Por falta de quórum la Cámara de Diputados rechazó el informe de la comisión especial sobre la Libertad de pensamiento y expresión, el Derecho a la Información y la Libertad en los Medios de Comunicación.
El texto recibió 43 votos a favor, 34 en contra y 9 abstenciones, pero la presidencia de la mesa directiva de la Cámara Baja, dirigida en ese momento por el RN Germán Becker, estimó que los votos a favor no superaban a los votos en contra y abstenciones y determinó el rechazo del documento.
La instancia se creó para analizar el trabajo de los medios y establecer qué medidas podían fomentar el derecho a informar y ser informado, además de los derechos fundamentales ligados al pensamiento y la expresión.
El texto señala en sus conclusiones la necesidad de establecer una regulación del mercado de los medios, con objeto de evitar la concentración económica. Además apunta la necesidad de subsidios para la creación y mantención de nuevos medios, establecer cuotas de avisaje para medios considerados vulnerables y garantizar el acceso igualitario a la información pública.
La situación fue lamentada por el diputado radical Fernando Meza, quien afirmó que el Estado debería apoyar a los medios de comunicación independientes que deben luchar con los grandes consorcios periodísticos para sobrevivir.
“Este rechazo implica la presencia de intereses en algunos parlamentarios que tienen intereses en algunos medios de comunicación y los defienden a ultranza, y con ello impiden la aparición de otros medios más pluralistas”, denunció el diputado.
En tanto, el parlamentario de Renovación Nacional, Alberto Cardemil, señaló que estaba en contra del informe, ya que considera que las conclusiones no resuelven la problemática de los medios en Chile.
“Fue una comisión que se formó al calor de la última elección presidencial, y tenía que ver más con temas de tipo electoral que con temas de fondo que dicen a la libertad de expresión y al ejercicio de la misma. No son prudentes y pueden agravar la situación en vez de corregirla”, aseguró Cardemil.
El texto además establecía la necesidad de crear un Consejo Nacional de Radiodifusión, con funciones analógicas al ente que existe en materia de televisión, o ampliar las funciones de éste hacia el ámbito radial.
Además se concluía la necesidad de consagrar concesiones de radiodifusión y de televisión digital para medios locales, con el objetivo de asegurar la diversidad informativa.
Por falta de quórum la Cámara de Diputados rechazó el informe de la comisión especial sobre la Libertad de pensamiento y expresión, el Derecho a la Información y la Libertad en los Medios de Comunicación.
El texto recibió 43 votos a favor, 34 en contra y 9 abstenciones, pero la presidencia de la mesa directiva de la Cámara Baja, dirigida en ese momento por el RN Germán Becker, estimó que los votos a favor no superaban a los votos en contra y abstenciones y determinó el rechazo del documento.
La instancia se creó para analizar el trabajo de los medios y establecer qué medidas podían fomentar el derecho a informar y ser informado, además de los derechos fundamentales ligados al pensamiento y la expresión.
El texto señala en sus conclusiones la necesidad de establecer una regulación del mercado de los medios, con objeto de evitar la concentración económica. Además apunta la necesidad de subsidios para la creación y mantención de nuevos medios, establecer cuotas de avisaje para medios considerados vulnerables y garantizar el acceso igualitario a la información pública.
La situación fue lamentada por el diputado radical Fernando Meza, quien afirmó que el Estado debería apoyar a los medios de comunicación independientes que deben luchar con los grandes consorcios periodísticos para sobrevivir.
“Este rechazo implica la presencia de intereses en algunos parlamentarios que tienen intereses en algunos medios de comunicación y los defienden a ultranza, y con ello impiden la aparición de otros medios más pluralistas”, denunció el diputado.
En tanto, el parlamentario de Renovación Nacional, Alberto Cardemil, señaló que estaba en contra del informe, ya que considera que las conclusiones no resuelven la problemática de los medios en Chile.
“Fue una comisión que se formó al calor de la última elección presidencial, y tenía que ver más con temas de tipo electoral que con temas de fondo que dicen a la libertad de expresión y al ejercicio de la misma. No son prudentes y pueden agravar la situación en vez de corregirla”, aseguró Cardemil.
El texto además establecía la necesidad de crear un Consejo Nacional de Radiodifusión, con funciones analógicas al ente que existe en materia de televisión, o ampliar las funciones de éste hacia el ámbito radial.
Además se concluía la necesidad de consagrar concesiones de radiodifusión y de televisión digital para medios locales, con el objetivo de asegurar la diversidad informativa.
Por falta de quórum la Cámara de Diputados rechazó el informe de la comisión especial sobre la Libertad de pensamiento y expresión, el Derecho a la Información y la Libertad en los Medios de Comunicación.
El texto recibió 43 votos a favor, 34 en contra y 9 abstenciones, pero la presidencia de la mesa directiva de la Cámara Baja, dirigida en ese momento por el RN Germán Becker, estimó que los votos a favor no superaban a los votos en contra y abstenciones y determinó el rechazo del documento.
La instancia se creó para analizar el trabajo de los medios y establecer qué medidas podían fomentar el derecho a informar y ser informado, además de los derechos fundamentales ligados al pensamiento y la expresión.
El texto señala en sus conclusiones la necesidad de establecer una regulación del mercado de los medios, con objeto de evitar la concentración económica. Además apunta la necesidad de subsidios para la creación y mantención de nuevos medios, establecer cuotas de avisaje para medios considerados vulnerables y garantizar el acceso igualitario a la información pública.
La situación fue lamentada por el diputado radical Fernando Meza, quien afirmó que el Estado debería apoyar a los medios de comunicación independientes que deben luchar con los grandes consorcios periodísticos para sobrevivir.
“Este rechazo implica la presencia de intereses en algunos parlamentarios que tienen intereses en algunos medios de comunicación y los defienden a ultranza, y con ello impiden la aparición de otros medios más pluralistas”, denunció el diputado.
En tanto, el parlamentario de Renovación Nacional, Alberto Cardemil, señaló que estaba en contra del informe, ya que considera que las conclusiones no resuelven la problemática de los medios en Chile.
“Fue una comisión que se formó al calor de la última elección presidencial, y tenía que ver más con temas de tipo electoral que con temas de fondo que dicen a la libertad de expresión y al ejercicio de la misma. No son prudentes y pueden agravar la situación en vez de corregirla”, aseguró Cardemil.
El texto además establecía la necesidad de crear un Consejo Nacional de Radiodifusión, con funciones analógicas al ente que existe en materia de televisión, o ampliar las funciones de éste hacia el ámbito radial.
Además se concluía la necesidad de consagrar concesiones de radiodifusión y de televisión digital para medios locales, con el objetivo de asegurar la diversidad informativa.
