Ingrid Betancourt renunció el domingo a reclamar una indemnización 48 horas después de que el ministro colombiano de Defensa hiciera público que la ex rehén colombo francesa había pedido a través de sus abogados 6,5 millones de dólares por su secuestro.
“No hay ni habrá ninguna demanda. No hay ningún ataque contra el gobierno que me liberó, contra el presidente (Alvaro) Uribe al cual le debo todo el agradecimiento ni contra las Fuerzas Militares. Las únicas culpables de mi secuestro son las FARC y quienes me liberaron fueron los héroes”, dijo Betancourt en una entrevista con Radio Caracol y el Canal Crarcol.
Según Betancourt, que hablaba desde un estudio de televisión en Nueva York, su iniciativa buscaba “un afán de solidaridad con otros secuestrados para que se les indemnice”.
“Esa suma que es astronómica y prácticamente absurda es simbólica, porque es muy difícil pretender tazar el sufrimiento de las familias víctimas del terrorismo. Esa suma no representa nada per sé, es la posibilidad de darle legitimidad a la aspiración de indemnización a otras muchas familias que merecen ser indemnizadas”, sostuvo.
Interrogada sobre las críticas que llovieron tras conocerse su voluntad de cobrar una indemnización millonaria, admitió: “Si, me arrepiento de haberlo hecho”.
“Es doloroso saber que esa fue la impresión que tuvieron los colombianos. Quiero decirles que yo amo a mi patria y que me duele mucho lo que ha sucedido”, dijo.
El viernes, el ministerio colombiano de Defensa reveló que Betancourt y sus familiares presentaron el 30 de junio dos solicitudes de conciliación extrajudicial, en las que piden una compensación monetaria de 13.000 millones de pesos (unos 6,5 millones de dólares).
La solicitud de Ingrid Betancourt -rescatada el 2 de julio de 2008 en la llamada Operación Jaque, tras más de seis años de cautiverio- desató en Colombia gran indignación, en especial por parte del Estado.
“Es un premio mundial a la ingratitud y a la desfachatez. Estoy indignado, triste y desilusionado”, declaró, entre otros, el vice-presidente colombiano Francisco Santos.