Organizaciones de víctimas de la dictadura rechazan de plano la posibilidad de un Indulto Bicentenario que beneficie a condenados por delitos de lesa humanidad. Apelan al carácter imprescriptible e inamnistiable de los casos de violaciones a los derechos humanos.
Aunque la propuesta de la Iglesia Católica no ha sido presentada aún al Ejecutivo, y el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, señaló que el gobierno no considera esta opción, pero que igualmente deberán evaluarla cuando se la expongan, existe a priori una fuerte negativa a la posibilidad de que condenados por delitos de lesa humanidad sean liberados a través del Indulto Bicentenario.
Sin embargo, el gobierno desmiente que esta alternativa se baraje como una posibilidad. Según la directora del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, Rommy Schmidt, existe ya una verdad colectiva entorno a lo sucedido durante la dictadura militar, por lo que no debería prosperar la idea.
“Hoy puede tratar de orientar una opinión determinada en torno a hechos que son dolorosos, pero tan claros que están demostrados no sólo en los informes de verdad y justicia sino también en las causas judiciales y ningún gobierno, sin importar si es de izquierda o derecha, debería involucrarse en un tema tan complejo y para eso todos los chilenos tenemos también un juicio sobre lo que ha sucedido”, indicó Schmidt.
En tanto, María Luisa Sepúlveda, ex asesora presidencial de Bachelet en materia de derechos humanos y vicepresidenta ejecutiva a cargo de las recalificaciones de casos de las comisiones Rettig y Valech, señaló que “hay sectores de la sociedad, lo que es legítimo, que tienen una postura distinta que requiere debate. Respecto de las causas de derechos humanos, toda la legislación internacional y los tratados nos dicen que no deben ser amnistiadas ni prescriptibles y espero que se respeten esos principios”.
Mientras tanto, en la Asamblea Nacional de Ex Presos Políticos también existe una fuerte resistencia a esta posibilidad, uno de sus miembros Nelson Aramburu, aseguró que esta opción sí se estaría manejando, aunque cree que es inviable.
“Ellos tienen que cumplir en prisión la condena efectiva y, además, la mayor parte de las veces han sido condenas irrisorias respecto a las violaciones de los derechos humanos. Por esa razón consideramos de que un indulto simplemente no pasará”, señaló el ex preso político.
Aramburu argumentó que al ser Sebastián Piñera Presidente de Chile los sectores cercanos a militares condenados tendrían expectativas.
En la misma línea, María Eliana Comené, detenida y torturada a bordo de La Esmeralda, rechazó totalmente esta posibilidad.
“Indultar a quienes hicieron tanto daño es otra falta a los derechos humanos, por segunda vez. A duras penas hemos tenido un poco de justicia porque justicia no hay y ahora los pocos que están presos y que son los grandes responsables que les otorguen la libertad me parece una aberración social, política y humana”, enfatizó la víctima de la dictadura.