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Continúan presiones para remover a Otero de la Embajada de Chile en Argentina

Desde el diario El Clarín salieron del paso de las declaraciones del embajador del Chile en Argentina, Miguel Otero, desmintiendo que la entrevista fuera “a título personal” y rechazando las acusaciones de descontextualización que hizo el diplomático. En el país, agrupaciones de DDHH junto a parlamentarios de la Concertación continúan presionando para que el embajador salga de su cargo, mientras en la Alianza reconocen que fueron palabras innecesarias.

Diana Porras y Ricardo Salazar

  Martes 8 de junio 2010 16:53 hrs. 
Radio-Uchile

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La editora de la sección Mundo del diario Clarín, Hinde Pomeraniec, fue muy clara. La periodista  que realizó la entrevista al embajador de Chile en Argentina, Miguel Otero, donde el diplomático afirmó que “la mayoría de los chilenos no sintieron la dictadura”, desmintió que las declaraciones fueran sacadas de contexto como argumentó el ex senador RN.

Pomeraniec también cuestionó los dichos del embajador en relación a que sus palabras fueron dichas a “título personal”, tal como luego lo ratificó  la Cancillería chilena. “Un embajador es siempre un diplomático; no es excusa decir que la entrevista fue realizada a él como persona: el diario Clarín no le hubiera dedicado una página de su edición de papel al pensamiento de ‘una persona’ y sí lo hizo con él precisamente porque se trata del representante de Chile en la Argentina”, aseguró la periodista.

Además, el audio completo de la entrevista,  difundido por el sitio periodístico Ciper Chile, desmiente las acusaciones que hizo Otero sobre el medio transandino, en cuanto a que  lo publicado por El Clarín reprodujo solo  un mínimo de la conversación con el objetivo de “crear noticia que no corresponde a lo que realmente dije”.

En este escenario, diputados de la Concertación junto con dirigentes de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD) concurrieron hasta La Moneda para entregar una carta al Presidente Sebastián Piñera, donde se exige la renuncia del embajador de Chile en Argentina.

El diputado socialista Sergio Aguiló  fue enfático en señalar que si Piñera mantiene en el cargo de embajador a Otero, su discurso de campaña sobre la defensa de los DD.HH  habrá sido falso.

“El actual presidente señaló en toda su campaña que reconocía la existencia de la dictadura,  validaba el informe Valech y Retiig y era parte de ese consenso. Su representante en Argentina  ha dicho lo contrario. Hay dos alternativas: o sigue con este embajador y es el gobierno el que se desenmascara y todo lo dicho en la campaña es una mentira y o a este embajador se le pide la renuncia de inmediato porque es la imagen de Chile”, afirmó Aguiló.

Desde el Congreso, las declaraciones del embajador Otero continúan generando reacciones en la oposición y el oficialismo. Mientras en la Concertación continúan presionando para que el embajador salga de su cargo, en la Alianza señalan que la situación debe ser evaluada.

El senador del PS Juan Pablo Letelier afirmó que  Otero “se ha transformado  en una embajador inútil” y que  por coherencia con el gobierno de Piñera “debería dar un paso al lado”.

En este sentido, dijo que si el mandatario ratifica al diplomático en Argentina “premia a su amigo de vida, de partido, con unas vacaciones de cuatro años en Buenos Aires, porque, evidentemente, el gobierno argentino no lo va a cotizar mucho (…) Otros gobiernos frente a incidentes similares han cambiado los embajadores de inmediato”, sostuvo.

Por su parte, Lorena Pizarro, presidenta de la AFDD, explicó que esta ofensa debe ser castigada, pues Otero no sólo ofende a las víctimas de la dictadura, sino que también se hace cómplice de las violaciones a los derechos humanos.

“Lo que estamos demandando es que el gobierno tenga una actitud coherente con lo que ha señalado y retire de su cargo al embajador de Chile en Argentina, porque ha ofendido a las víctimas de violación a los derechos humanos, pero también ha transgredido lo que puede hacer cualquier representante de un país que se dice democrático. Cuando alguien defiende una dictadura y defiende a los violadores de derechos humanos, también se convierte en un cómplice de estos delitos”, indicó Pizarro.

En tanto, el senador de RN Alberto Espina, quien es además sobrino de Otero, respaldó los dichos del diplomático y sus posteriores excusas: “Miguel Otero tiene  una trayectoria pública que es intachable, él ya expresó su punto de vista, sus opiniones, sus excusas, revivir una situación que nosotros todos los chilenos queremos dejar como superado. Él es un embajador  que depende de la confianza del Presidente de la República con Argentina y ese es el plano en que debe desenvolverse”.

Y si bien en la UDI consideran que las palabras del embajador para El Clarín fueron a título personal,  el senador Hernán Larraín señaló que consideran grave el incidente, pero por las eventuales repercusiones y el uso político que se le pudiera dar en Argentina

“Se refieren a una evaluación personal que él ha hecho sobre un capítulo de la historia nacional. No fueron declaraciones necesarias, sirven para generar conflicto locales, pero que pueden tener efectos con algunos medios, ya que he oído algunas declaraciones de parlamentarios argentinos y están siendo utilizadas políticamente”, afirmó Larraín.

De todas maneras, Larraín señaló que no compartía los dichos de Otero y reconociendo las repercusiones de la entrevista, en la UDI respaldarán al gobierno en la determinación que tome.

Por otro lado, consultado en La Serena, donde se encuentra en una reunión de integración regional, por si ha conversado con el Presidente Piñera respecto a la polémica entrevista, Miguel Otero respondió escuetamente que “no”.

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