Las lluvias torrenciales en el sur de Francia dejaron al menos 15 muertos y dos desaparecidos, además de importantes daños materiales. Más de 200 mil hogares se encontraban sin electricidad. Las autoridades han movilizado a más de mil socorristas, 15 barcos y nueve helicópteros en la zona. La alerta naranja fue levantada, pero el temporal se desplaza hacia España.
Las autoridades locales informaron que cinco personas murieron en las localidades de Roquebrune-sur-Argens, Luc y Draguignan, y no han podido precisar dónde se produjeron los otros seis fallecimientos.
Las lluvias comenzaron el martes y en pocas horas anegaron toda la zona. El agua subió rápidamente 50 centímetros, unos minutos más tarde ya había llegado a 60 y pronto alcanzó los dos metros de altura en Draguignan.
“Esta mañana hemos encontrado el corazón de una ciudad devastada, muy dañado, con los restos de automóviles en las calles, carreteras colapsadas y daños en las infraestructuras”, describió un portavoz de las autoridades locales, que se vieron obligadas a movilizar nueve helicópteros, 15 barcos de intervención y unos 1.000 socorristas en la zona. En la noche del martes, además, al menos 200 mil casas se encontraban si suministro eléctrico.
La situación meteorológica ha mejorado en las últimas horas. Francia ha levantado la alerta naranja para un temporal que se desplaza hacia la costa española, según Meteo France, la agencia meteorológica francesa.
“Este episodio de fuertes lluvias en el País Vasco requiere una vigilancia especial, sobre todo porque el flujo se verá potenciado por el alto nivel de la marea y vientos de fuerza 7 con rachas de hasta 70 km a la hora”, precisó la agencia meteorológica francesa.
Las lluvias torrenciales en el sur de Francia dejaron al menos 15 muertos y dos desaparecidos, además de importantes daños materiales. Más de 200 mil hogares se encontraban sin electricidad. Las autoridades han movilizado a más de mil socorristas, 15 barcos y nueve helicópteros en la zona. La alerta naranja fue levantada, pero el temporal se desplaza hacia España.
Las autoridades locales informaron que cinco personas murieron en las localidades de Roquebrune-sur-Argens, Luc y Draguignan, y no han podido precisar dónde se produjeron los otros seis fallecimientos.
Las lluvias comenzaron el martes y en pocas horas anegaron toda la zona. El agua subió rápidamente 50 centímetros, unos minutos más tarde ya había llegado a 60 y pronto alcanzó los dos metros de altura en Draguignan.
“Esta mañana hemos encontrado el corazón de una ciudad devastada, muy dañado, con los restos de automóviles en las calles, carreteras colapsadas y daños en las infraestructuras”, describió un portavoz de las autoridades locales, que se vieron obligadas a movilizar nueve helicópteros, 15 barcos de intervención y unos 1.000 socorristas en la zona. En la noche del martes, además, al menos 200 mil casas se encontraban si suministro eléctrico.
La situación meteorológica ha mejorado en las últimas horas. Francia ha levantado la alerta naranja para un temporal que se desplaza hacia la costa española, según Meteo France, la agencia meteorológica francesa.
“Este episodio de fuertes lluvias en el País Vasco requiere una vigilancia especial, sobre todo porque el flujo se verá potenciado por el alto nivel de la marea y vientos de fuerza 7 con rachas de hasta 70 km a la hora”, precisó la agencia meteorológica francesa.
Las lluvias torrenciales en el sur de Francia dejaron al menos 15 muertos y dos desaparecidos, además de importantes daños materiales. Más de 200 mil hogares se encontraban sin electricidad. Las autoridades han movilizado a más de mil socorristas, 15 barcos y nueve helicópteros en la zona. La alerta naranja fue levantada, pero el temporal se desplaza hacia España.
Las autoridades locales informaron que cinco personas murieron en las localidades de Roquebrune-sur-Argens, Luc y Draguignan, y no han podido precisar dónde se produjeron los otros seis fallecimientos.
Las lluvias comenzaron el martes y en pocas horas anegaron toda la zona. El agua subió rápidamente 50 centímetros, unos minutos más tarde ya había llegado a 60 y pronto alcanzó los dos metros de altura en Draguignan.
“Esta mañana hemos encontrado el corazón de una ciudad devastada, muy dañado, con los restos de automóviles en las calles, carreteras colapsadas y daños en las infraestructuras”, describió un portavoz de las autoridades locales, que se vieron obligadas a movilizar nueve helicópteros, 15 barcos de intervención y unos 1.000 socorristas en la zona. En la noche del martes, además, al menos 200 mil casas se encontraban si suministro eléctrico.
La situación meteorológica ha mejorado en las últimas horas. Francia ha levantado la alerta naranja para un temporal que se desplaza hacia la costa española, según Meteo France, la agencia meteorológica francesa.
“Este episodio de fuertes lluvias en el País Vasco requiere una vigilancia especial, sobre todo porque el flujo se verá potenciado por el alto nivel de la marea y vientos de fuerza 7 con rachas de hasta 70 km a la hora”, precisó la agencia meteorológica francesa.
