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Año XVI, 29 de marzo de 2024


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Ambientalistas argentinos retoman protestas por instalación de papelera a orillas del río Uruguay

Los ambientalistas rompieron la tregua y anunciaron que volverían a bloquear la frontera. Según los piqueteros de la ciudad argentina de Gualeguaychú, la fábrica contamina el curso de agua. La Corte internacional de La Haya sostuvo en un fallo lo contrario. Consideran fracasado el acuerdo bilateral para el monitoreo de la planta.

Radio Francia Internacional

  Jueves 26 de agosto 2010 15:03 hrs. 
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Disconformes con las gestiones oficiales y luego de un debate tenso, la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú decidió retomar las protestas por la instalación de la papelera finlandesa en el margen opuesto del río. Aunque la Corte Internacional de la Haya dictaminó en abril que la fábrica no contamina, los piqueteros han preferido seguir librando su guerra privada con el blanco puesto en las autoridades argentinas. Así, la tregua de 60 días pasa al recuerdo.

El bloqueo no será permanente –sólo se cortará el paso internacional que une Gualeguaychú con la ciudad de Fray Bentos, en la orilla uruguaya, los domingos y por espacio de dos horas. Sin embargo, el conflicto amaga otra vez con tomar temperatura y convertirse en un dolor de cabeza para el gobierno de Cristina Kirchner de acá a fin de año.

Las propuestas que se barajaban eran dos: la de la línea dura, volver a los cortes; los moderados querían seguir “en alerta”, pero desde el costado de la carretera, sin interrumpir el paso. La idea de los cortes parciales fue presentada por Paola Robles. Citada pro el diario argentino La Nación, Robles expresó: “Confiamos en la palabra de la Presidenta y del canciller (Héctor Timerman), pero tenemos palabra: dijimos que retomábamos la lucha si el conflicto seguía”.

La Asamblea que dictaminó volver a los cortes no fue multitudinaria –unas 250 personas, a pesar de que la convocatoria estaba abierta a toda la ciudad-, pero sus conclusiones fueron convincentes: “El conflicto no está cerrado y sólo cesará con el desmantelamiento del planta”, sostuvo uno de los oradores. Los asambleístas dejaron trascender que se sienten engañados por las autoridades argentinas, quienes les habían prometido un monitoreo conjunto de la planta.

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