La apertura de un Museo de la Memoria en nuestro país propone una reflexión que trascienda el pasado y sirva a las nuevas generaciones para construir un futuro mejor de respeto irrestricto a la vida y la dignidad de las personas.
En este camino queda mucho aún por recorrer para conseguir un diálogo efectivo entre memoria e historia reciente, sobre todo, en varios países de América Latina, que no solo tienen en común la existencia de dictaduras, sino también, lamentablemente, de violaciones a los derechos humanos.
En este escenario se desarrolla el segundo seminario internacional “Historia y Memoria: Pedagogía de la memoria, derechos humanos e historia reciente” en la Universidad Academia de Humanismo Cristiano.
En el encuentro, la presidente de la Coorporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, Margarita Romero, señaló que es necesario traspasar a la comunidad todo el conocimiento acerca de las vivencias de cada país.
“El principal desafío, que además es una deuda de veinte años (…),es poder instaurar estos temas dentro de la educación Es muy importante para la prevención, para lo que ha significado históricamente la violación de los derechos humanos. El método preventivo tiene que ver en cómo nosotros educamos a nuestros jóvenes, nuestros hijos”, indicó Romero.
Los investigadores y profesores sacaron a la luz conceptos que fueron tratados al llegar la democracia en nuestro país como “perdón” o “reconciliación”, pero que se regían bajo construcciones políticas.
El llamado fue a reconocer y preservar la memoria en el espacio público. Silvia Finocchio, doctora en Ciencias Sociales por FLACSO y profesora en Historia de la Universidad de Buenos Aires, aseguró que la recopilación de la memoria tiene diversas aristas.
“Pensar la memoria en términos de su proyección hacia el futuro. No es reverencia al pasado, sino construcción de horizontes de expectativas y esto para la formación de las futuras generaciones es muy importante, como es también ver cómo se procesan a través de lo nuevos artefactos culturales”, sostuvo Finocchio.
Por su parte, la directora del Museo de la Memoria, Romy Schmidt concluyó que “sabemos que a la persona que le preguntemos la experiencia de la dictadura va a apuntar a una u otra memoria, y a veces muy contradictoria, sin embargo, es cierto que en los períodos posteriores hemos ido confluyendo determinados hitos y le hemos dado ciertos relatos a la memoria histórica”.
Amparo Delgado, del Museo de la Memoria en Uruguay, relató como de a poco están avanzando en esta materia en su país: “Es un camino que estamos arrancando, este es el segundo año que estamos trabajando. El museo se inauguró a fines de 2007 así que es un camino bien nuevo, en Uruguay no había antecedentes de este tipo, el tema de la enseñanza de la historia reciente, se integro a las currículas estudiantiles hace poco. Todo es muy nuevo, falta mucho por hacer, pero en eso estamos”, afirmó.
La mesa continúa durante esta jornada con el desarrollo de dos mesas de discusión que contarán con la presencia de representantes de Argentina y Uruguay que revisarán, entre otros temas, las trayectorias y propuestas para un diálogo educativo desde los lugares de la memoria.
La apertura de un Museo de la Memoria en nuestro país propone una reflexión que trascienda el pasado y sirva a las nuevas generaciones para construir un futuro mejor de respeto irrestricto a la vida y la dignidad de las personas.
En este camino queda mucho aún por recorrer para conseguir un diálogo efectivo entre memoria e historia reciente, sobre todo, en varios países de América Latina, que no solo tienen en común la existencia de dictaduras, sino también, lamentablemente, de violaciones a los derechos humanos.
En este escenario se desarrolla el segundo seminario internacional “Historia y Memoria: Pedagogía de la memoria, derechos humanos e historia reciente” en la Universidad Academia de Humanismo Cristiano.
En el encuentro, la presidente de la Coorporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, Margarita Romero, señaló que es necesario traspasar a la comunidad todo el conocimiento acerca de las vivencias de cada país.
“El principal desafío, que además es una deuda de veinte años (…),es poder instaurar estos temas dentro de la educación Es muy importante para la prevención, para lo que ha significado históricamente la violación de los derechos humanos. El método preventivo tiene que ver en cómo nosotros educamos a nuestros jóvenes, nuestros hijos”, indicó Romero.
Los investigadores y profesores sacaron a la luz conceptos que fueron tratados al llegar la democracia en nuestro país como “perdón” o “reconciliación”, pero que se regían bajo construcciones políticas.
El llamado fue a reconocer y preservar la memoria en el espacio público. Silvia Finocchio, doctora en Ciencias Sociales por FLACSO y profesora en Historia de la Universidad de Buenos Aires, aseguró que la recopilación de la memoria tiene diversas aristas.
“Pensar la memoria en términos de su proyección hacia el futuro. No es reverencia al pasado, sino construcción de horizontes de expectativas y esto para la formación de las futuras generaciones es muy importante, como es también ver cómo se procesan a través de lo nuevos artefactos culturales”, sostuvo Finocchio.
Por su parte, la directora del Museo de la Memoria, Romy Schmidt concluyó que “sabemos que a la persona que le preguntemos la experiencia de la dictadura va a apuntar a una u otra memoria, y a veces muy contradictoria, sin embargo, es cierto que en los períodos posteriores hemos ido confluyendo determinados hitos y le hemos dado ciertos relatos a la memoria histórica”.
Amparo Delgado, del Museo de la Memoria en Uruguay, relató como de a poco están avanzando en esta materia en su país: “Es un camino que estamos arrancando, este es el segundo año que estamos trabajando. El museo se inauguró a fines de 2007 así que es un camino bien nuevo, en Uruguay no había antecedentes de este tipo, el tema de la enseñanza de la historia reciente, se integro a las currículas estudiantiles hace poco. Todo es muy nuevo, falta mucho por hacer, pero en eso estamos”, afirmó.
La mesa continúa durante esta jornada con el desarrollo de dos mesas de discusión que contarán con la presencia de representantes de Argentina y Uruguay que revisarán, entre otros temas, las trayectorias y propuestas para un diálogo educativo desde los lugares de la memoria.
La apertura de un Museo de la Memoria en nuestro país propone una reflexión que trascienda el pasado y sirva a las nuevas generaciones para construir un futuro mejor de respeto irrestricto a la vida y la dignidad de las personas.
En este camino queda mucho aún por recorrer para conseguir un diálogo efectivo entre memoria e historia reciente, sobre todo, en varios países de América Latina, que no solo tienen en común la existencia de dictaduras, sino también, lamentablemente, de violaciones a los derechos humanos.
En este escenario se desarrolla el segundo seminario internacional “Historia y Memoria: Pedagogía de la memoria, derechos humanos e historia reciente” en la Universidad Academia de Humanismo Cristiano.
En el encuentro, la presidente de la Coorporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, Margarita Romero, señaló que es necesario traspasar a la comunidad todo el conocimiento acerca de las vivencias de cada país.
“El principal desafío, que además es una deuda de veinte años (…),es poder instaurar estos temas dentro de la educación Es muy importante para la prevención, para lo que ha significado históricamente la violación de los derechos humanos. El método preventivo tiene que ver en cómo nosotros educamos a nuestros jóvenes, nuestros hijos”, indicó Romero.
Los investigadores y profesores sacaron a la luz conceptos que fueron tratados al llegar la democracia en nuestro país como “perdón” o “reconciliación”, pero que se regían bajo construcciones políticas.
El llamado fue a reconocer y preservar la memoria en el espacio público. Silvia Finocchio, doctora en Ciencias Sociales por FLACSO y profesora en Historia de la Universidad de Buenos Aires, aseguró que la recopilación de la memoria tiene diversas aristas.
“Pensar la memoria en términos de su proyección hacia el futuro. No es reverencia al pasado, sino construcción de horizontes de expectativas y esto para la formación de las futuras generaciones es muy importante, como es también ver cómo se procesan a través de lo nuevos artefactos culturales”, sostuvo Finocchio.
Por su parte, la directora del Museo de la Memoria, Romy Schmidt concluyó que “sabemos que a la persona que le preguntemos la experiencia de la dictadura va a apuntar a una u otra memoria, y a veces muy contradictoria, sin embargo, es cierto que en los períodos posteriores hemos ido confluyendo determinados hitos y le hemos dado ciertos relatos a la memoria histórica”.
Amparo Delgado, del Museo de la Memoria en Uruguay, relató como de a poco están avanzando en esta materia en su país: “Es un camino que estamos arrancando, este es el segundo año que estamos trabajando. El museo se inauguró a fines de 2007 así que es un camino bien nuevo, en Uruguay no había antecedentes de este tipo, el tema de la enseñanza de la historia reciente, se integro a las currículas estudiantiles hace poco. Todo es muy nuevo, falta mucho por hacer, pero en eso estamos”, afirmó.
La mesa continúa durante esta jornada con el desarrollo de dos mesas de discusión que contarán con la presencia de representantes de Argentina y Uruguay que revisarán, entre otros temas, las trayectorias y propuestas para un diálogo educativo desde los lugares de la memoria.
