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Año XVI, 29 de marzo de 2024


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El real peso de la citación a Max Marambio a Cuba

Aunque el abogado del empresario aseguró que se trata sólo de un trámite administrativo, lo cierto es que el llamado a comparecer por delitos como cohecho, estafa, malversación y otros, implica un paso más hacia el precipicio isleño para Marambio pues, quienes conocen Cuba aseguran que en ese lugar del Caribe las investigaciones se inician cuando hay pruebas suficientes para condenar y los interrogatorios sirven para explicar cómo se llegó a eso y alcanzar a pedir perdón.

Sohad Houssein T

  Martes 20 de julio 2010 22:50 hrs. 
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Un punto de inflexión se produjo en la intrincada investigación por las irregularidades detectadas en las empresas mixtas manejadas por el empresario chileno Max Marambio y el gobierno de Cuba. El martes, la Gaceta Oficial daba cuenta de una citación del ministerio de Justicia cubano al ex coronel de las Tropas Especiales de Fidel Castro para comparecer como acusado por los cargos de “cohecho, actos en perjuicio de la actividad económica o la contratación, malversación, falsificación de documentos bancarios y de comercio y estafa”.

La citación es para el 29 de julio y, de no presentarse el antiguo amigo personal de Castro, “se corresponderá a librar la correspondiente requisitoria”, advierte la publicación. Pero lo cierto es que Max Marambio desde noviembre de 2009 que no pone un pie en la isla que lo formó en las tropas revolucionarias de izquierda, lo asiló luego del golpe de Estado y le permitió amasar una enorme fortuna con la que, entre otras cosas, financió la campaña presidencial de Marco Enríquez Ominami, actual líder del Partido Progresista, del que es su jefe político.

Pero las auditorías a Empresas Río Zaza y Sol y Son, las compañías mixtas en las que Marambio tiene su capital, comenzaron mucho antes de noviembre y, al parecer, el último intento por llegar a un acuerdo con el gobierno cubano, emprendido por el abogado Juan Pablo Hermosilla, fracasó. El representante legal de Marambio viajó a la isla el lunes 28 de junio y al día siguiente se reunió con el directorio de Río Zaza, la principal productora de alimentos y que tiene el monopolio de los envases treta pack, para intentar vender la participación del chileno y traspasarla completamente al Estado castrista.

Si bien la apertura de los accionistas estatales a estas negociaciones en el entorno de Marambio se interpretaron como una señal de que los cargos en su contra serían administrativos y no penales, por falta de antecedentes, la citación del ministerio de Justicia, y la larga lista de delitos que se le imputan, indicó todo lo contrario.

Y aunque su abogado, Eduardo Contreras, afirmó que la citación “no implica ningún juicio de valor sino que es simplemente es un trámite administrativo”,  todo indica que el llamado a comparecer marca un giro rotundo en el destino del “Guatón” – como le dicen en Cuba-  y sus relaciones con el país revolucionario. “La presunción, en el caso cubano, no es como acá. Se investiga cuando ya hay antecedentes”, cuenta una fuente cercana al régimen, por lo que el juicio se convierte solamente en una oportunidad para confesar.

“En Cuba hay un método, que es lo que explica esto, y es que ellos inician una investigación cuando tienen elementos contundentes para saber para dónde apunta el cuento. Es cosa de mirar la Historia cubana para saber que muchos procesos de esta naturaleza han sido irrefutables, incluso para tribunales internacionales”, agrega.

Idea que se reafirma desde la propia isla: “En el caso de Marambio, atendiendo la importancia que la empresa tiene, los que vivimos aquí sabemos que seguramente hay una investigación que data de hace mucho tiempo atrás y que obedece a que hay indicios de ilícitos. No me parece que sea porque apoyó a MEO o porque Fidel está enfermo y le cae mal a Raúl… me parece que es tener el ego demasiado grande pensar que es por eso”, afirma un extranjero residente en Cuba.

Y la Historia les da la razón. El 13 de julio de 1989 fueron fusilados en La Habana el general Arnaldo Ochoa, el militar más condecorado de la historia de ese país, junto al coronel del ministerio del Interior Antonio de la Guardia y dos oficiales. Ochoa, quien encabezó las fuerzas militares cubanas en Angola y fue nombrado Héroe de la República, se vio involucrado en el narcotráfico, la pedofilia y la corrupción. Cuentan que en su proceso el fiscal le dijo: “mira Ochoa, tú tuviste relaciones con narcotraficantes mexicanos y colombianos”, acusación que negó, pero el inquisidor le respondió: “no te estoy preguntando” y le mostró las pruebas de su investigación. Lo mismo hizo al encararle el lavado de dinero y sus relaciones sexuales con adolescentes, hasta que finalmente le dijo: “lo que queremos preguntarte es cómo llegaste a eso”. Al general no le quedó más que pedir perdón y prepararse para el paredón. Lo mismo pasaría luego con otros emblemáticos de la revolución, como Pérez Roque y Lage, aunque la pena no sería de muerte.

Enjambre de ilícitos

“A Raúl le tocó bailar con la fea”, asegura un conocedor del régimen cubano, quien explica que las indagatorias a las empresas de Marambio se enmarcan en un proceso de “limpieza de casa” emprendido por el actual gobernante en una isla donde “no existe la institucionalidad sino la cultura de ‘resolver’ por el lado”. Práctica a la que el chileno tuvo amplio acceso gracias a su cercanía con el Presidente.

“Raúl Castro dice que hay más de ochocientas empresas a fiscalizar porque están en una campaña general contra la corrupción, ese un problema bastante complicado en Cuba, y está tratando de cambiar las cosas en ese sentido”, afirma Guillermo Teillier, diputado y presidente del Partido Comunista.

El parlamentario agrega que estas auditorías se deben a que “en Cuba hay una readecuación del modelo económico que está impulsado por la crisis, por la falta de divisas que tiene en este momento, que es lo que provocó lo que aquí se llamó el corralito y que retuvo las divisas que tenían en la banca cubana las empresas”.

Precisamente a ese “corralito” atribuyó el entorno de Marambio su quiebre con el régimen, argumentando que el cierre de Río Zaza en febrero y el despido de quinientos trabajadores se debió a que el gobierno isleño le tenía retenidos treinta millones de dólares por la cesación de pagos. Además señalaron que es víctima de una persecución por haber apoyado a MEO. Sin embargo, desde el comunismo aseguran que en la isla veían con buenos ojos y apoyaron la candidatura de Enríquez Ominami por ser hijo del revolucionario Miguel Enríquez.

Aunque sí fueron problemas con la escasez de divisas las que provocaron los problemas de Marambio, pero no por cesación de pagos.

El 8 marzo fue destituido el presidente del Instituto de Aeronáutica Civil, Rogelio Acevedo González, uno de los generales emblemáticos de la Revolución, según fuentes extraoficiales, por estar vinculado a la malversación de fondos y desvío de divisas a través de Cubana de Aviación, en lo que estarían involucrados los hermanos Max y Marcel Marambio, quienes habrían eludido la congelación de fondos a las empresas extranjeras enviando el dinero afuera. La esposa del general Acevedo, Ofelia Liptak, era directora comercial de Río Zaza y ocupaba un cargo en el holding ING, de los Marambio.

Asimismo, Lucy Leal, directora ING y de la agencia de viajes Sol y Son, fue detenida por sobornos, malversación de fondos y desvío de recursos al exterior.

El ex ministro de la Industria Alimenticia, Alejandro Roca Iglesias, quien fue sacado de su cargo por Raúl Castro en marzo del 2009 junto a otros “emblemáticos”, también estaría vinculado a los ilícitos del “Guatón”. Precisamente, su hijo, Alexis Roca, vive en Chile donde el gerente general de Gran Mundo Desarrollos Inmobiliarios, parte de las inversiones de ING.

Los medios disidentes también relacionan al chileno con Alexis Mejías, un militar retirado propietario de TDR Caribe, cuatrocientos locales de cambio de divisas, y quien, junto a su esposa, habrían sido detenidos por corrupción.

Respecto de Río Zaza, empresarios aseguran que habría despertado la ira del régimen el sobreprecio que imponía Marambio a los alimentos. Sobre todo con la leche, ya que la empresa era la mayor productora e importadora en Cuba y el gobierno reparte medio litro diario a cada niño.

Entre los colaboradores de Max que fueron interrogados en esta investigación se encontraba el chileno Roberto Baudrand, gerente general de Río Zaza y ex gerente de la lechera Parmalat en Chile. El ejecutivo fue encontrado muerto en su departamento el 13 de abril, la causa del fallecimiento correspondería a una insuficiencia respiratoria provocada por el consumo de medicamentos y alcohol. Probablemente a Baudrand le habían contado la historia del interrogatorio al general Ochoa. Seguramente Marambio conoce bien el proceso de las investigaciones en su antigua Isla del Tesoro.

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