Cerca de cinco mil personas acudieron este sábado a la ceremonia fúnebre del ex Senador y ecretario general del Partido comunista, Luis Corvalán Lepez, quien falleció el pasado miércoles a los 93 años de edad producto de una pulmonía.
Tal como en los días de velorio, los restos del dirigente comunista fueron acompañados masivamente desde la sede del ex Congreso Nacional hasta el Cementerio General.
Entre los asistentes destacó la presencia de la viuda del ex jerarca de la República Democrática Alemana Erich Honecker, Margot, que definió a Corvalán como “un gran chileno, un gran patriota y un gran dirigente, para Chile y demás pueblos de América Latina”.
En la ceremonia hablaron familiares de Corvalán y el ex ministro de la Unidad Popular, Aníbal Palma, quien lo hizo en representación de sus compañeros de prisión en Isla Dawson, evocando su entereza para enfrentar la dictadura.
“En las condiciones adversas es cuando se muestra el temple y fortaleza de los verdaderos líderes y las condiciones en ese inhóspito y remoto lugar de nuestra geografía no podían ser más adversas. Se ensañaron con él. No podían comprender y mucho menos aceptar que un hombre de apariencia frágil, que se acercaba a la tercera edad, no se atemorizaba ante el despliegue brutal de la fuerza, las amenazas y el maltrato. Y en las peores circunstancias mantuviera su dignidad y entereza, y más aun que se diera tiempo para brindar apoyo y aliento a sus compañeros. Luis Corvalán fue un ejemplo de preso político y de compromiso solidario”, afirmó Palma.
En representación del Partido Comunista su actual presidente, el diputado Guillermo Teillier, enfatizó el activo interés del ex parlamentario en la situación política actual. “En los últimos años de su vida fue un tenaz promotor de que el Partido Comunista debía retornar al parlamento. Muchas veces don Lucho decía que ya había pasado demasiado tiempo político sin la presencia de los comunistas en el Parlamento y que eso era peligroso para la democracia chilena. Tenía muy claro que llegar al Congreso significaba un hito muy positivo en la construcción de un camino duro y complejo, que requería amplias alianzas y la ascendente lucha popular para terminar con el legado dictatorial”, indicó Teiller.
A las exequias acudieron además las embajadoras de Cuba, Ileana Díaz-Argüelles, y de Venezuela, María Lourdes Urbaneja y tanto Fidel Castro como Hugo Chávez enviaron sus condolencias a la familia.
Cerca de cinco mil personas acudieron este sábado a la ceremonia fúnebre del ex Senador y ecretario general del Partido comunista, Luis Corvalán Lepez, quien falleció el pasado miércoles a los 93 años de edad producto de una pulmonía.
Tal como en los días de velorio, los restos del dirigente comunista fueron acompañados masivamente desde la sede del ex Congreso Nacional hasta el Cementerio General.
Entre los asistentes destacó la presencia de la viuda del ex jerarca de la República Democrática Alemana Erich Honecker, Margot, que definió a Corvalán como “un gran chileno, un gran patriota y un gran dirigente, para Chile y demás pueblos de América Latina”.
En la ceremonia hablaron familiares de Corvalán y el ex ministro de la Unidad Popular, Aníbal Palma, quien lo hizo en representación de sus compañeros de prisión en Isla Dawson, evocando su entereza para enfrentar la dictadura.
“En las condiciones adversas es cuando se muestra el temple y fortaleza de los verdaderos líderes y las condiciones en ese inhóspito y remoto lugar de nuestra geografía no podían ser más adversas. Se ensañaron con él. No podían comprender y mucho menos aceptar que un hombre de apariencia frágil, que se acercaba a la tercera edad, no se atemorizaba ante el despliegue brutal de la fuerza, las amenazas y el maltrato. Y en las peores circunstancias mantuviera su dignidad y entereza, y más aun que se diera tiempo para brindar apoyo y aliento a sus compañeros. Luis Corvalán fue un ejemplo de preso político y de compromiso solidario”, afirmó Palma.
En representación del Partido Comunista su actual presidente, el diputado Guillermo Teillier, enfatizó el activo interés del ex parlamentario en la situación política actual. “En los últimos años de su vida fue un tenaz promotor de que el Partido Comunista debía retornar al parlamento. Muchas veces don Lucho decía que ya había pasado demasiado tiempo político sin la presencia de los comunistas en el Parlamento y que eso era peligroso para la democracia chilena. Tenía muy claro que llegar al Congreso significaba un hito muy positivo en la construcción de un camino duro y complejo, que requería amplias alianzas y la ascendente lucha popular para terminar con el legado dictatorial”, indicó Teiller.
A las exequias acudieron además las embajadoras de Cuba, Ileana Díaz-Argüelles, y de Venezuela, María Lourdes Urbaneja y tanto Fidel Castro como Hugo Chávez enviaron sus condolencias a la familia.
Cerca de cinco mil personas acudieron este sábado a la ceremonia fúnebre del ex Senador y ecretario general del Partido comunista, Luis Corvalán Lepez, quien falleció el pasado miércoles a los 93 años de edad producto de una pulmonía.
Tal como en los días de velorio, los restos del dirigente comunista fueron acompañados masivamente desde la sede del ex Congreso Nacional hasta el Cementerio General.
Entre los asistentes destacó la presencia de la viuda del ex jerarca de la República Democrática Alemana Erich Honecker, Margot, que definió a Corvalán como “un gran chileno, un gran patriota y un gran dirigente, para Chile y demás pueblos de América Latina”.
En la ceremonia hablaron familiares de Corvalán y el ex ministro de la Unidad Popular, Aníbal Palma, quien lo hizo en representación de sus compañeros de prisión en Isla Dawson, evocando su entereza para enfrentar la dictadura.
“En las condiciones adversas es cuando se muestra el temple y fortaleza de los verdaderos líderes y las condiciones en ese inhóspito y remoto lugar de nuestra geografía no podían ser más adversas. Se ensañaron con él. No podían comprender y mucho menos aceptar que un hombre de apariencia frágil, que se acercaba a la tercera edad, no se atemorizaba ante el despliegue brutal de la fuerza, las amenazas y el maltrato. Y en las peores circunstancias mantuviera su dignidad y entereza, y más aun que se diera tiempo para brindar apoyo y aliento a sus compañeros. Luis Corvalán fue un ejemplo de preso político y de compromiso solidario”, afirmó Palma.
En representación del Partido Comunista su actual presidente, el diputado Guillermo Teillier, enfatizó el activo interés del ex parlamentario en la situación política actual. “En los últimos años de su vida fue un tenaz promotor de que el Partido Comunista debía retornar al parlamento. Muchas veces don Lucho decía que ya había pasado demasiado tiempo político sin la presencia de los comunistas en el Parlamento y que eso era peligroso para la democracia chilena. Tenía muy claro que llegar al Congreso significaba un hito muy positivo en la construcción de un camino duro y complejo, que requería amplias alianzas y la ascendente lucha popular para terminar con el legado dictatorial”, indicó Teiller.
A las exequias acudieron además las embajadoras de Cuba, Ileana Díaz-Argüelles, y de Venezuela, María Lourdes Urbaneja y tanto Fidel Castro como Hugo Chávez enviaron sus condolencias a la familia.
