funcionarios del Estado, los que pueden “incorporar en el algunos mecanismos que son propios del sector privado, como el ahorro previsional voluntario y el seguro de cesantía”. Una necesidad que según el ex secretario de Estado, se hace imperante al momento de “enfrentar la discusión de la estabilidad del empleo público”.
Pero antes que el gobierno cumpliera un mes instalado en La Moneda, en varias reparticiones públicas se registraron despidos de funcionarios, como por ejemplo en el Consejo de la Cultura y las Artes que encabeza el actor Luciano Cruz Coke.
Esta situación ya era motivo de inquietud para aquellos parlamentarios cercanos a los empleados fiscales, como el diputado Tucapel Jiménez, quien durante la romería en memoria de su padre, ex presidente de la ANEF, expresó su preocupación ya en el mes de febrero.
“No queríamos tener exonerados políticos en democracia”, declaró Jiménez refiriéndose a los despidos motivados por mera incompatibilidad ideológica. “Yo he escuchado que en algunas regiones se ha comenzado a despedir gente por el sólo hecho de ser de la Concertación y eso no puede pasar en un país democrático”, afirmó, recordando además que los empleados públicos son “funcionarios del Estado y no del gobierno”.
Entre las demandas que mantiene la ANEF está el terminar con el gran número de funcionarios públicos a honorarios o a contrata, los que no gozan de una gran estabilidad laboral ya que sus contratos pueden ser revocados de manera unilateral por el servicio donde desarrollan sus labores. Este y otros temas son lo que debatirán durante su encuentro con el Ejecutivo esta semana.
Este martes 13 y miércoles 14 de abril, los dirigentes de los empleados fiscales se reunirán para analizar la plataforma en la que se presentan ante el nuevo gobierno, caracterizado, según Raúl de la Puente, presidente de la asociación que los reúne, por la amplia presencia de autoridades que vienen del mundo empresarial y que en cierta medida, desconocen el sector público.
Según el presidente de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), la forma en que el gobierno de Sebastián Piñera concibe el sistema de funcionarios públicos y sus regulaciones generan “mucha preocupación” en el gremio. Para Raúl de la Puente, “un contrato de trabajo flexible y negociación centralizada con mediación forzosa” se contrapone a lo que como asociación de empleados públicos siempre han planteado, incluyendo la eterna demanda de que “se derogue el artículo de la Constitución que prohíbe la huelga para los funcionarios públicos”.
El presidente de la ANEF aseguró que tienen muchas diferencias con el gobierno de Piñera que esperan conversar con sus representantes en los próximos meses, donde además propondrán una negociación de todo el sector público por reajuste salarial y para aumentar la dotación de funcionarios de planta.
Uno de los invitados al encuentro del martes es el diputado y ex ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, quien señaló que es necesario establecer sistemas de negociación con los funcionarios del Estado, los que pueden “incorporar en el algunos mecanismos que son propios del sector privado, como el ahorro previsional voluntario y el seguro de cesantía”. Una necesidad que según el ex secretario de Estado, se hace imperante al momento de “enfrentar la discusión de la estabilidad del empleo público”.
Pero antes que el gobierno cumpliera un mes instalado en La Moneda, en varias reparticiones públicas se registraron despidos de funcionarios, como por ejemplo en el Consejo de la Cultura y las Artes que encabeza el actor Luciano Cruz Coke.
Esta situación ya era motivo de inquietud para aquellos parlamentarios cercanos a los empleados fiscales, como el diputado Tucapel Jiménez, quien durante la romería en memoria de su padre, ex presidente de la ANEF, expresó su preocupación ya en el mes de febrero.
“No queríamos tener exonerados políticos en democracia”, declaró Jiménez refiriéndose a los despidos motivados por mera incompatibilidad ideológica. “Yo he escuchado que en algunas regiones se ha comenzado a despedir gente por el sólo hecho de ser de la Concertación y eso no puede pasar en un país democrático”, afirmó, recordando además que los empleados públicos son “funcionarios del Estado y no del gobierno”.
Entre las demandas que mantiene la ANEF está el terminar con el gran número de funcionarios públicos a honorarios o a contrata, los que no gozan de una gran estabilidad laboral ya que sus contratos pueden ser revocados de manera unilateral por el servicio donde desarrollan sus labores. Este y otros temas son lo que debatirán durante su encuentro con el Ejecutivo esta semana.
Este martes 13 y miércoles 14 de abril, los dirigentes de los empleados fiscales se reunirán para analizar la plataforma en la que se presentan ante el nuevo gobierno, caracterizado, según Raúl de la Puente, presidente de la asociación que los reúne, por la amplia presencia de autoridades que vienen del mundo empresarial y que en cierta medida, desconocen el sector público.
Según el presidente de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), la forma en que el gobierno de Sebastián Piñera concibe el sistema de funcionarios públicos y sus regulaciones generan “mucha preocupación” en el gremio. Para Raúl de la Puente, “un contrato de trabajo flexible y negociación centralizada con mediación forzosa” se contrapone a lo que como asociación de empleados públicos siempre han planteado, incluyendo la eterna demanda de que “se derogue el artículo de la Constitución que prohíbe la huelga para los funcionarios públicos”.
El presidente de la ANEF aseguró que tienen muchas diferencias con el gobierno de Piñera que esperan conversar con sus representantes en los próximos meses, donde además propondrán una negociación de todo el sector público por reajuste salarial y para aumentar la dotación de funcionarios de planta.
Uno de los invitados al encuentro del martes es el diputado y ex ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, quien señaló que es necesario establecer sistemas de negociación con los funcionarios del Estado, los que pueden “incorporar en el algunos mecanismos que son propios del sector privado, como el ahorro previsional voluntario y el seguro de cesantía”. Una necesidad que según el ex secretario de Estado, se hace imperante al momento de “enfrentar la discusión de la estabilidad del empleo público”.
Pero antes que el gobierno cumpliera un mes instalado en La Moneda, en varias reparticiones públicas se registraron despidos de funcionarios, como por ejemplo en el Consejo de la Cultura y las Artes que encabeza el actor Luciano Cruz Coke.
Esta situación ya era motivo de inquietud para aquellos parlamentarios cercanos a los empleados fiscales, como el diputado Tucapel Jiménez, quien durante la romería en memoria de su padre, ex presidente de la ANEF, expresó su preocupación ya en el mes de febrero.
“No queríamos tener exonerados políticos en democracia”, declaró Jiménez refiriéndose a los despidos motivados por mera incompatibilidad ideológica. “Yo he escuchado que en algunas regiones se ha comenzado a despedir gente por el sólo hecho de ser de la Concertación y eso no puede pasar en un país democrático”, afirmó, recordando además que los empleados públicos son “funcionarios del Estado y no del gobierno”.
Entre las demandas que mantiene la ANEF está el terminar con el gran número de funcionarios públicos a honorarios o a contrata, los que no gozan de una gran estabilidad laboral ya que sus contratos pueden ser revocados de manera unilateral por el servicio donde desarrollan sus labores. Este y otros temas son lo que debatirán durante su encuentro con el Ejecutivo esta semana.
