Ante la decisión del Instituto de Desarrollo Agropecuario de terminar con el “bono maíz”, los pequeños productores de la zona centro-sur se declararon en estado de alerta y amenazaron con movilizaciones.
Los productores agrupados en el “Movimiento del Valle Central de los maiceros” anticiparon un posible conflicto dado que no están dispuestos a perder el beneficio que reciben del Estado.
El “bono maíz” se trata de un programa específico dirigido a pequeños agricultores de las regiones Metropolitana, O’Higgins y del Maule y que equivale al treinta por ciento de los costos de producción.
El reclamo de La organización fue respaldado por el presidente de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, Ramón Barros (UDI), que emplazó al gobierno a revertir la polémica medida.
“Mi posición es no suspenderlo. Necesitamos voluntad política para poder desarrollar un programa como este, en el pasado la hubo voluntad y espero que ahora también. Eso sí, depurando y filtrando en virtud a la realidad que tienen otros sectores productivos”, afirmó Barros.
El parlamentario agregó que se debe depurar la lista de beneficiarios, ya que hay muchos agricultores que ya no necesitan estos dineros, los que en 2009 alcanzaron a unos cuatro mil trabajadores agrícolas, por un monto de más de cinco mil millones de pesos.
En tanto, el diputado DC Juan Carlos Latorre aseguró que estas medidas son contrarias a lo anunciado por el Presidente Piñera en su discurso del 21 de mayo.
El director del Instituto de Desarrollo Agropecuario. (Indap) y ex presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio, Ricardo Ariztía, por su lado, justificó la suspensión del beneficio y explicó que el “bono maíz” representa una parte sustancial del presupuesto de la entidad.
“La decisión está tomada, nosotros estamos ayudando a la agricultura en general, no a un determinado grupo de pequeños agricultores. Hay una injustica, una inequidad que es inaceptable”, sostuvo Ariztía.
Al referirse a este asunto, el titular de la Sociedad Nacional de Agricultura, Luis Mayol, llamó a la cautela a los productores de maíz de la zona central y señaló que el objetivo de la autoridad con esta medida es racionalizar los recursos.
“Que tengan confianza, creo que se está trabajando en que los recursos vayan a productividad y autosustantiblidad. No creo que estemos en condiciones de estar haciendo regalos a un sector muy pequeño en desmedro de un amplio sector de pequeños propietarios que necesitan urgente una asistencia”, aseguró Mayol.
El gobierno dijo que para paliar la situación se van a duplicar los fondos concursables para la preparación de suelos en un total de mil 800 millones de pesos.
Ante la decisión del Instituto de Desarrollo Agropecuario de terminar con el “bono maíz”, los pequeños productores de la zona centro-sur se declararon en estado de alerta y amenazaron con movilizaciones.
Los productores agrupados en el “Movimiento del Valle Central de los maiceros” anticiparon un posible conflicto dado que no están dispuestos a perder el beneficio que reciben del Estado.
El “bono maíz” se trata de un programa específico dirigido a pequeños agricultores de las regiones Metropolitana, O’Higgins y del Maule y que equivale al treinta por ciento de los costos de producción.
El reclamo de La organización fue respaldado por el presidente de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, Ramón Barros (UDI), que emplazó al gobierno a revertir la polémica medida.
“Mi posición es no suspenderlo. Necesitamos voluntad política para poder desarrollar un programa como este, en el pasado la hubo voluntad y espero que ahora también. Eso sí, depurando y filtrando en virtud a la realidad que tienen otros sectores productivos”, afirmó Barros.
El parlamentario agregó que se debe depurar la lista de beneficiarios, ya que hay muchos agricultores que ya no necesitan estos dineros, los que en 2009 alcanzaron a unos cuatro mil trabajadores agrícolas, por un monto de más de cinco mil millones de pesos.
En tanto, el diputado DC Juan Carlos Latorre aseguró que estas medidas son contrarias a lo anunciado por el Presidente Piñera en su discurso del 21 de mayo.
El director del Instituto de Desarrollo Agropecuario. (Indap) y ex presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio, Ricardo Ariztía, por su lado, justificó la suspensión del beneficio y explicó que el “bono maíz” representa una parte sustancial del presupuesto de la entidad.
“La decisión está tomada, nosotros estamos ayudando a la agricultura en general, no a un determinado grupo de pequeños agricultores. Hay una injustica, una inequidad que es inaceptable”, sostuvo Ariztía.
Al referirse a este asunto, el titular de la Sociedad Nacional de Agricultura, Luis Mayol, llamó a la cautela a los productores de maíz de la zona central y señaló que el objetivo de la autoridad con esta medida es racionalizar los recursos.
“Que tengan confianza, creo que se está trabajando en que los recursos vayan a productividad y autosustantiblidad. No creo que estemos en condiciones de estar haciendo regalos a un sector muy pequeño en desmedro de un amplio sector de pequeños propietarios que necesitan urgente una asistencia”, aseguró Mayol.
El gobierno dijo que para paliar la situación se van a duplicar los fondos concursables para la preparación de suelos en un total de mil 800 millones de pesos.
Ante la decisión del Instituto de Desarrollo Agropecuario de terminar con el “bono maíz”, los pequeños productores de la zona centro-sur se declararon en estado de alerta y amenazaron con movilizaciones.
Los productores agrupados en el “Movimiento del Valle Central de los maiceros” anticiparon un posible conflicto dado que no están dispuestos a perder el beneficio que reciben del Estado.
El “bono maíz” se trata de un programa específico dirigido a pequeños agricultores de las regiones Metropolitana, O’Higgins y del Maule y que equivale al treinta por ciento de los costos de producción.
El reclamo de La organización fue respaldado por el presidente de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, Ramón Barros (UDI), que emplazó al gobierno a revertir la polémica medida.
“Mi posición es no suspenderlo. Necesitamos voluntad política para poder desarrollar un programa como este, en el pasado la hubo voluntad y espero que ahora también. Eso sí, depurando y filtrando en virtud a la realidad que tienen otros sectores productivos”, afirmó Barros.
El parlamentario agregó que se debe depurar la lista de beneficiarios, ya que hay muchos agricultores que ya no necesitan estos dineros, los que en 2009 alcanzaron a unos cuatro mil trabajadores agrícolas, por un monto de más de cinco mil millones de pesos.
En tanto, el diputado DC Juan Carlos Latorre aseguró que estas medidas son contrarias a lo anunciado por el Presidente Piñera en su discurso del 21 de mayo.
El director del Instituto de Desarrollo Agropecuario. (Indap) y ex presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio, Ricardo Ariztía, por su lado, justificó la suspensión del beneficio y explicó que el “bono maíz” representa una parte sustancial del presupuesto de la entidad.
“La decisión está tomada, nosotros estamos ayudando a la agricultura en general, no a un determinado grupo de pequeños agricultores. Hay una injustica, una inequidad que es inaceptable”, sostuvo Ariztía.
Al referirse a este asunto, el titular de la Sociedad Nacional de Agricultura, Luis Mayol, llamó a la cautela a los productores de maíz de la zona central y señaló que el objetivo de la autoridad con esta medida es racionalizar los recursos.
“Que tengan confianza, creo que se está trabajando en que los recursos vayan a productividad y autosustantiblidad. No creo que estemos en condiciones de estar haciendo regalos a un sector muy pequeño en desmedro de un amplio sector de pequeños propietarios que necesitan urgente una asistencia”, aseguró Mayol.
El gobierno dijo que para paliar la situación se van a duplicar los fondos concursables para la preparación de suelos en un total de mil 800 millones de pesos.
