Trabajadores de Canal 13 rechazan venta de la estación televisiva
El Sindicato de Trabajadores de la estación católica criticó el proceso de privatización llevado adelante por el rector Ignacio Sánchez, enfatizando que la operación representa una traición a los principios de la Iglesia Católica. Por su lado, el senador UDI, profesor de la UC y ex vicerrector de Comunicaciones de la casa de estudios, Hernán Larraín, también se mostró dolido por la enajenación del Canal.
Domingo 8 de agosto 2010 23:18 hrs.
El sorpresivo traspaso del 67% de la propiedad de Canal Trece al grupo Luksic generó el rechazo de varios sectores ligados a la televisora.
En ese plano, el Sindicato de Trabajadores de la estación católica criticó el proceso de privatización llevado adelante por el rector Ignacio Sánchez, enfatizando que la operación representa una traición a los principios de la Iglesia Católica.
A través de la lectura de una declaración pública, el secretario general del gremio, René Reyes, agregó que el patrimonio televisivo de la Universidad Católica se vendió a un precio vil, causando una enorme lesión a los intereses del plantel.
“Una persona honorable, así como una autoridad puede cambiar de opinión, pero cuando esto ocurra tiene el deber de transparencia de explicar las razones de su cambio de pensamiento y eso es actuar en consecuencia, nada de ello ha ocurrido, simplemente se traicionó la palabra empeñada balbuceando una justificación que de nueva no tiene nada, como los cambios tecnológicos en la industria de la Televisión. La verdad es que Canal 13 se ha vendido en un precio vil, causando una lesión enorme a la universidad”, enfatizó el dirigente sindical de Canal 13.
En tanto, el senador UDI, profesor de la UC y ex vicerrector de Comunicaciones de la casa de estudios, Hernán Larraín, también se mostró dolido por la enajenación de Canal Trece, pues a su juicio la estación era parte sustancial del patrimonio cultural del país.
“Renunciar en su tarea evangelizadora al principal medio audiovisual de la época, me parece simplemente algo difícil de entender”, subrayó el senador.
El ingreso de un nuevo socio estratégico y accionista mayoritario de la sociedad significará el pagó a la Universidad de 55 millones de dólares, que destinará a consolidar la deuda financiera del canal, cuya gestión ha presentado números rojos y una baja en la audiencia durante los últimos años.
En la promesa de compra se contempla que la UC pueda ejercer una opción de compra del 17 por ciento para llegar a la mitad de la propiedad dentro de los próximos años.
El sorpresivo traspaso del 67% de la propiedad de Canal Trece al grupo Luksic generó el rechazo de varios sectores ligados a la televisora.
En ese plano, el Sindicato de Trabajadores de la estación católica criticó el proceso de privatización llevado adelante por el rector Ignacio Sánchez, enfatizando que la operación representa una traición a los principios de la Iglesia Católica.
A través de la lectura de una declaración pública, el secretario general del gremio, René Reyes, agregó que el patrimonio televisivo de la Universidad Católica se vendió a un precio vil, causando una enorme lesión a los intereses del plantel.
“Una persona honorable, así como una autoridad puede cambiar de opinión, pero cuando esto ocurra tiene el deber de transparencia de explicar las razones de su cambio de pensamiento y eso es actuar en consecuencia, nada de ello ha ocurrido, simplemente se traicionó la palabra empeñada balbuceando una justificación que de nueva no tiene nada, como los cambios tecnológicos en la industria de la Televisión. La verdad es que Canal 13 se ha vendido en un precio vil, causando una lesión enorme a la universidad”, enfatizó el dirigente sindical de Canal 13.
En tanto, el senador UDI, profesor de la UC y ex vicerrector de Comunicaciones de la casa de estudios, Hernán Larraín, también se mostró dolido por la enajenación de Canal Trece, pues a su juicio la estación era parte sustancial del patrimonio cultural del país.
“Renunciar en su tarea evangelizadora al principal medio audiovisual de la época, me parece simplemente algo difícil de entender”, subrayó el senador.
El ingreso de un nuevo socio estratégico y accionista mayoritario de la sociedad significará el pagó a la Universidad de 55 millones de dólares, que destinará a consolidar la deuda financiera del canal, cuya gestión ha presentado números rojos y una baja en la audiencia durante los últimos años.
En la promesa de compra se contempla que la UC pueda ejercer una opción de compra del 17 por ciento para llegar a la mitad de la propiedad dentro de los próximos años.
El sorpresivo traspaso del 67% de la propiedad de Canal Trece al grupo Luksic generó el rechazo de varios sectores ligados a la televisora.
En ese plano, el Sindicato de Trabajadores de la estación católica criticó el proceso de privatización llevado adelante por el rector Ignacio Sánchez, enfatizando que la operación representa una traición a los principios de la Iglesia Católica.
A través de la lectura de una declaración pública, el secretario general del gremio, René Reyes, agregó que el patrimonio televisivo de la Universidad Católica se vendió a un precio vil, causando una enorme lesión a los intereses del plantel.
“Una persona honorable, así como una autoridad puede cambiar de opinión, pero cuando esto ocurra tiene el deber de transparencia de explicar las razones de su cambio de pensamiento y eso es actuar en consecuencia, nada de ello ha ocurrido, simplemente se traicionó la palabra empeñada balbuceando una justificación que de nueva no tiene nada, como los cambios tecnológicos en la industria de la Televisión. La verdad es que Canal 13 se ha vendido en un precio vil, causando una lesión enorme a la universidad”, enfatizó el dirigente sindical de Canal 13.
En tanto, el senador UDI, profesor de la UC y ex vicerrector de Comunicaciones de la casa de estudios, Hernán Larraín, también se mostró dolido por la enajenación de Canal Trece, pues a su juicio la estación era parte sustancial del patrimonio cultural del país.
“Renunciar en su tarea evangelizadora al principal medio audiovisual de la época, me parece simplemente algo difícil de entender”, subrayó el senador.
El ingreso de un nuevo socio estratégico y accionista mayoritario de la sociedad significará el pagó a la Universidad de 55 millones de dólares, que destinará a consolidar la deuda financiera del canal, cuya gestión ha presentado números rojos y una baja en la audiencia durante los últimos años.
En la promesa de compra se contempla que la UC pueda ejercer una opción de compra del 17 por ciento para llegar a la mitad de la propiedad dentro de los próximos años.
